Después de los entrenamientos virtuales, llegó la flexibilización y la Escuela Deportiva Argentina (EDA) de cestobol en Palpalá ya trabaja de manera presencial. “Comenzamos en el polideportivo de barrio Carolina al aire libre, la idea era comenzar en el estadio Olímpico, pero es un espacio municipal y no está habilitado para hacer cualquier tipo de actividad, las clases que dan desde el estadio es a través de redes sociales”, manifestó ante El Tribuno de Jujuy el entrenador Horacio Fuentealba.
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Después de los entrenamientos virtuales, llegó la flexibilización y la Escuela Deportiva Argentina (EDA) de cestobol en Palpalá ya trabaja de manera presencial. “Comenzamos en el polideportivo de barrio Carolina al aire libre, la idea era comenzar en el estadio Olímpico, pero es un espacio municipal y no está habilitado para hacer cualquier tipo de actividad, las clases que dan desde el estadio es a través de redes sociales”, manifestó ante El Tribuno de Jujuy el entrenador Horacio Fuentealba.
El técnico recalcó que sigue en pie el trabajar en el estadio “Néstor Kirchner” en un futuro no muy lejano “una vez que esté habilitado”. Fuentealba destacó que “estamos lunes, miércoles y viernes desde las 19, ya que al ser un lugar abierto el calor se siente, esperamos que baje el sol para que los chicos puedan asistir, es desde los 6 hasta los 12 años, pero por ahora están autorizados desde los 9 hasta los 12 años por tema protocolo, pero me dijeron que a partir de noviembre posiblemente autoricen a los más pequeños”. La EDA de pelota al cesto había comenzado en junio pasado, “comenzamos en junio con las clases virtuales, a medida que se fueron habilitando actividades en la provincia porque bajó la curva de contagios, conseguimos el aval para poder dictar las clases presenciales”.
El DT palpaleño contó que “el viernes pasado fue la primera clase, más allá que desde la Confederación Argentina y la Secretaría de Deportes de la Nación teníamos el visto bueno para comenzar, pero nos faltaba la aprobación de la Provincia”. La primera jornada de práctica fueron cinco chicos, “que son los que estuvieron en todas las clases virtuales desde junio, y me confirmaron que se suman un par de chicos más, es una actividad gratuita pero estará limitada por protocolo y sanidad, ya que no puedo tener muchos chicos en cancha”, subrayó.
Consultado sobre los trabajos que estará aplicando en estos primeros días de práctica, Horacio Fuentealba detalló: “Mayormente físico, el trabajos con pelota es de forma individual, cada chico tiene su propia pelota, luego se las sanitiza, tenemos los aros, variamos las actividades, trabajamos con el aro, sin el aro, con pelota, sin pelota, un poco todo lo que vimos en las clases virtuales, es reforzar la teoría con la práctica”. Durante el confinamiento social obligatorio, se realizaron distintos entrenamientos, “por suerte logramos hacer que los chicos se enganchen, es una disciplina relativamente nueva y tenemos que darle mayor difusión, pueden ir varones y mujeres”.
Por último, contó que “hicimos algunos encuentros virtuales, uno con la Escuela Deportiva Argentina de Chaco y otra con Santiago del Estero, quedó pendiente una virtual con todas las escuelas del país pero no sabemos si se realizará”, culminó Horacio Fuentealba.
EDA de Libertador San Martín
Las Escuela Deportiva de Cestobol Palpalá es una de las 12 escuelas de cesto que hay en el país dentro del marco de un proyecto del Ministerio de Deportes de la Nación y con el apoyo fundamental de la Confederación Argentina de Cestobol. Jujuy cuenta con dos escuelas, la de Palpalá y otra que funciona en Libertador General San Martín a cargo de la entrenadora Natalia Lezano. Ambas son totalmente gratuita y tienen el objetivo de sumar jugadores de diferentes edades, tanto en damas como así también en caballeros. La EDA de Libertador General San Martín que depende de Cestobol Ledesma Jujuy realiza sus entrenamientos en las instalaciones de Club Herminio Arrieta. Al igual que la escuela palpaleña, las prácticas se venían desarrollando de forma remota a través del sistema Zoom.
Esto les permitió a los chicos mantenerse activos y evitar así el estrés que generó la pandemia durante la cuarentena. Ya con los trabajos en cancha, se estima que también se incrementen chicos interesados en aprender a jugar este deporte que tiene como meta en Libertador volver a tener el auge de hace muchos años atrás. Recordemos que paralelamente se entrena en otras categorías mayores, aunque todavía se apunta a incorporar las divisiones inferiores.