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19 de Abril,  Jujuy, Argentina
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"El Gobierno nacional ahora tiene que dar un shock de confianza"

El vicepresidente de la Cámara de Comercio y Servicios manifestó que las fluctuaciones del dólar blue generan temor de devaluación del oficial, por lo que aumentan los precios de productos importados. Consideró que las autoridades deben dar certezas de estabilidad en esta situación y así se pueda planificar a largo plazo en la producción y el comercio que -dijo- está mejorando en cuanto a ventas.

Jueves, 12 de noviembre de 2020 01:01

-¿Cómo está comercio con las oscilaciones del dólar blue?

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-¿Cómo está comercio con las oscilaciones del dólar blue?

-La influencia que puede tener es en cuanto a las expectativas de devaluación que genera, porque uno no sabe lo que va a vender, sobre todo los artículos importados, y si después va a poder reponer la mercadería y a qué precio. Pero en nuestra actividad no genera grandes sobresaltos, salvo los que trabajan con muchos productos importados, que les ha generado mucha incertidumbre. Como siempre ocurre, cuando sube el dólar todo sube, pero cuando baja no baja nada, y todo queda como estaba.

Hasta que no haya reglas claras en cuanto a la política económica y el rumbo que el gobierno nacional pretende darle a lo que es la producción, el comercio, estamos todos en una incertidumbre, porque cuando dicen que el dólar blue bajó por intervención de manos amigas o porque salieron con una licitación de bonos muy atractiva, o sea cuestiones que vienen a generar una distorsión en los precios del dólar, también te hace dudar mucho cuánto tiempo puede durar esto, porque son todas medidas a corto plazo.

-Decía que hay productos que están costando conseguir por problemas de importación, ¿cuáles son?.

-En los últimos tiempos se ha trabajado mucho con importados, la indumentaria sobre todo, con prendas fabricadas en China, Corea, Taiwan, porque resultaba mucho más conveniente. Ahora con la suba del dólar obviamente hay más restricciones del Gobierno nacional y los costos son más altos. Hemos notado por eso que hay desabastecimiento de algunos productos. Confío y tengo la esperanza que el Gobierno nacional llegue a un punto de equilibrio y todos podamos tener certidumbre de lo que se viene. Todo se hace más complicado cuando el dólar está tan volátil, genera incertidumbre, aumento de precios, inflación y entramos en un círculo que es bastante nocivo para todos.

-¿Qué medidas le pediría al Gobierno nacional para el comercio?

-Le pediría certidumbre, y un plan que se cumpla, que sea posible, no un plan irrealizable, sino uno posible, al que todos nos podamos atener, un dólar estable. Creo que lo que el gobierno tiene que dar ahora, es un shock de confianza, que sea creíble y nadie se escape al dólar por la desvalorización del peso.

-A partir de la apertura de circulación, ¿supone que habrá más flujo comercial?

-Sí, de hecho ya había un flujo de gente bastante importante, tampoco los controles que se realizaban por DNI eran tan estrictos como fue en algún momento. Bueno, la gente se siente un poco más libre de salir, ir a hacer compras porque no tiene esa restricción. Nosotros en el comercio por suerte estamos notando no digo una reactivación contundente, pero si una mejora bastante importante después de venir de menos diez, y ahora vamos levantando un poco, y eso nos genera optimismo porque nos permite ir cumpliendo con nuestras obligaciones, ir tratando de acomodar todo lo que la pandemia nos desacomodó económicamente. Así que esperamos que siga este ritmo y por supuesto recomendar en que nos sigamos cuidando, porque esto no pasó, estamos viendo la experiencia de Europa.

-¿Se están evaluando lanzar promociones para aumentar las ventas?

-Todo el tiempo estamos con las promociones porque realmente es nuestra única manera hoy en día de poder vender y generar algún movimiento de caja que nos permita seguir adelante. O sea que las promociones siempre se están lanzando, ya sea con los bancos, con las tarjetas de crédito. Se está evaluando dentro de la Cámara, entre todos los miembros, armar alguna promoción especial, de modo que por ejemplo tengamos una semana de algún rubro en particular. La cuestión es ir acercándonos a la gente y a las necesidades que tienen de compra hoy. Así que siempre estamos viendo. Si se analiza, en todos lados tenemos promociones en cuotas sin interés, con descuentos. Es lo que tenemos y por ahora nos permite seguir subsistiendo.

-¿Hicieron alguna evaluación de cuántos comercios cerraron y si otros están evaluando cerrar?

-En un momento hubo una gran cantidad de comercios que cerraron porque no pudieron subsistir y continuar con su actividad, llegó un grado de ahogamiento económico que no les permitió seguir, y empezamos a ver lo que nunca habíamos visto en Jujuy, un montón de locales en el centro de la ciudad que es la resonancia de lo que pasa en el resto de la provincia, porque conseguir antes un local desocupado en el centro era casi una tarea imposible. Entonces, empezamos a ver muchísimos locales por cuadra desocupados, otros que se veían con perspectivas de cerrar, y eso ahora se paralizó un poco, e incluso hay otros locales nuevos que se están animando a hacer alguna inversión y están abriendo. No es para decir que es el boom de la reactivación, pero genera algún optimismo y esperanza de que las cosas vuelvan a un ritmo normal y que haya alguna reactivación.

Según opinan muchos economistas, siempre hay una biblioteca en contra y otra a favor, que el año próximo habrá una reactivación importante, pero como decía, todo dependerá de que sigamos cuidándonos, sigamos con las normas, porque si volvemos a caer en lo vivido hace unos meses, será de nuevo una caída estrepitosa de las ventas con cierre de locales. De manera que por ahora no se evalúan más cierres en los niveles que teníamos. Puede ser que algunos vengan complicados y hayan llegado hasta acá con el último aliento y ya no puedan seguir y continuar con la actividad, porque ha sido muy duro tantos meses cerrados sin ningún tipo de actividad, con muchas obligaciones y mucho endeudamiento. El Gobierno tiene que dar ahora un shock de confianza. O sea, que la gente vuelva a creer en nuestras autoridades nacionales, en lo que dicen, que sea creíble.