TILCARA (Corresponsal) Los pasacalles son, junto a la propaganda por altoparlantes, la muestra más clara del clima preelectoral. Uno solía entrar a Tilcara por la Villafañe y, ni bien doblaba por la Belgrano ya se enteraba de quién competía por un cargo electoral, pero estas Paso no podemos confiar en lo que nos informe la propaganda aérea y, muy poco, la auditiva.
inicia sesión o regístrate.
TILCARA (Corresponsal) Los pasacalles son, junto a la propaganda por altoparlantes, la muestra más clara del clima preelectoral. Uno solía entrar a Tilcara por la Villafañe y, ni bien doblaba por la Belgrano ya se enteraba de quién competía por un cargo electoral, pero estas Paso no podemos confiar en lo que nos informe la propaganda aérea y, muy poco, la auditiva.
Gana la vista de los cerros, es cierto, y gana el canto de las aves en la plaza salvo por una tarde de uno, otra tarde de otro, siempre desde el arco opositor. Los últimos días, como reclamando ante esa falta de proselitismo, se empiezan a escuchar preguntas por las calles: ¿Qué se vota? ¿Es obligatorio? Para muchos, es una sorpresa que se elijan también candidatos a diputados, acaso influidos por lo que ven en la televisión o en las redes sociales, y la pregunta reposa sobre la continuidad o no de Macri. Es cierto que el ciudadano tiene la obligación de informarse, pero también lo es que ya está muy acostumbrado a que los partidos políticos le acerquen las propuestas. En algunas esquinas se reparten boletas, se sabe que algún puntero también lo hace y se comenta, sorprendidos, que reparta de éste y no de aquel candidato, alguna fiambrería coloca una boleta sobre los precios de los quesos, pero la opinión del tilcareño se vuelve más visible en Facebook y en los estados de Whatsapp.