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Refugio para personas en situación de calle en Perico

Depende de la Diócesis de Jujuy y recibe la ayuda de la comuna, gobierno y de fieles. Tiene capacidad para 16 personas.
Martes, 09 de julio de 2019 01:02

Como responsable de la parroquia San José Obrero de Ciudad Perico y delegado diocesano para los medios de comunicación, el presbítero Germán Maccagno detalló la tarea que se realiza en el refugio "San José" dependiente de la Diócesis de Jujuy, destinado a personas en situación de calle en esa ciudad, y que ha cumplido en junio dos años de servicio.

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Como responsable de la parroquia San José Obrero de Ciudad Perico y delegado diocesano para los medios de comunicación, el presbítero Germán Maccagno detalló la tarea que se realiza en el refugio "San José" dependiente de la Diócesis de Jujuy, destinado a personas en situación de calle en esa ciudad, y que ha cumplido en junio dos años de servicio.

Al respecto comentó que iniciaron este refugio en el Año de la Misericordia bajo el lema "Dame una mano, haz un lugar para tu hermano", "viendo que en un huequito en el recodo de la parroquia, al lado del templo, solía dormir gente. Así que un día lo tratamos con toda la comunidad y haciendo un buen discernimiento decidimos hacer un refugio para la personas de la calle y allí nació esto con la ayuda de la gente. Por eso es que hay quien colabora todos los días, atiende también junto a algún personal del municipio que nos ayuda sobre todo con la guardia. Los serenos que cuidan un poco para que no haya dificultades y alguno que ayuda para servir a la gente. Tenemos también gente de los planes que da el gobierno que cumplen su servicio allí, así que ellos limpian, dan el desayuno a la gente, con lo que todo está medianamente cubierto. También, algunas familias llevan la cena un día de la semana y es muy aleatorio el número, porque hay noches que hay cinco o seis personas y otras veces hay doce o trece, aunque difícilmente se llena. Es gente que no quiere quedarse, come y se va. La gente de la calle es todo un tema muy complejo. Hay muchos que están en la calle por un tiempo y hay otros que quieren estar allí porque se acostumbraron. Tenemos una persona que lo veíamos diariamente en un lugar frente a la plaza donde se sentaba y dormía. Bueno, insistimos bastante para que pueda ir por lo menos para dormir bajo techo en el refugio y finalmente fue, pero dormía sentado, porque ya se acostumbró a esa postura. Hay de todo, hay gente que pasa, hay gente extranjera que ha estado unos cuántos días y hasta dejó sus cosas allí guardadas y se fue a otro país, por lo que hay una variedad muy grande de situaciones".

COMODIDADES / TIENE CAPACIDAD PARA 16 PERSONAS, PERO SÓLO ASISTEN UNAS SEIS.

Destacó que el refugio es el único que es administrado por la parroquia que pertenece a la Diócesis de Jujuy, y lo lleva adelante con un convenio que hicieron con el municipio para tener sobre todo el servicio del sereno y algún personal que colabora. Maccagno detalló que el refugio tiene "dos dormitorios con capacidad para 16 personas aproximadamente, con un comedor para que cenen, un depósito, un salón que se usa para talleres de costura, manualidades, de pastelería y panadería. Los fines de semana se hace pan, se vende y con eso solventamos algunos de los gastos de Cáritas. En otro lugar también se hacen cursos de construcción en seco o durlock; de electricidad, de computación, tratando no solamente que se les de cosas sino también que se capacite a la gente".

"El refugio se abre a las 19 para la gente en situación de calle, hay baños con duchas con agua caliente, se les da la cena, también un poco de catequesis, y después se van a dormir. Al otro día se les sirve el desayuno y después cada uno va a sus tareas o cosas habituales que realiza", indicó el sacerdote.

Iglesia abierta con sus servicios

PADRE GERMÁN MACCAGNO.

La mayoría de la gente que asiste al refugio “duerme o vive en la calle. Alguna se va recuperando, ya que consigue un trabajito, una pieza o pensión, por lo que se va tratando de hacer un trabajo de promoción humana, para que la gente no solamente reciba sino también ayudarla a ganarse el pan y a vivir dignamente. Se le da ropa y también mercadería, porque forma parte de la tarea que hace Cáritas, también cursos. El refugio está destinado solo a varones, porque la gente en situación de calle son todos hombres. Por ahí llega alguna mujer con chicos a lo que tratamos de solucionar en la medida de lo posible o le buscamos otro lugar adecuado para que pueda estar”.
Destacó Maccagno que los cursos son para todo público y se hacen con la fundación Educando, mientras otros se dan en el local de Cáritas Perico, como por ejemplo panadería, pastelería y cotillón. “Hay gente que llega, come y se va, no quieren estar con otros, pero espera que la comunidad siga colaborando, y sobre todo con la cena, porque les resulta difícil hacerla por falta de mercadería o tiempo para hacerla”.
En referencia al pedido para que abran las iglesias para ayudar a gente para que no sufra con el frío, el sacerdote afirmó que “la iglesia está abierta, porque no es solamente el templo sino los servicios que brinda a la gente más necesitada. Cáritas tiene un servicio a nivel nacional impresionante con unos hermosos proyectos en todas partes del país. O sea, la Iglesia abierta no es solamente el templo, es la comunidad que se organiza y sale a ayudar a tanta gente en tantos lugares del país. La iglesia está haciendo lo que muchas veces el Estado no hace”, dijo.