En una zafra que tuvo la corta duración de 63 días, Ingenio La Esperanza alcanzó la producción de 30 mil toneladas de azúcar y un record de 7 mil toneladas diarias de caña, superando ampliamente, la molienda de administraciones anteriores. Esto fue posible, merced a la visionaria mirada de sus nuevos dueños, por un lado, el directorio de Inmobiliaria del Norte SA (Ginsa), razón social de ingenio La Esperanza y su predio fabril que, tras la tragedia ocurrida, a tan solo cinco meses de haber tomado posesión de la empresa, apostó al desafío de poner en marcha el viejo ingenio. El objetivo fue concretar la zafra 2020, para lo cual, realizó una millonaria inversión que le permitió reconstruir el sector desbastado por el incendio, entre ellas, las secciones de calderas, usina y laboratorio, cuyo monto superó los 7 millones de dólares. También es de destacar la labor del directorio de Productora del Noroeste SA (Pronosa), responsable de la producción de los campos que, avizorando un futuro promisorio, realizó la inversión de 7 millones de dólares en terrenos, plantaciones nuevas, fertilización, reparaciones, adquisición de maquinarias nuevas, entre otros. Sin lugar a dudas, que el logro más importante, fue transitar este año en medio de una pandemia que golpeó al mundo entero, cumpliendo estrictamente con el protocolo y las normas de bioseguridad, para el cuidado del personal, no teniendo que lamentar el deceso de ningún trabajador a causa del Covid-19.
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En una zafra que tuvo la corta duración de 63 días, Ingenio La Esperanza alcanzó la producción de 30 mil toneladas de azúcar y un record de 7 mil toneladas diarias de caña, superando ampliamente, la molienda de administraciones anteriores. Esto fue posible, merced a la visionaria mirada de sus nuevos dueños, por un lado, el directorio de Inmobiliaria del Norte SA (Ginsa), razón social de ingenio La Esperanza y su predio fabril que, tras la tragedia ocurrida, a tan solo cinco meses de haber tomado posesión de la empresa, apostó al desafío de poner en marcha el viejo ingenio. El objetivo fue concretar la zafra 2020, para lo cual, realizó una millonaria inversión que le permitió reconstruir el sector desbastado por el incendio, entre ellas, las secciones de calderas, usina y laboratorio, cuyo monto superó los 7 millones de dólares. También es de destacar la labor del directorio de Productora del Noroeste SA (Pronosa), responsable de la producción de los campos que, avizorando un futuro promisorio, realizó la inversión de 7 millones de dólares en terrenos, plantaciones nuevas, fertilización, reparaciones, adquisición de maquinarias nuevas, entre otros. Sin lugar a dudas, que el logro más importante, fue transitar este año en medio de una pandemia que golpeó al mundo entero, cumpliendo estrictamente con el protocolo y las normas de bioseguridad, para el cuidado del personal, no teniendo que lamentar el deceso de ningún trabajador a causa del Covid-19.
Así, cinco días antes de finalizar noviembre, la sirena marcó el final de la zafra 2020, en el emblemático ingenio que, durante la pandemia, dejó atrás la situación de abandono debido a la desinversión efectuada durante el largo periodo de quiebra, de más de veinte años. Los trabajadores, expresaron su beneplácito, subrayando que ahora sienten, asegurada la fuente de trabajo. "Tenemos fe de que el tener que salir a la ruta o a quemar gomas para que se realicen las reparaciones durante la interzafra o para que nos paguen los salarios, ya es parte de un pasado que no queremos que vuelva. Muchos compañeros fuimos capacitados, nos llevaron a Tucumán, yo, de cortador de caña, pasé ahora a manejar este tractor moderno, otros changos ya manejan las nuevas máquinas integrales, de esto hablamos muchas veces durante la lucha, esto es lo que soñábamos. Pueden venir a ver si no creen, y aquí nos encontrarán trabajando, poniendo el lomo, la gran diferencia es que ahora hay un dueño y en la medida en que inviertan, esta tierra generosa les dará los mejores frutos y en la fábrica, los muchachos demostrarán todo lo que pueden dar, si cumplen en invertir y en pagar los sueldos", expresaron los obreros mientras invitaban a subir a las nuevas máquinas para dejar registrado todo.
En tanto integrantes del directorio de Ginsa, fueron breves y concisos en su apreciación, "en esta nueva etapa, es notoria la impronta con visón de futuro de cada obra, en distintas escalas, que ha sido realizada acorde a las buenas prácticas que confieren sustentabilidad y crecimiento, apuntando a la vanguardia. El esfuerzo, el compromiso y el trabajo sigue adelante, aún con las dificultades del contexto mundial de pandemia de Covid-19, afrontando importantes gastos para el correcto cumplimiento de los protocolos de bioseguridad".
Inversión y producción
En cuanto a las inversiones realizadas dieron cuenta de que, tras el voraz incendio, la sección caldera, sufrió serios daños estructurales que la dejaron inoperativa, por ello, se hicieron las inversiones para que pueda operar y empezar la zafra, empezando con el desmontaje y posterior armado de la estructura de las calderas, la ingeniería y puesta en marcha del sistema de control de generación de vapor. Refirieron que las inversiones, permitieron bajar los costos por cuanto ya no se utiliza gas, siendo reemplazado por combustible renovable. Se trabajó, además, en la construcción y sistema de alimentación de bagazo para las cuatro calderas, la modificación de rastra, pasillos, recolección y distribución de vapor, así como la adecuada distribución a la nueva estructura de la caldera y la incorporación de dosificador de bagazo.
Se trabajó en la puesta a punto de laboratorio y hubo una importante inversión en la sección usina. La empresa Pronosa, razón social que se ocupa de la producción de campo, realizó la inversión de 7 millones de dólares, para recuperar tierras realizar plantaciones, fertilización de más de 390 mil surcos remoción de equipos abandonados. Se realizaron reparaciones de bombas, de motores, movimientos de equipos. Se invirtió en el sistema de control de GPS, y en código de habitación de software que hace a esos sistemas. Otra importante medida fue la adquisición de palas niveladoras, tractores, entre otras máquinas. Cabe acotar que tanto para fábrica como en campo, se utilizó gran cantidad de mano de obra, abriendo la posibilidad de trabajo.