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Los padres y la escuela, los responsables en educación

Domingo, 04 de agosto de 2019 01:00

María Laura Mamaní, psicóloga del Consultorio de Adolescencia del hospital "Wenceslao Gallardo" de Palpalá, en diálogo con El Tribuno de Jujuy analizó la situación de los jóvenes que se ven obligados a dejar la escuela.

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María Laura Mamaní, psicóloga del Consultorio de Adolescencia del hospital "Wenceslao Gallardo" de Palpalá, en diálogo con El Tribuno de Jujuy analizó la situación de los jóvenes que se ven obligados a dejar la escuela.

La deserción escolar ocurre porque los jóvenes "no tienen un sostén simbólico o referente adulto que los contenga y los acompañe en la trayectoria educativa. En todas las escuelas debe haber recursos técnicos con equipos de profesionales, psicopedagogos, psicólogos, trabajadores sociales trabajando en el acompañamiento de los jóvenes a fin de que tengan una trayectoria escolar diferenciada", añadió.

En ese sentido, comentó que hay situaciones muy complejas "que viven sobre todo los adolescentes donde los adultos, sus padres, deben irse a trabajar y ellos quedan a cargo de sus hermanos menores. Se encargan de que los más chicos vayan a la escuela pero ellos no van".

La escuela le tiene que brindar un espacio al joven, "eso debe quedar claro. Pero también hay otra cuestión, hubo muchos estudios que se hicieron sobre el nuevo rol de la escuela que aseguran que esa institución quedó muy atrás con respecto a cómo vienen las nuevas generaciones y construyen su subjetividad", agregó Mamaní.

EN DOS TURNOS / SE DIVIDEN LAS FAMILIAS PARA TRABAJAR.

Siguió diciendo que "por eso, las personas que trabajan en las escuelas, docentes y los demás deben intervenir ante casos de adolescentes que no asisten o tienen problemas. Cuando se empieza a indagar el motivo por el que no va a clases nos enteramos que es porque está a cargo de sus hermanos menores o que empezó a estar en situación de consumo".

Asimismo indicó que "es responsabilidad de los adultos dentro de las instituciones poder generar acciones ante esos casos y otorgarles trayectorias diferenciadas, un acompañamiento especial. Nosotros tuvimos casos de chicos que acceden a nuestro puesto de salud para preguntarnos, por ejemplo, como se puede hacer una nota porque en la escuela le pidieron eso. El chico está solo, no sabe lo que es una nota, por eso a veces pasa que los adultos son exclusivos".

Remarcó también que "esto pasa en instituciones educativas o de salud. Por eso los jóvenes salen de esas estructuras, no entran a clases porque no encuentran ese lugar en donde se sienten contenidos y ayudados. También hay que decir que hay docentes que se comprometen y empiezan a interiorizarse más en los jóvenes, pero muchos no lo hacen".

Además explicó que los adolescentes que dejan la escuela no poseen los recursos necesarios como ser los económicos y el acompañamiento del adulto.

Sobre las principales consecuencias que acarrean a futuro estos jóvenes remarcó que quedan desalojados del sistema familiar y escolar, "entonces quedan errantes, deambulan y, no saben de dónde sujetarse. Cuando son grandes les faltan recursos para insertarse en el mundo laboral y quedan serias secuelas como decepción, frustración, exclusión, etc".

 

Maestras que van a las casas

CONSULTORIO DE ADOLESCENCIA / FUNCIONA EN PALPALÁ.

Las maestras comunitarias significan una gran ayuda para los alumnos que se encuentran en situación de vulnerabilidad dándoles más posibilidades y herramientas para que no dejen de estudiar pese a sus dificultades.

Estas docentes hacen visitas a "contraturno con los chicos, trabaja en el fortalecimiento escolar con talleres de diferente índole para que accedan a otras oportunidades muy buenas. Apuntan a fortalecer lazos con las familias", sostuvo Lorena Gordillo, coordinadora del programa Infanto Juvenil de la escuela Nº 204 "Naverán".

Esta iniciativa viene a reemplazar y darle continuidad a los Centros de Actividades Infantiles y a los Centros de Actividades Juveniles que estaban dentro de establecimientos educativos de nivel primario y secundario.

Hay escuelas que no poseen este programa y "estaría bueno que se aplique en todas. Los chicos de El Pongo, la mayoría son de Perico y allí no está el programa. Igual nosotras vamos y los visitamos", dijo.

El programa

El programa Infanto Juvenil surge este año y forma parte del Ministerio de Educación de Jujuy. Tiene el objetivo de contribuir a la igualdad y calidad educativa de los niños, niñas y adolescentes que se encuentran en dificultades en las trayectorias escolares y educativas. "De esta manera, esta propuesta socioeducativa, se constituye como uno de los modos en que el Estado asume el compromiso de asegurar la inclusión educativa garantizando plenamente el derecho a la educación de todos los niños, niñas y adolescentes", indicaron desde la cartera educativa.

Al respecto sostuvieron que "el propósito del programa consiste en fortalecer las trayectorias escolares y educativas de los niños, niñas y adolescentes. Las propuestas se implementan a través de equipos de trabajo que en forma conjunta con el proyecto institucional escolar, desarrollan las distintas acciones".

Dentro del mismo existen talleres que abren puertas al conocimiento a niños, niñas y adolescentes, a través de actividades artísticas, deportivas, científicas y culturales en contraturno y/o los días sábados. Los proyectos socioeducativos que se diseñan y desarrollan en las escuelas, involucran a la institución educativa, la familia y al entorno comunitario.

Las actividades se relacionan con el arte, el juego, el deporte, las ciencias, las nuevas tecnologías y todas aquellas que se consideren relevantes en su entorno sociocomunitario y que contribuyan a su inclusión social y cultural.