La Justicia jujeña imputó por la supuesta autoría de "amenazas coactivas cuatro hechos en concurso real" a Natalia Cammuso, hija del empresario del multimedio Nortelevisa SA Eduardo Cammuso y a otras dos personas, en el marco de la investigación que se inició por la muerte de una empleada que contrajo coronavirus y sin embargo fue obligada seguir yendo a trabajar.
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La Justicia jujeña imputó por la supuesta autoría de "amenazas coactivas cuatro hechos en concurso real" a Natalia Cammuso, hija del empresario del multimedio Nortelevisa SA Eduardo Cammuso y a otras dos personas, en el marco de la investigación que se inició por la muerte de una empleada que contrajo coronavirus y sin embargo fue obligada seguir yendo a trabajar.
Elisabeth del Valle Pérez padecía de fibromialgia, diabetes, hipertensión, sufría obesidad y aun así fue obligada a ir a trabajar, pese a los ruegos de la víctima al directorio del call center, que figura como propietaria a la hija del empresario jujeño.
La mujer, madre de un hijo menor de edad, contrajo Covid-19 y su estado de salud empeoró y lamentablemente días después murió en una clínica privada donde estaba internada. Los familiares de la mujer realizaron una serie de marchas para reclamar justicia por el hecho y luego de que el fiscal de investigación penal preparatoria Aldo Lozano del Ministerio Público de la Acusación actuara de oficio se recepcionó la denuncia formal de la expareja de Pérez, quien aportó datos de sumo interés para la causa.
En este sentido el fiscal del MPA solicitó la declaración de compañeros y excompañeros del call center donde prestaba servicios Pérez y todos coincidieron en que las condiciones de trabajo en ese lugar son muy precarias, donde no se respeta el aislamiento social, preventivo y obligatorio, donde no estaban provistos de insumos de bioseguridad y además trabajaban en "un ambiente hostil", donde eran constantemente amenazados en ser despedidos.
A raíz de estas declaraciones y con el cúmulo de elementos probatorios que el fiscal reunió por parte de los testigos, decidió imputar a Natalia Cammuso y a otros dos encargados del lugar por la supuesta autoría de "amenazas coactivas cuatro hechos en concurso real" y con esto, la situación procesal de este expediente va tomando forma, comprometiendo cada vez más a los propietarios del medio donde trabajaba Elisabeth del Valle Pérez.
Para estos días se aguarda los informes de la historia clínica donde permaneció internada la mujer, que ya habían sido requeridos mediante oficios la semana pasada por el Ministerio Público de la Acusación.
Los familiares de Elisabeth del Valle Pérez exigen justicia y celeridad para que se esclarezca el hecho y no tienen dudas de que la empresa Nortelevisa SA fue la responsable del deceso de la mujer.
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