¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

18°
29 de Marzo,  Jujuy, Argentina
PUBLICIDAD

"Trabajo en cómo el cerebro decide cuál es la memoria más relevante"

Noelia Weisstaub, bióloga de la Universidad Nacional de Buenos Aires (UBA) y doctora de la Universidad de Columbia, ganó el Premio Estímulo de la Fundación Bunge y Born por contribuir a la neurociencia. Estudió el rol de la serotonina en la cognición y la emoción, y estudia actualmente cómo funciona la memoria y en cómo es que el cerebro decide cuál es la memoria más relevante para ser evocada.
Miércoles, 11 de noviembre de 2020 01:03

Noelia Weisstaub recibe hoy a las 18 el premio estímulo de la Fundación Bunge y Born junto a su par Pedro Bekinschtein, biólogo (UBA) y PhD de UBA y la Universidad de Cambridge. El ganador del premio Bunge y Born es Jorge Medina, médico y doctor en Medicina (UBA), por sus teorías sobre formación, expresión y persistencia de la memoria.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Noelia Weisstaub recibe hoy a las 18 el premio estímulo de la Fundación Bunge y Born junto a su par Pedro Bekinschtein, biólogo (UBA) y PhD de UBA y la Universidad de Cambridge. El ganador del premio Bunge y Born es Jorge Medina, médico y doctor en Medicina (UBA), por sus teorías sobre formación, expresión y persistencia de la memoria.

Weisstaub estudió el rol de la serotonina en la cognición y la emoción. Explicó que la serotonina cumple un rol en la evocación de la memoria, y trabaja en cómo es que el cerebro decide cuál es la memoria más relevante para ser evocada y que no se mezcle con otras.

Es investigadora independiente del Conicet, vive en Buenos Aires y tiene dos hijos.

-Estudia la serotonina. En tiempos en que las emociones están trastocadas por la pandemia, investigar esto resulta relevante.¿Qué aspectos estudia y cuáles son los avances?

-Yo estudio la serotonina, tiene muchas funciones, una es el control de las emociones. En el laboratorio nosotros (junto al doctor Pedro Bekinschtein, quien también recibe el premio estímulo) en realidad actualmente estamos enfocados a entender el rol de la serotonina en procesos cognitivos. Tiene más que ver con la formación y el control de las memorias, otras funciones cognitivas, la toma de decisiones y ese tipo de funciones. Previamente, durante mi formación, sí trabajé la serotonina en relación al control de las emociones. La serotonina es un neurotransmisor que actúa a través de un gran número de receptores, que son esas proteínas de membrana a las cuales los neurotransmisores, que son moléculas químicas, se unen para cumplir su función.

La serotonina en particular tiene mucha cantidad de receptores distintos, tiene catorce. Entonces eso hace que entender en detalle al sistema serotoninérgico es muy complicado porque actúa a través de muchos receptores distintos. Nosotros trabajamos en un receptor particular, que es el receptor 2A. Desde hace muchos años, en modelos animales describimos que la ausencia del receptor produce un efecto ansiolítico. Eso quiere decir que normalmente, uno pensaría que la respuesta de ansiedad que se genera a través de aumento de liberación de serotonina, se da actuando a través del receptor 2A de serotonina.

Eso fue durante mi formación y después me fui pasando a cosas más cognitivas. Encontramos que cumplen un rol importante en el control de la evocación de memorias. Que cuando uno evoca un recuerdo porque se presenta una clave, muchas veces esas claves son compartidas con varios recuerdos. Uno puede pensar en una plaza y que evoque distintas situaciones, la última vez que fue o cuando pasó algo particular. Ahora estamos trabajando en cómo es que el cerebro decide cuál es la memoria más relevante para ser evocada y que no se mezclen todas.

-¿Y la aplicación posterior cuál sería, porque cuando hablaba de investigaciones previas tenía que ver con los antidepresivos?

-Lo que estamos observando es que cuando uno bloquea la acción de este receptor, le impide que funcione normalmente, se generan déficits en estos procesos de evocación de memorias. Y hay varios fármacos que se usan en la clínica que tocan a este receptor. Si bien es importante que lo bloqueen porque así mejoran otros efectos que los pacientes tienen, un efecto secundario que podría estar apareciendo es la evocación de memorias en estas personas.

