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La Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip) secuestró cocaína en el paso de frontera La Quiaca-Villazón, a través de la Aduana. El estupefaciente estaba oculto en un auto con matrícula argentina procedente de Bolivia.
Los acontecimientos se remontan al sábado por la tarde, pero recién pudo conocerse en las últimas horas.
El contrabando fue descubierto, cuando personal de la Afip detuvo para un control de rutina a un vehículo que intentaba ingresar a territorio argentino.
Tras someterlo a un control con el camión-escaner, se detectó una diferencia de densidad en los laterales del vehículo que llamó la atención y llevó a los agentes aduaneros a desarmar la camioneta.
Encuentran los paquetes
Utilizando herramientas especiales buscaron en los sectores donde el escáner indicaba había irregularidades, al abrir el chasis paquetes de forma rectangular quedaron a la vista.
Como resultado, se hallaron varios paquetes que totalizaban 22 kilos de cocaína, todos prolijamente acomodados en el chasis del vehículo imperceptibles para el ojo humano.
Fuentes cercanas a la investigación señalaron que el método utilizado para detectar la droga fueron imágenes de escáner y verificación manual exhaustiva, además de la presunción el único detenido estaría cometiendo un ilícito.
El único ocupante tenía residencia en Buenos Aires pero es de origen boliviano, además de la droga transportaba otros elementos, por lo que suponen si lograba cruzar trasladaría la droga junto a otras personas.
Luego de realizado el secuestro se solicitó la colaboración de Gendarmería Nacional en el resguardo del inculpado, además se notificó la novedad al Juzgado Federal interviniente quien ordenó el secuestro de la droga y la detención del implicado.
Según el aforo aduanero la droga está valuada en 250 mil dólares.
Nuevamente gracias al escáner que posee el paso fronterizo detectaron cuerpos extraños ocultos en el rodado.
Por lo que personal aduanero procedió a requisar el vehículo.