Gran malestar generó en la comunidad de La Esperanza, la decisión de los nuevos dueños del Ingenio de cerrar muchos caminos internos de los cañaverales, especialmente el del sector conocido como la "Curva de Parapetí", dejando atrapados y sin salida a cinco familias del barrio Kennedy.
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Gran malestar generó en la comunidad de La Esperanza, la decisión de los nuevos dueños del Ingenio de cerrar muchos caminos internos de los cañaverales, especialmente el del sector conocido como la "Curva de Parapetí", dejando atrapados y sin salida a cinco familias del barrio Kennedy.
"Esta medida es arbitraria, injusta e inhumana", advirtió el concejal Gustavo Bautista, uno de los primeros en reaccionar y hacer visible este problema que afecta a las familias de este sector.
El problema es mucho más grave, indicó el edil, porque los dos accesos al barrio Kennedy han sido cerrados, dejando a estas cinco familias de "rehenes". "Parecería que estamos en la época de la esclavitud, donde la gente tenía que pedirle permiso al amo para poder salir", manifestó Bautista, haciendo referencia a las medidas que tomaron los nuevos dueños del Ingenio La Esperanza.
Explicó que si las familias que viven allí tienen algún problema, ya sea de salud o inseguridad, van a quedar a la deriva porque han cerrado todas las vías de comunicación y no pueden entrar ni un patrullero ni una ambulancia.
De hecho, una de las vecinas fue operada recientemente de una pierna y se encuentra en etapa de rehabilitación. Al no poder entrar ningún vehículo al domicilio, debe caminar 700 metros hasta la curva, sortear el terraplén y esperar que pase un remis.
Por otro lado el edil también mencionó el perjuicio económico para las familias que viven en el barrio y que se dedican a la cría de animales (cerdos). Al estar encerrados, no pueden salir a vender, ni tampoco puede entrar ningún cliente a visitarlos.
Además de las cinco familias, dentro del sector que quedó incomunicado también existe un predio que pertenece a la empresa Agua Potable que se utiliza para guardar material. En este caso, los operarios de dicha empresa, que pertenece al Estado, tampoco pueden acceder a las instalaciones porque el camino esta cortado.
En ese contexto, Bautista comentó que presentó un proyecto de Declaración en el Concejo Deliberante de La Esperanza, haciendo mención a esta situación problemática, que espera sea tratado hoy martes en la sesión.
El pedido concreto del concejal y de los vecinos directamente perjudicados hacia la empresa es que levante el terraplén y libere este camino. De lo contrario, dijeron que si alguna de las personas del barrio Kennedy sufre algún problema de salud, de inseguridad o de lo que sea, y no puede ser asistida a tiempo porque el acceso esta cerrado, deberá el grupo Budeguer hacerse cargo de las consecuencias.
Mientras tanto, el intendente de La Esperanza "ni aparece", manifestó el concejal Bautista. "El debería ser el primero en preocuparse, para defender los derechos de estos vecinos, que están siendo claramente vulnerados", advirtió.
De acuerdo a lo que se defina en el Concejo Deliberante esperanceño, el concejal adelantó que derivará su denuncia a la Defensoría del Pueblo de Jujuy, de manera que también tome intervención en este asunto.