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Imputaron al marido de Jimena Salas por supuesto encubrimiento

El hombre se presentó esta tarde a declarar y conoció causa de imputación pero no quedó detenido.

Miércoles, 26 de junio de 2019 20:31

Nicolás Federico Cajal Gauffin declaró esta tarde ante los nuevos fiscales que investigan la muerte de su esposa Jimena Salas, quien murió a puñaladas el 27 de enero de 2017, en Vaqueros. Luego de más de cinco horas de declaración, el hombre quedó imputado en la causa por el supuesto encubrimiento agravado, pero no quedó detenido.

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Nicolás Federico Cajal Gauffin declaró esta tarde ante los nuevos fiscales que investigan la muerte de su esposa Jimena Salas, quien murió a puñaladas el 27 de enero de 2017, en Vaqueros. Luego de más de cinco horas de declaración, el hombre quedó imputado en la causa por el supuesto encubrimiento agravado, pero no quedó detenido.

Cajal llegó a la Ciudad Judicial, pasadas las 14.30, junto a su abogado Pedro Arancibia. Predispuesto a defenderse, primero, ante los medios, negó todo y se mostró predispuesto a prestarse a todo trámite requerido en esta nueva instancia para esclarecer el crimen de quien fuera su esposa.

Pese a que en las afueras de la Ciudad Judicial, un grupo de amigos y familiares manifestaba su apoyo a Nicolás Cajal quedó imputado por supuesto encubrimiento del crimen de Jimena Beatriz Salas. Los fiscales le hicieron conocer las pruebas en su contra, tras lo cual Cajal pidió ser interrogado en ese acto, lo que demandó casi cinco horas.

A su llegada, el viudo de Jimena Salas se mostró predispuesto a defenderse ante los medios: “Quiero que se esclarezca el caso porque lo único que buscamos es justicia para Jimena, para mis hijas y para mí”, comenzó diciendo Nicolás Cajal ante los medios, y admitió que en este momento existen “un montón de hipótesis, como la del robo, pero es extraño que Jimena abra la puerta porque era muy precavida”. Y ante uno de los puntos que más se cuestionan en el primer tramo de la investigación, como la cremación de los restos de la mujer, Cajal contó cómo se llegó a tal decisión: “El fiscal se comunicó con la mamá de Jimena, y un pedido de ella era que cuando muera se creme su cuerpo. Esto se hizo 72 horas después cuando se entregó el cuerpo. Aclaro que yo no lo pedí, sino que fue la mamá de Jimena”, se escudó.

Luego dijo que no hay nada previsible en la causa, “con tantos cambios, cualquier cosa se puede esperar”. Luego, calificó a quien fuera su esposa como “una excelente persona y una excelente mujer, y no tengo por qué pensar que alguien le haya querido hacer daño. Nunca sufrimos amenazas, sino que éramos una familia que vivía tranquila”.

Al ser consultado sobre la detención de Vargas, quien actualmente sigue privado de su libertad, Cajal siguió el hilo de su abogado Arancibia y opinó que “es un perejil, porque es una persona no conozco y las pruebas genéticas no coincidían en nada”.

“Mi hija fue clara, teniendo tres años, diciendo que un señor malo le pegó con un cuchillo a su mamá y las encerró en el baño a ella y a su hermana”.

 

Imputación

Los fiscales penales de UGAP, Ana Inés Salinas Odorisio y Gustavo Torres Rubelt, hicieron conocer a Nicolás Federico Cajal Gauffin, de 45 años, las pruebas reunidas en su contra y lo imputaron por supuesto encubrimiento agravado en perjuicio de Jimena Beatriz Salas, ocurrido el 27 de enero de 2017. Cajal declaró durante más de dos horas.

 

Las pruebas

Según consta en el acta de imputación, una nueva valoración de los elementos colectados durante la investigación indica que Cajal habría convencido a la madre de Jimena Salas para que el cuerpo de la víctima fuera cremado, después de la muerte violenta de su concubina, lo que “hace sospechar que el mismo tenía la intención de ocultar una evidencia importante”.

Otro dato de relevancia que lo incriminaría en el supuesto encubrimiento agravado, es que durante las distintas declaraciones que brindó oportunamente, Cajal habría ocultado al menos tres números de teléfono que tenía al momento del hecho.

Según los fiscales, surgió también como sospechosa la conducta del imputado, respecto de su actitud en la escena del hecho, su reacción ante el hallazgo del cuerpo de quien fuera su pareja y las contradicciones en las que incurrió en sus declaraciones en relación al recorrido realizado para dirigirse al domicilio el día del homicidio de Jimena Salas.

En el decreto de imputación, los fiscales Salinas Odorisio y Torres Rubelt dejaron expresa constancia de que la calificación podría modificarse, como consecuencia de los resultados que con posterioridad arroje la investigación. Ratificaron que sigue vigente la reserva de las actuaciones del legajo.