La iniciativa de tango al aire libre "Luces de Milonga" cumple hoy dos años de prácticas y encuentros en la glorieta de plaza Belgrano. Cada domingo suma adeptos entre los transeúntes que se acercan.
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La iniciativa de tango al aire libre "Luces de Milonga" cumple hoy dos años de prácticas y encuentros en la glorieta de plaza Belgrano. Cada domingo suma adeptos entre los transeúntes que se acercan.
"Estamos celebrando el segundo aniversario y estamos contentos del éxito logrado en el sentido de atraer cada vez más gente que se anima a bailar, o disfruta viendo y compartiendo el atardecer en la milonga", explicó Neyen Chosco, una de las organizadoras del ciclo permanente de tango.
La propuesta surgió de un grupo de amigos integrado por Neyen y Lilen Chosco, Liliana Alfaro y José Ignacio Irrumberry quienes buscaban abrir un espacio libre, sin códigos excluyentes para practicar el ritmo y no dejar de aprender. Surgió en una clase de tango que dictaba Carla Zarzoso, en el Centro Cultural Coquena quien instaba a bailar desde las primeras prácticas.
Cada domingo se renueva la propuesta y se afianza con el interés de turistas y transeúntes que se interesan por el ritmo y se animan a practicarlo, además de los milongueros que son parte de la comunidad que está en todos los espacios tangueros.
"Hay muchos turistas, gente que pasea y busca algo para ver y se suma. Hay gente mayor que en su juventud bailaba y le gusta la propuesta, se queda y valora la propuesta, la disfruta. Esto une diferentes generaciones", precisó Chosco.
Este espacio abierto y gratuito, fue distinguido por "La milonga del Tizón" durante la semana del tango del año pasado como "Milonga urbana", y suma el reconocimiento general de la gente. La idea se viene realizando en varias provincias, la Milonga popular de plaza Lugones y La práctica de La Mármol, de Santiago del Estero, y en Tucumán en dos plazas diferentes.