Mariana Barassi, la directora del filme "Crónica de una tormenta" que esta semana llegó a las pantallas del Incaa, en contacto con El Tribuno se refirió a su ópera prima que cuenta con actuaciones de Ernesto Alterio, Clara Lago y Quique Fernández y que ya está disponible gratis en la plataforma Cine.Ar Play.
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Mariana Barassi, la directora del filme "Crónica de una tormenta" que esta semana llegó a las pantallas del Incaa, en contacto con El Tribuno se refirió a su ópera prima que cuenta con actuaciones de Ernesto Alterio, Clara Lago y Quique Fernández y que ya está disponible gratis en la plataforma Cine.Ar Play.
La trama del filme (que se basa en la obra "Testosterona" de la autora mexicana Sabina Berman) gira en torno a las disputas que se suscitan cuando Antonio, el director de un importante periódico, debe elegir a su sucesor. El puesto podría quedar en manos de alguno de los subdirectores: Maca, una exalumna que se desarrolló profesionalmente admirando a su mentor, o Vargas, un periodista manipulador capaz de cualquier cosa para lograr sus objetivos.
La acción de la propuesta se desarrolla casi en tiempo real y prácticamente en un mismo espacio (una redacción vacía en vísperas de Navidad) y las charlas van subiendo de tono para exponer juegos de poder, vínculos sentimentales y conspiraciones. El espectador se encontrará con una propuesta que permite reflexionar sobre la relación que existe entre la prensa y el poder político-económico, las dificultades que enfrenta una mujer para acceder a puestos de mando y el dilema entre los que tienen sentido moral y los que trabajan sin escrúpulos.
¿Cómo vive este estreno digital?
Creo que tenemos que adaptarnos a que la manera de ver cine será a través de plataformas, como directora de una ópera prima me encantaría poder presenciar las reacciones de una sala de cine, pero también creo que es muy importante que la película llegue a la mayor cantidad de gente y a través de la TV y plataformas es la mejor manera.
¿Cuál fue el camino recorrido por la película antes de su estreno en Cine.Ar?
El recorrido inicial planteado de la película se vio interrumpido por la pandemia y el cierre de salas, pero hemos podido hacer su estreno internacional en la sección oficial a concurso del Festival de Málaga a finales de agosto
¿Por qué se inclinó por este proyecto?
Uno de los productores de la película me sugirió ir a ver la obra de teatro y me atrajo por los temas que se abordaban y el desafío de conseguir que el diálogo sobre estos temas continuara una vez terminada la obra. Me pareció que había algo muy vivo y muy necesario de plantear y hacer pensar como los dilemas éticos en los entornos laborales, el envejecimiento profesional, las escasas posibilidades de la mujer de ascender profesionalmente y la búsqueda de la verdad en los medios.
¿Qué retos tuvo que enfrentar durante la transposición de una obra teatral al lenguaje cinematográfico?
Uno de los retos fue trasladar los diálogos y hacerlos fluidos pero sin perder las capas y la profundidad de cada uno de los personajes. Mantener el ritmo interno de cada escena, equilibrar la tensión y reposo para que el espectador también pueda tomar un poco de distancia y trasladar el manejo del poder entre un personaje y el otro. La película es un juego dialéctico entre los dos personajes que van transitando diferentes temas que son muy actuales.
¿Cómo fue la elección de los actores y el trabajo posterior?
Siempre he admirado el trabajo de ambos, si bien los dos habían compartido una película juntos, nunca haciendo un tándem tan especial. Desde el primer día de ensayo fue notable la química que había entre los dos y eso fue determinante para confiar en que lo que teníamos que trabajar principalmente eran las motivaciones de los personajes más que un trabajo de acción en escena. Así tuvimos larguísimas charlas y han aportado mucho al afinado de los diálogos, han sido muy generosos, además de que intentamos que el rodaje fuera de la manera más cronológica posible para desarrollar los personajes de una manera muy viva. Fue un trabajo muy intenso pero muy especial.
La película aborda temas relacionados con los juegos de poder, la ética periodística, el rol de la mujer en ámbitos de mando. ¿Cómo trabajó esas cuestiones?
Principalmente a través de las conversaciones que mantuve con periodistas tanto de Argentina como de España, pude hacer un mapeo bastante intensivo sobre los temas que se tocan en la película. A mí siempre me ha interesado esa estrecha relación del poder y los medios de comunicación, y con la fuerza e incidencia que han tenido las "fake news" en los últimos años fue muy interesante investigar esta evolución para incorporarla en la película ya que en la obra no estaba. También la fuerza que ha ido teniendo el movimiento #MeToo y la representación de la mujer en los ámbitos de mando. Desde que comencé a investigar me he encontrado con que el porcentaje de la representación de género en los medios es alarmante, no sólo por la distribución de los cargos de poder, sino también por el progreso extremadamente lento para llevar la voz de la mujer al discurso público. Una amiga periodista me pasó la web del Proyecto de Monitoreo Global de Medios (Gmmp) que es interesantísima para tener un escaneo de esta realidad.
¿Qué recuerda especialmente del proceso de realización?
Trabajar con un equipo tan cercano y que siempre ha estado a favor de la película. Me sentí muy acompañada durante todo el proceso y eso da mucha seguridad a la hora de tomar decisiones, que son miles y miles... Otro gran recuerdo que me llevo es el haber podido rodar en un diario de verdad, la localización y los actores son reales, son todos de la redacción del diario que querían hacer de ellos mismos y a quienes a veces recurríamos cuando teníamos alguna duda. Eran nuestros "especialistas".
¿Qué reflexión puede hacer como cineasta relacionando la pandemia global y el auge del audiovisual en este contexto?
Creo que este auge audiovisual era inevitable que sucediera por el salto tecnológico que lleva viviendo el sector y con la pandemia se ha acelerado de golpe, con algunas cosas buenas y otras no tanto como sucede cuando las cosas se precipitan. La captación de nuevos contenidos, la creación de grandes y pequeñas plataformas para poder exhibir las obras audiovisuales, la democratización de la mirada y la expansión a territorios sin salas de cine me parece que es un avance; pero también creo que hay que tener políticas dirigidas al cuidado de los profesionales del sector y estructuras para que todo este auge repercuta y proteja a los trabajadores del audiovisual.
¿Está trabajando en algún proyecto que pueda adelantar?
Recientemente he recibido una ayuda para la escritura de mi próxima película y ahora estoy intentando arrancar el desarrollo a pesar de las limitaciones generadas por la pandemia.
¿Conoce Jujuy?
Mi padre trabajó mucho tiempo en Jujuy, en la Central Hidroeléctrica Las Maderas y sueño con el día de poder desarrollar una película allí.