¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

19°
8 de Mayo,  Jujuy, Argentina
PUBLICIDAD

"Cada prenda que hago se lleva un poco de mí"

Alejandra Sosa es diseñadora de moda de alta costura. Pudo presentar uno de sus vestidos en Europa.
Domingo, 04 de agosto de 2019 01:00

Qué nos hace felices. Es quizás uno de los interrogantes más difíciles de resolver en la vida. Pero en esta columna pudimos conocer muchas personas afortunadas que logran encontrar la felicidad haciendo lo que saben y lo que aman.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Qué nos hace felices. Es quizás uno de los interrogantes más difíciles de resolver en la vida. Pero en esta columna pudimos conocer muchas personas afortunadas que logran encontrar la felicidad haciendo lo que saben y lo que aman.

Alejandra Sosa es una joven jujeña que logró vivir de lo que ama, es diseñadora de moda de alta costura en permanente crecimiento y formación, logró presentar una de sus creaciones en Europa y sueña con realizar un desfile en ese continente.

Alejandra recuerda que desde muy pequeña supo que el diseño de modas era lo que quería hacer en la vida.

En diálogo con nuestro diario nos confió que cada prenda que diseña lleva en sí misma el amor que siente por este oficio.

Cuando le propusimos recordar el momento en el que decidió ser diseñadora de moda de alta costura nos indica que fue a los 11 años cuando acompañó a su madre a un taller de corte y confección.

SESIÓN DE FOTOS / MODELO CON UN VESTIDO DE ALEJANDRA SOSA INSPIRADO EN UNA PINTURA DEL ARTISTA PLÁSTICO ARIEL CORTEZ.

"Quedé maravillada cuando ví que de un trozo de tela podían hacer una camisa u otra prenda y ahí supe que eso era lo que quería hacer cuando fuera grande".

Durante la escuela secundaria de artes logró ahondar ese deseo cursando en una Escuela de Arte y finalmente en su carrera terciaria pudo concretar, a la par de sus estudios de maestra de grado y docente de alumnos con discapacidad, su sueño de recibirse de diseñadora de moda de alta costura.

La joven diseñadora recordó cómo desde la infancia incorporó su amor por la tarea artesanal y artística, "creo que heredé de mi familia el gusto por este oficio, mis abuelos y mi madre hacían artesanías y siempre desarrollaron su faceta artística. La mayoría de mi familia tenemos además de nuestras profesiones o trabajo un oficio relacionado con la artesanía".

En cuanto a su formación específica en diseño de modas, indicó que en el secundario se recibió de maestra de arte y profesora de dibujo, luego en Tucumán de diseñadora de alta costura, en Córdoba de diseñadora de indumentaria y en Buenos Aires se perfeccionó en diseño de alta costura. También hizo cursos en París (Francia) de cómo trabajar el encaje bordado en alta costura, en Barcelona (España) hizo curso de origami para realizar vestidos en papel reciclado, en Milán (Italia) cursó asesoría de moda, en Moscú (Rusia) bordado crochet luneville alta costura y en San Petersburgo hizo un taller de vestidos de novia y transformaciones.

El año pasado concretó un "sueño" llevar un vestido a París. Con el propósito de brindar una propuesta innovadora, presentó un vestido de alta costura con el estampado con una pintura del artista plástico jujeño Ariel Cortez. "Tenía que llevar un vestido representando a nuestro país, queríamos hacer un pequeño desfile de nuestros trabajos en el taller de asesoramiento de moda. La idea de poder llevar un cuadro a un vestido me encantó. Quería mostrar nuestra cultura, el arte, la moda y la creación".

Sobre los próximos desafíos en su carrera indicó que "poder seguir haciendo lo que estoy haciendo. Exigirme más en cambiar cada día de forma superadora mis diseños. Poder hacer un desfile en otro país y trascender como diseñadora".

Finalmente Alejandra compartió con nosotros cuál es su experiencia cotidiana en el taller, que hoy tiene en su casa.

"Cuando estoy en mi trabajo me siento feliz, me siento una persona llena. Cuando hago un diseño me concentro tanto que no hablo con otras personas y deseo siempre poder cumplir con los tiempos y que mis clientes estén satisfechos, me da mucho gusto saber que hice algo que le gusta".

Como muchas personas que hemos entrevistado en esta columna, Alejandra asegura que cuando trabaja siente "que el tiempo no existe, no me doy cuenta como pasa. Creo que es porque ser diseñadora de modas me hace muy feliz y me llena el alma y que cada prenda creada se lleva un poco de mí, un poco del amor que siento por este oficio".

Alta costura 

EN PARÍS / UNO DE LOS VESTIDOS DE LA JUJEÑA CON LA TORRE EIFFEL DE FONDO.

El término alta costura (haute couture, en francés) engloba una forma de entender la moda que se remonta al siglo XIX y que se aleja de lo que estamos acostumbrados hoy en día. Aunque actualmente es cierto que existen firmas de moda que hacen alta costura son muy pocas debido a su escasa rentabilidad. El hecho de dedicarse a ella es más un recurso de marketing al que acuden para conferirles un elemento diferenciador relacionado con el lujo y la exclusividad.

Cuando hablamos de alta costura estamos por tanto ante una moda elaborada artesanalmente en todos y cada uno de los procesos vinculados a la creación de una prenda; es decir, desde el encargo del cliente que se pone en contacto con el diseñador de moda y solicita un vestido para un evento concreto, hasta el diseño, la elección de los tejidos y la confección, efectuada siempre de forma manual.

El diseño de alta costura suele utilizarse para eventos destacados por su elegancia. Por lo tanto, las prendas de alta costura deben diseñarse en base a tres aspectos esenciales: el aporte estético de la prenda en general, el estilo personal del cliente y el lugar donde va a lucirse. De este modo, si se consideran estos aspectos, el resultado final será un verdadero éxito.