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"Había que superarlo, no podía limitarme"

El testimonio de una referente que afrontó el diagnóstico de vitiligo en la niñez y se fortaleció para crecer y lo logró.
Miércoles, 15 de enero de 2020 01:04

Vivir con vitiligo no fue fácil al principio pero luego la fortaleció. El testimonio de Graciela Quispe da cuenta de que se puede superar y avanzar ante el desconocimiento ya que, luego de innumerables tratamientos sin respuesta satisfactoria, comenzó un camino de valoración propia, de crecimiento interior, de respuestas más profundas, que minimizaron el impacto y la ayudó a avanzar con lo esencial.

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Vivir con vitiligo no fue fácil al principio pero luego la fortaleció. El testimonio de Graciela Quispe da cuenta de que se puede superar y avanzar ante el desconocimiento ya que, luego de innumerables tratamientos sin respuesta satisfactoria, comenzó un camino de valoración propia, de crecimiento interior, de respuestas más profundas, que minimizaron el impacto y la ayudó a avanzar con lo esencial.

"La cuestión es ver esa dificultad como oportunidad. Porque a lo mejor si no hubiera tenido esa dificultad, no hubiera tenido la necesidad de bucear en un desarrollo interior más profundo, y emprender un camino de búsqueda interior con más intensidad como lo tuve que hacer porque uno precisa otras respuestas, darse respuestas a uno mismo desde otra parte", dijo.

Explicó que es una cuestión estética que tiene que ver con la salud y que en su momento fue doloroso atravesarlo pero buscó instancias de superación y avanzó.

Tenía 12 años cuando se le diagnosticó, donde el cuerpo es muy importante y por entonces no era tan común. "No se sabía mucho de la enfermedad y despertaba miradas y miradas que obviamente mortifican cuando uno es muy joven y es más vulnerable", recordó.

Sin embargo fue creciendo haciendo una serie de tratamientos, sin respuesta con lo cual era frustrante no conseguir resultados.

"Luego de innumerables tratamientos comencé esa cuestión de valoración propia, de buscar caminos de crecimiento interior que minimicen en cierto modo el impacto y ver que hay cosas más esenciales", explicó.

Recordó que consultó a un psicólogo porque se sentía limitada en el uso de ropa, soleras por ejemplo y se maquillaba. Entonces se dio cuenta que no valía la pena privarse de las cosas más importantes si la esencia era buena. "Había que superarlo, no podía limitarme", agregó y llevó tiempo.

A la distancia ve que no fue fácil aunque logró un crecimiento interior.

Explicó que hay un espíritu que supera toda adversidad, y el mensaje es, "que hay algo interior mucho más bello que puede ser mostrado, que esto es un accidente, que lo esencial va aflorando y se termina por sobreponer, o tener una mirada más integrada que esta cuestión de la apariencia", precisó.

Contó que fue de mucha ayuda haber hecho trabajos en grupos juveniles que visitaban el Hospital de Niños, un hogar de niñas de San Antonio, al hogar Buen Pastor, que le permitió saber que había muchas otras dificultades y realidades, y que consideró que fue aleccionador.

Para ella la enfermedad no significó dificultades sino que la fortaleció en otros sentidos, y pudo avanzar en su vida tanto laboral como social. Trabaja en Appace y supo liderar un grupo de productores floricultores que tenía que ver con la promoción social. Está casada, tiene hijos grandes. "Me siento realizada en la vida", finalizó Quispe.

En las primeras etapas hay posibilidades de revertirlo

El vitiligo es una enfermedad autoinmune que consiste en la despigmentación de la piel. Por ello es identificada por las manchas de otro color que suelen rodear los ojos, nariz o boca.

“Existen anticuerpos que son células de la inmunidad que no cuidan la salud, en este caso cuando existe una enfermedad autoinmune, se produce el ataque a los melanocitos y eso es lo que los deja sin producción de ese pigmento”, explicó la médica dermatóloga Martha Quispe, integrante de la Asociación Dermatológica de Jujuy.

Detalló que es un marcador cutáneo de enfermedades metabólicas, diabetes, hipotiroidismo, puede acompañar también a pacientes que han tenido un proceso emocional importante.

Esta enfermedad generalmente se presenta con lesiones que se localizan alrededor de los ojos o la boca, y con mayor predilección en las manos y en los pies. También son asintomáticos y causan un trastorno social muy importante, por la imagen ya que la piel se despigmenta y genera manchas notorias.

“En las primeras etapas, cuando las lesiones no son muy extendidas, y sabiendo la causa o el desencadenante en sí. Existen cremas que producen la estimulación de la pigmentación y actualmente en el hospital San Roque existe un equipo de fototerapia de UVB para el tratamiento de las lesiones extensas sobre todo”, precisó la profesional.

Aclaró que hay posibilidades de revertirlo siempre y cuando se encuentren en las primeras etapas de la enfermedad, sin embargo dijo que es muy difícil, y también depende del acompañamiento.

Atención psicológica

La dermatóloga sostuvo además que las personas que tienen esta patología pueden necesitar también atención psicológica porque entiende que hay “un componente emocional muy importante en estos pacientes que hacen un círculo vicioso, porque es una enfermedad que socialmente despierta la mirada del otro”, detalló.

Sin embargo, y pese a que la enfermedad no tiene cura, explicó que también hay medicamentos que sirven como correctores del tono de la piel, y permiten cubrir esas manchas que aparecen en la piel por la despigmentación.

Esta enfermedad puede aparecer en cualquier etapa de la vida, desde la niñez hasta la ancianidad.

Por otro lado, se puede dar en cualquier lugar del país, pero generalmente acompaña en su marcador al trastorno metabólico, el hipotiroidismo. De hecho, que en el Noroeste argentino el hipotiroidismo es endémico, con lo cual la frecuencia de la enfermedad también es notable.

El ejemplo de la modelo canadiense

La modelo canadiense Winnie Harlow es portavoz de la enfermedad de la piel llamada vitiligo.

La joven de 19 años, saltó al mundo del modelaje a pesar de padecer vitiligo. Con apenas 4 años de edad fue diagnosticada con la patología. Desde entonces su vida se transformó en una eterna batalla, soportó bullying en la escuela y tuvo que aprender a fortalecer su autoestima. Al principio no todas las marcas la aceptaban. Pero Harlow logró desfilar para varias marcas en el Toronto Fashion Week, protagonizó un video del cantante de música electrónica Jmsn y fue la imagen de la campaña “Natural Me”. Cuando cumplió la mayoría de edad, Winnie se trasladó a Estados Unidos a estudiar periodismo.

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