Ocho jujeñas fueron distinguidas con los premios "Palma Carrillo", con el objetivo de reconocer y visibilizar su trabajo solidario en la comunidad y por dejar una huella de empoderamiento en las mujeres.
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Ocho jujeñas fueron distinguidas con los premios "Palma Carrillo", con el objetivo de reconocer y visibilizar su trabajo solidario en la comunidad y por dejar una huella de empoderamiento en las mujeres.
Carrillo murió el 3 de noviembre de 2001 y en la Legislatura fue velada. Años después, se impuso se nombre a una calle de La Viña.
En esta primera edición, el gerente de publicidad de El Tribuno de Jujuy, Claudio Igarzabal, formó parte del prestigioso jurado junto a Enrique Stola, Laura Franco, Sonia Vaccaro y Susana Gamba.
A través de una transmisión vía Zoom se llevó a cabo la emotiva ceremonia, donde además, se recordó a Palma Carrillo, una de las primeras diputadas en Jujuy.
En la ocasión, fueron premiadas: Alicia Gansslen en representación de Mujeres Derribando Barreras, por sus actividades destinadas a ayudar a las mujeres con discapacidad, y Susana Zaccaro, de Casa de las Mujeres y Disidencias de la provincia de Córdoba, por su apoyo constante en favor de las mujeres más vulneradas de su comunidad.
También recibieron menciones honoríficas la presidenta de Red Viva, Sara Barni; Cecilia Lasserre, presidenta del Refugio Un Lugar de Esperanza. Del grupo Mujeres X Ingeniería Unju, su presidenta Anahí Chaves; Ailén Mendizábal por el programa de radio Mujeres de la Música; Marcela Jorge en representación de Mujeres Empresarias de Jujuy (Muej) y Daniela García, en nombre de la Red de Músicas de Jujuy.
El reconocimiento a las figuras femeninas de la comunidad se pensó para brindar un homenaje a Palma Carrillo. "Fue una de las cofundadoras del primer gremio docente de Jujuy y enseñó a muchas mujeres a votar", la recordó su hija Verónica Pereyra Carrillo en diálogo con FM Sol.
Palma Rosa Carrillo nació en San Salvador de Jujuy el 29 de junio de 1925. Se recibió de maestra en la Escuela Normal en 1942, mientras que en 1946 obtuvo el título de profesora de Filosofía en la Universidad del Litoral.
Fue diputada provincial entre 1952 y 1955, constituyéndose en la primera mujer en alcanzar una banca en la Legislatura jujeña, junto a Nelly Calderón, Elena Pereyra y América Argentina Galli de Corbacho.
Fue una pionera de los derechos de las mujeres, política y docente jujeña excepcional, que dedicó toda su vida al empoderamiento de las mujeres en general, y de las más vulnerables en particular.
Fundó, junto a Joaquín Burgos, la delegación Jujuy de la Unión de Docentes Argentinos-UDA (primer sindicato de docentes). Como diputada presentó numerosos proyectos de ley en favor del pueblo jujeño y, al terminar su mandato, continuó construyendo comunidad desde su trabajo como docente del Colegio Nacional 1.
Al llegar la dictadura en 1955, fue dejada cesante como una de las tantas muestras de persecución política que ella y su familia debieron soportar, como tantas otras personas en el país que habían apostado a la democracia y la justicia social. Sólo se le permitió regresar a la docencia doce años más tarde, cuando se desempeñó como rectora del Colegio Nacional 2, introduciendo en su colegio el innovador Proyecto 13.
Tuvo una activa militancia política en el peronismo jujeño, siendo locutora oficial de la Rama Femenina de ese movimiento.