TILCARA. El museo "Ernesto Soto Avendaño", de la localidad de Tilcara, le destinó una de sus salas a la obra llamada "Homenaje al escultor Ernesto Soto Avendaño", del artista Rosario Gaspar.
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TILCARA. El museo "Ernesto Soto Avendaño", de la localidad de Tilcara, le destinó una de sus salas a la obra llamada "Homenaje al escultor Ernesto Soto Avendaño", del artista Rosario Gaspar.
La obra, sobre el fondo gris de la pared, nos muestra el abrazo de dos personajes. El mayor contiene en sus brazos al otro, y ambos tienen los ojos cerrados como si buscaran con este acto eternizar el bello momento.
La pieza, de un formato casi ovalado, nos sugiere entenderla como un trozo de la realidad de que emerge, entorno que no se nos muestra sino que debemos componer con nuestra imaginación.
Al estilo de los fragmentos que repara el tiempo, sobre ellos pareciera sobresalir parte del espacio que los contiene. La mano que cubre la cintura del más joven es la que goza del detalle de los dedos, como si el aspecto interior se fundiera en el gesto.
La escultura brinda, acaso por las expresiones de sus protagonistas, sus movimientos quedos de arrullo y el color natural del material, en el que destellan puntos negros y blancos sobre la piedra gris, la sensación de una inmensa paz en la que el peso de la talla y la sensación de desequilibrio remiten a un conjunto ausente.
Hijo adoptivo de Medardo Pantoja, el artista plástico Rosario Gaspar nació en el año 1940. Participó como ayudante en la ejecución del monumento al canónigo Juan Ignacio Gorriti.
Discípulo de Nicasio Fernández Mar, creó junto a Orlando Bolívar el monumento a la madre, emplazado en la plazoleta de Cuyaya.
Fue parte del mural de piedra del Ministerio de Bienestar Social, obra que, como el homenaje a Gorriti, son obras de su maestro.
Fue parte de la selección y embalaje del Monumento a la Independencia, realizado por Ernesto Soto Avendaño, para su traslado de Buenos Aires a Jujuy en 1975.