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"Soy fiel aprendiz d las generaciones que me tocó enseñar y ver crecer"

Es profesor de Artes Plásticas que dedicó cuarenta años de su vida a la docencia. Enseñó en escuelas de Ledesma y La Quiaca; y desde hace 37 años en el Colegio Del Salvador.Hoy, transita una nueva etapa en su vida. Tiene muchas ganas de publicar un libro con anécdotas de la docencia; sin dejar su mayor compromiso: volver a acompañar a los chicos en la fiesta estudiantil.
Miércoles, 25 de septiembre de 2019 01:02

Por estos días, el entusiasmo de la 68 edición de la Fiesta Nacional de los Estudiantes se vive en todo el estudiantado juvenil de la provincia.

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Por estos días, el entusiasmo de la 68 edición de la Fiesta Nacional de los Estudiantes se vive en todo el estudiantado juvenil de la provincia.

Más carrozas y reinas desfilarán por las noches de este septiembre y marco absoluto de una alegría que se renueva año a año y que permanece grabada en los corazones de todos los jóvenes que alguna vez fueron activos partícipes de la fiesta. Pero el caso de Carlitos Luna es único. Se trata del eterno "profe" del Colegio Del Salvador que porta con orgullo 40 años de docencia y muchas, muchísimas historias por contar. No sólo como guía de tantas generaciones que vio crecer, sino como el mejor de los compañeros a la hora de vivir la estudiantina jujeña. Hoy, un año más, él vuelve a "carrocear" con sus chicos, como lo hizo ayer, hoy y siempre. Visiblemente movilizado por un espíritu joven que desde hace 37 años palpita fuerte en cada primavera.

Un profe con muchas historias para contar...

A todos les estoy contando que estoy escribiendo un libro. Por ahora son ensayos en recuerdos bonitos. Y puntualmente hablo desde el comienzo, sobre cómo nació esta vocación de enseñar lo que alguna vez aprendí, lo que sé hacer que es dibujar, pintar, hacer esculturas; enseñar eso y cómo fui incursionando en todo lo que es la carroza.

¿Cómo nació su vocación de docente?

Siempre en ruedas de amigos, de alumnos, voy contando pequeñas historias o anécdotas que forman parte de esta vida docente. Por ejemplo, cómo llevamos a reciclar material para la carroza. En realidad, pienso que mi vida y la de todos, ha sido superar distintas épocas con crisis desde hace tiempo. Yo recuerdo que cuando comencé en La Quiaca, era muy complicado por el gobierno militar. Así que me empecé a conectar con niños de primaria, aprender de ellos y realmente fue preciosa esa experiencia como primera etapa de docente.

¿Cuál fue la respuesta de sus primeros alumnos?

Los chicos me fueron nutriendo de tanto cariño, de tanto amor que en ese momento dije: "esto es lo mío". Me encontré con la enseñanza como un camino bello, que comencé a transitar y que fui viviendo con intensidad. La comunicación con los niños y adolescentes, me permite ver lo hermoso del ejercicio de la docencia. Yo creo que aquél que elige lo que va a ser de su vida, disfruta su trabajo. Cuarenta años bellos en donde fui recorriendo distintas historias para conectarme con gente amiga, colegas con alumnos que me han enseñado mucho.

¿Una anécdota como aprendiz de sus alumnos?

Algo chiquitito, en Ledesma, yo sabía trabajar en una escuelita de madera que estaba inclinada, del barrio San Francisco y hacía 50 o 55 grados de calor y era ver sofocados a los chiquitos dibujando y pintando, aun así; ellos se sentían bien, se sentían contentos y de ahí tenía que salir al lote doña Emilia, que también era una escuela de zafra para niños del norte o sur de Bolivia. Yo entraba en esa época en el turno tarde, caminaba entre 4 o 5 km, resulta que un día los veía jugar en una ronda a los chicos de 5to grado jugando con una víbora sapera. En mi vida, sentí tanto miedo y me hicieron entrar en el juego, de agarrarla y tirarla para arriba y salir corriendo. Para ellos era un juego pero a mí? a mí se me puso la piel de gallina!

Toda la vida puesta al servicio de los chicos...

En casi 37 años de carroza, la cantidad de historias lindas, graciosas, algunas no tanto pero también tiene su toquecito de anécdota que encierra lo que es el ser humano. Todos quienes transitamos la adolescencia, sabemos que estamos atentos a cometer errores y si tenemos una persona que nos enseñe a corregir esos errores, buenísimo. Entonces fui descubriendo que mi función en este espacio como docente y en la carroza; es descubrir que se puede ser un guía para los chicos. Soy fiel aprendiz de todas las generaciones Uno intenta transmitir desde las distintas experiencias es marcar una señalización, para que los chicos sepan que tienen que tener cuidado, manejarse con precaución en la vida. Mis abuelos decían: ‘Desde que uno se levanta, hasta que se acuesta, forma parte de la pequeña historia que está escribiendo‘. Vos, yo. Todos.

HOMENAJE /EN 2014, CARLITOS RECIBIÓ UNA DISTINCIÓN DEL EAP

¿Se anima a contar sus primeros tiempos como "profe - carrocero"?

En la primera promoción donde fui colaborador de carrozas, Estaban Carlitos Quiroga y Elisa Sánchez, dos bellísimas personas y profes de Historia y Lengua; que eran los asesores en ese momento, entonces me recibieron con los brazos abiertos y me dijeron Carlitos te regalamos esto porque vos tenés más conocimiento que nosotros sobre la parte técnica, hierro y demás. Así que quedé como colaborador ese año, me hice cargo. Pero me llamaba mucho la atención la forma en que se presentaban las carrozas, eran bonitas, grandes porque en ese tiempo se las hacía de 12 metros de largo por 6 de ancho y 5 de alto. Eran monumentales, me llamaba la atención de cómo rodeaban la carroza y no se alcanzaba a apreciar en su totalidad. Entonces les dije: Chicos, tengo una propuesta. Ustedes me dicen si les gusta o no: Seamos los precursores de mostrar de una forma distinta a la carroza y al carrocero. Como esta carroza va desde la parte de atrás empujada, vamos a liberarla para que se pueda ver mejor en toda su dimensión. Y la otra, me encantaría que como pertenecen al Colegio Del Salvador, se identifiquen con el uniforme y lo representemos como tal. Veamos qué pegada tiene. Primero me miraron con cara rara, pero después les encantó la idea! Y cuando pasamos, todos se quedaron asombradísimos. A partir de ahí -no te miento- todos los colegios al año siguiente comenzaron a contagiarse de la iniciativa. Yo siempre dije: Cuando vos emprendés alguna actividad tenés que ir superando etapas. Les enseño a los chicos a ir superando etapas.

¿Evolucionó la FNE?

Sí. El tema de la realización de los trabajos es muy importante. Hoy estamos chicos y grandes con el cuidado del medio ambiente y al manejo del reciclaje. Antes con el papel crepé y los foquitos de bombilla de 220, hierro forrado con engrudo o alambre tejido y la flor. El cambio al led me parece positivo y lo fundamento en el ahorro de la energía y eso es un gran avance. Y además en economizar el papel, utilizando otros materiales como el plástico, cd, tapitas, es decir, lucirse siendo artesanos y originales. Los chicos enseñan también ahí.

¿Quién es el profe Luna?

El profe Luna es el resultado de 37 generaciones del Colegio del Salvador que me ha puesto donde estoy. Todo por el amor y cariño que recibo, que me llena de alegría, de orgullo, porque sé que lo que hice con todo el amor del mundo, lo traté de hacer bien.