Entonces es importante porque tal vez, es un receptor muy complejo también en su manera de actuar, y tal vez se pueden diseñar mejores drogas que sigan sirviendo para lo cual fueron diseñadas y que eviten tener como efectos negativos sobre procesos cognitivos. Por otro lado en muchos desórdenes psiquiátricos sobre todo, los pacientes presentan desórdenes cognitivos. En general, las drogas que existen hoy no tratan bien esos efectos, mejoran otros síntomas pero no hay mucha farmacología que ayude a mejorar estos otros, entonces los pacientes quedan con problemas de memoria, con otros tipos de síntomas cognitivos. Entonces entender mejor cómo se controlan esos procesos puede ayudar a generar fármacos que también mejoren esas sintomatologías.

-Este premio reconoce su labor, en este caso es un incentivo, ¿significa un impulso? ¿Cuáles son sus objetivos que tiene hacia adelante?

-El premio fue muy inesperado. Es un premio muy importante que nunca que se me ocurrió que me lo iba a ganar. Es un incentivo a nivel anímico muy importante porque nos gusta mucho pero hacer ciencia en general es difícil, y en Argentina es particularmente complicado. Entonces que reconozcan el trabajo dan ganas de seguir trabajando.

-Es el reconocimiento, genera visibilidad porque no hay tantas científicas premiadas...

-Sí, creo que es un incentivo y creo que está bien porque hay muchas mujeres en ciencia, sobre todo de mi generación hacia abajo. Desde el momento en que empecé a estudiar éramos muchas las mujeres que hacíamos ciencia. Están apareciendo, está el premio Loreal, el mismo premio Bunge y Born ha premiado a mujeres en años anteriores, creo que es razonable que estemos ahí porque somos una parte razonable del sistema científico argentino.

-Hoy hay una mujer encabezando un organismo científico, ¿cree que es un avance en el mundo científico?

-Creo que es un avance importante, ahora hay una mujer dirigiendo el Conicet. Cuando yo entré a la carrera de investigador también había una mujer pero sí, que haya mujeres en lugares de gestión en ciencias creo que es muy importante para el sistema científico. Pero también como una imagen hacia afuera, creo que es algo que espero que el premio ayude y que las chicas jóvenes, las nenas vean la ciencia como una disciplina que sólo es para algunas particulares, que tiene un don especial, sino que es algo para todas las mujeres que quieran hacerlo. No hay nada que impida a las chicas seguir carreras técnicas o científicas.

-¿En el caso suyo, qué la incentivó a hacer ciencia, venía de familia?

-Mis papás vienen del área de las ciencias sociales, mi papá es abogado, mi mamá era corredora inmobiliaria en su momento y profesora de Francés. Pero a mi papá siempre le gustó la ciencia, siempre tuvo mucho interés por lo que hoy entendemos como divulgación científica, de leer muchos libros de divulgación científica, de conocer libros de historias de científicos, cómo habían sido sus vidas y sus descubrimientos, y nos hablaba mucho de eso en casa. Supongo que prendió, de ahí viene. Cuando era adolescente me regaló el libro "Historia del tiempo" de divulgación de física, y ese fue mi primer acercamiento a la ciencia y ahí quedé.

-Argentina está en situación crítica en cuanto a reconocimiento económico de los investigadores respecto a otros países, ¿qué opina?

-Es importante que a la ciencia se la tome como una Política de Estado y no como una política partidaria, sobre todo porque la ciencia es un proceso continuo, que después si se corta, si se frena, después no es fácil volver a arrancar, requiere de un esfuerzo continuo. Es necesario que se invierta más en ciencia. Más allá del tema económico en sí, es importante que se incorpore a la ciencia como algo importante de la sociedad, no como algo que hace un grupo de gente separado del resto, porque la ciencia puede afectar a todos los estratos de la sociedad.

-¿Este año fue clave en ese sentido?

-Exactamente, creo que este año se puso en evidencia eso. En otros lugares lo tienen más incorporado. Hay que sostener la ciencia en el país, porque es importante para todos, y no como un lujo sino como una parte fundamental para el crecimiento del país.