El Santuario de la Virgen del Rosario de Río Blanco y Paypaya se vistió de fiesta por el día de la Santa Patrona de Jujuy.
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El Santuario de la Virgen del Rosario de Río Blanco y Paypaya se vistió de fiesta por el día de la Santa Patrona de Jujuy.
La pandemia no permite al pueblo jujeño peregrinar como un año normal. De todas maneras, ayer se pudo notar la presencia de alrededor de 250 fieles que, quizás, fueron los representantes del sentir de toda una provincia que año tras año renueva su fe.
El obispo Daniel Fernández destacó que la gente pone en las manos de la Virgen la reconstrucción de este mundo, podemos aprovechar para tomarlo como una nueva oportunidad de empezar de nuevo, dejando de lado todas las desigualdades que hoy existen. Debemos tener la conciencia que ahora somos una sola familia y apoyarnos en la salud, en el trabajo y la vida.
Al ser consultado por la gente que llegó hasta el Santuario, el obispo dijo que "sabemos que la Virgen mueve nuestros corazones y nuestras ganas, siento los impulsos de tanta gente que habría querido estar acá, pero a ellos les digo que todavía nos queda todo el mes para visitar el Santuario de forma espaciada y así evitar aglomeraciones".
Cabe destacar que las actividades continuarán todos los domingos de octubre con misas que serán transmitidas por los medios de comunicación. Además, el 31 de octubre se celebra el centenario de la coronación de la Virgen y recorrerá los barrios de la provincia.
Por su parte el padre Héctor Barrera, rector del Santuario de Río Blanco dijo que todos los jujeños tienen un amor muy grande por la Virgen, por eso se comprende que algunas personas hayan llegado hasta el predio, aunque recomendó a toda la sociedad a disfrutar de las misas a través de los medios de comunicación. "Que esta pandemia no nos debilite, al contrario, debemos irradiar buenas energías y cada familia debe ser su propia iglesia".
Fieles y peregrinos
Respetando el distanciamiento social, el uso de barbijo y alcohol en gel, los peregrinos que llegaron hasta el Santuario también expresaron su parecer a El Tribuno de Jujuy, es el caso de Cintia, que pudo saludar a la Virgen en su día, "yo soy vecina de Río Blanco y no podía dejar pasar la oportunidad de estar junto a María. La verdad no esperaba que tantas personas lleguen hasta acá. Todos los años vengo a la misa del día de la Virgen, ya es una tradición".
Asimismo, Fabián Calisaya dijo que llegó hasta el Santuario para renovar su fe y saludar a la Virgen en familia, "venimos a rezar para que toda esta pandemia pase pronto y no afecte a más personas".
María Cristina, por su parte agregó que "desde chica vengo a visitar a la Virgen, soy muy devota, antes venía con mis padres y hoy con 75 años sigo viniendo a pedir por la salud de las personas, a desahogarme y renovar mis energías".
Por último, Ana, dijo que esta es una celebración muy emotiva para los jujeños. "Venimos a pedir por todos los que han sufrido durante esta pandemia, a elevar una oración por el descanso de aquellos que no tuvieron la oportunidad de despedirse de su familia. Pedimos que la Virgen con su manto proteja a toda la provincia".
La misa matutina reunió varios signos y constituyó un llamado a la solidaridad durante la pandemia y a mantener la fe como los abuelos y bisabuelos de cada familia.