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Yemen envuelto en combates entre el ejército y los rebeldes

A pesar de ser una zona de alto el fuego, los combates con armas pesadas continúan mientras los civiles huyen.El conflicto yemení estalló en 2014, cuando los insurgentes ocuparon la capital, Saná, y otras provincias del país.

Viernes, 20 de marzo de 2020 01:01

En Yemen se vivieron combates voluminosos en Al-Hudayda en el oeste del país entre las fuerzas de ejército y los milicianos de Hutí.

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En Yemen se vivieron combates voluminosos en Al-Hudayda en el oeste del país entre las fuerzas de ejército y los milicianos de Hutí.

En la declaración hecha de las Fuerzas de Amaliqa vinculadas al ejército de Yemen fue señalado que en la zona Es-Salih de Al-Hudayda los hutíes atacaron con armas pesadas a los localizados pertenecientes a las fuerzas de ejército y ocurrieron combates voluminosos.

Fue informado que en los combates hubo decenas de muertos y heridos entre los hutíes, no se dio información sobre la cifra y fue añadido que los hutíes tuvieron que replegarse al final de los combates.

Mientras no se hizo declaración sobre las pérdidas del ejército, se sabe que en la provincia Bayt al-Faqih donde está el ejército, fueron suprimidos tres depósitos de armas pertenecientes a los hutíes.

Por otra parte, los hutíes acusaron a las fuerzas del ejército por violar el alto el fuego en Al-Hudayda.

En la noticia que está en la agencia Saba perteneciente a los hutíes fue alegado que el ejército de Yemen realizó 21 ataques a los puntos establecidos para la práctica del alto el fuego en las últimas 24 horas.

Además, los hutíes alegaron que las tropas del ejército atacaron con misiles Katiusha a varias zonas en Al-Hudayda.

Hace unos días, el enviado especial de la ONU para Yemen, Martin Griffiths, había solicitado un alto el fuego en el norte del país, donde se registraba una escalada de la violencia, tras la toma por parte de los rebeldes hutíes de la estratégica ciudad de Al Hazm, limítrofe con Arabia Saudita.

"Reitero mi llamamiento para un cese inmediato e incondicional y el comienzo de un proceso de desescalada integral, inclusivo y responsable", exigió Griffiths en Twitter después de reunirse en Marib con las autoridades del Gobierno de Abdo Rabu Mansur Hadi, reconocido internacionalmente.

La ciudad fronteriza de Al Hazm, capital de la provincia de Al Yauf, fue tomada el 1 de marzo por los insurgentes yemeníes tras semanas de combates contra las fuerzas gubernamentales respaldadas por la coalición árabe liderada por Arabia Saudita, principal aliado de Hadi.

"Yemen se encuentra en una coyuntura crítica; o silenciará las armas y reanudará el proceso político, o volveremos a entrar en un conflicto a gran escala", afirmó el enviado especial de Naciones Unidas, citado por la agencia de noticias EFE.

La toma de Al Hazm fue un duro golpe para el Ejecutivo de Hadi y la coalición saudita, ya que dejó a los insurgentes hutíes a un paso de la vecina provincia petrolera de Marib, principal bastión del Gobierno donde huyeron miles de personas por el recrudecimiento de los combates en Al Yauf.

"Marib ha sido un refugio para cientos de miles de yemeníes desplazados. Justo la semana pasada, miles de familias llegaron aquí huyendo de los combates en Al Yauf. Las partes deben asegurarse de que Marib seguirá siendo un refugio, no el próximo epicentro de la guerra", reclamó Griffiths, quien consideró "inútiles" a "las aventuras militares y la búsqueda de ganancias territoriales" de los rebeldes.

El conflicto yemení estalló en 2014, cuando los insurgentes ocuparon la capital, Saná, y otras provincias del país y expulsaron al presidente Hadi, hoy exiliado en Arabia Saudita.

Arabia Saudita y sus aliados árabes intervienen militarmente en el conflicto desde marzo de 2015 para tratar de derrotar a los hutíes, apoyados por Irán, y restituir al dirigente exiliado.

En palabras de la ONU, el conflicto de Yemen es el peor desastre humanitario del planeta y alrededor del 80% de los cerca de 30 millones de habitantes del país necesitan alguna necesidad básica, mientras que más de la tercera parte necesita asistencia internacional para poder comer cada día.