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Estados Unidos ya es el nuevo foco del covid-19

El país gobernado por Donald Trump superó a China en la cantidad de casos según un centro de monitoreo global.

Viernes, 27 de marzo de 2020 01:04

El coronavirus infectó a más de 500.000 personas en el mundo, con más de 23.000 muertos, y Estados Unidos -con 82.400 casos- superó en cantidad a China, el país desde el que se disparó la pandemia.

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El coronavirus infectó a más de 500.000 personas en el mundo, con más de 23.000 muertos, y Estados Unidos -con 82.400 casos- superó en cantidad a China, el país desde el que se disparó la pandemia.

Los nuevos datos del centro de monitoreo la Universidad de Johns Hopkins difundidos ayer parecen confirmar el pronóstico de la Organización Mundial de la Salud de que Estados Unidos se convirtió en el nuevo foco principal de la pandemia.

Mientras, los gobiernos de las 175 naciones afectadas hasta ahora reinventan estrategias, ven crujir sus sistemas de salud y modifican sus agendas para neutralizar el brote que, salvo excepciones, aún se encuentra en su fase ascendente.

La Universidad Johns Hopkins informó en su último balance que los casos ya son más de 510.000 y destacó que Italia, con 7.503 muertes -casi un tercio de los fallecimientos totales-, es el país donde el brote golpeó de manera más mortífera hasta ahora.

Luego se ubica España, donde los contagios se aceleran y ya son 4.089 los muertos, 56.188 los contagios y 7.015 los pacientes recuperados, mientras que China, con muchos más contagios (81.782), tiene menos muertos (3.291) y es una de las pocas naciones donde la curva ya pasó su punto de inflexión y la preocupación de las autoridades se desplazó a lograr controlar los contagios no nativos.

Ayer el gigante asiático registró solo 67 nuevos casos en las últimas 24 horas, todos ellos importados.

A partir de esta nueva tendencia, China anunció el cierre de sus fronteras para todos los extranjeros, aún aquellos con visas y permisos de residencia, a partir de la medianoche del próximo sábado.

Más allá de cada caso en particular, la curva de contagios permanece aún en su pendiente positiva en la enorme mayoría de los países y sus gobiernos -con miles de millones de personas en cuarentena- barajan diversas políticas públicas para revertir esta tendencia, resolver la crisis sanitaria que implica y enfrentar la debacle económica que los especialistas anticipan.

Ayer el Senado estadounidense aprobó un paquete de 2,2 billones de dólares para ayudar a comercios y trabajadores y reforzar el sistema de salud ante la epidemia. Solo en una semana, se acumularon 3,8 millones de peticiones de seguro de desempleo en ese país.

El paquete de ayuda es el mayor de la historia de Estados Unidos y fue aprobado por unanimidad pese a las dudas en ambos partidos sobre si será suficiente, luego de trabajosas negociaciones.

El Gobierno británico, en tanto, pese a su reticencia inicial a aplicar medidas, anunció ayer un paquete financiero destinado a ayudar a los trabajadores autónomos, informó el ministro de Economía, Rishi Sunak.

El Estado les pagará, a aquellos que tengan ingresos de 50.000 libras o menos por año, el 80% de lo que facturaban, con un límite de 2.500 por mes (unos 3.000 dólares).

La semana pasada, las autoridades habían establecido subsidios salariales del 80% o hasta 2.500 libras por mes para el personal contratado por los empleadores, como parte de un paquete de medidas "sin precedentes" para evitar el despido de trabajadores debido a la crisis.

Bélgica, por su parte, registró 1.298 nuevos contagios en un día, lo que duplicó el registro del miércoles, y avivó temores de una pronta saturación en sus instalaciones sanitarias, mientras el número total de infectados trepó a 6.236 y los muertos 220, informó el el Servicio Federal de Salud.

Bruselas, la sede de la Unión Europea, anunció que no aceptará pacientes de coronavirus de otras naciones, pese a los pedidos de Italia y Países Bajos, hasta que no se supere el pico de la epidemia.

Los líderes del G20, que realizaron ayer una cumbre virtual para abordar la situación mundial por el brote, afirmaron que están inyectando más de 5 billones de dólares en la economía global.

"Nos comprometemos a hacer lo que haga falta y a usar todas las herramientas políticas disponibles para minimizar el daño económico y social de la pandemia", indicaron los países del G20 en un comunicado conjunto al término de una reunión virtual de líderes del organism

En Corea del Sur, donde la curva de contagios no es ascendente y donde no están limitados movimientos de sus ciudadanos y las fronteras se mantienen abiertas, la aparición de nuevos contagios importados preocupa a las autoridades sanitarias que decidieron intensificar sus medidas de contención en el área metropolitana de Seúl. En el plano regional, los gobernadores terminaron de tomar las riendas de la gestión de la pandemia en Brasil, ante la inacción del presidente Jair Bolsonaro.

El gobernador de Río de Janeiro, Wilson Witzel, afirmó que analiza establecer un hospital de campaña en el estadio Maracaná, como parte de las medidas de emergencia para hacer frente al coronavirus.

"Es muy probable que montemos un hospital de campaña en el Maracaná, tenemos que elegir el mejor lugar para hacerlo", declaró Witzel.

Compromiso del G20 sobre las medidas necesarias

“En el frente comercial, el G20 debe mandar un mensaje fuerte para restaurar la confianza”, en el contexto global.

El G20 se compromete a tomar las medidas necesarias para reducir los riesgos del coronavirus. Los miembros del G20 se comprometieron ayer a adoptar las medidas “que hagan falta” para minimizar el daño social y económico que está generando el coronavirus y afirmaron que están inyectando 5 billones de dólares en la economía global.

“Nos comprometemos a hacer lo que haga falta y a usar todas las herramientas políticas disponibles para minimizar el daño económico y social de la pandemia”, indicaron los países del G20 en un comunicado conjunto al término de una reunión virtual de líderes del organismo. En la nota, el G20 se comprometió “a tomar todas las medidas de salud necesarias y buscar asegurar la financiación adecuada para proteger a la gente, especialmente los más vulnerables”. Asimismo, los líderes del grupo asumieron el compromiso de compartir “información oportuna y transparente”, intercambiar datos epidemiológicos y clínicos, compartir materiales para la investigación y “fortalecer los sistemas de salud a nivel mundial”.

En ese sentido, apuntaron la importancia de fortalecer el mandato de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en la coordinación de la lucha contra la pandemia y se comprometieron a “proporcionar recursos inmediatos” a la agencia de Naciones Unidas, así como a otras organizaciones y fondos como la Coalición para las Innovaciones en Preparación para Epidemias (Cepi). Encomendaron a los ministros de Salud reunirse “cuando sea necesario” para compartir las prácticas que se llevan a cabo en los países y así desarrollar un conjunto de “acciones urgentes” para combatir la pandemia, que se darán a conocer en una reunión ministerial que tendrá lugar el próximo abril. El Ministerio de Relaciones Exteriores saudita, presidente pro tempore del organismo, difundió imágenes del rey Salman bin Abdelaziz en una pantalla durante su turno en el uso de la palabra con líderes de otros países en los recuadros inferiores. El Ministerio saudita y la agencia oficial SPA informaron en una serie de mensajes en Twitter que Salman se refirió en su discurso inicial a la “responsabilidad” como “líderes de las economías más grandes del mundo” de afrontar la pandemia del coronavirus. “En el frente comercial, el G20 debe mandar un mensaje fuerte para restaurar la confianza reanudando tan pronto como sea posible el normal flujo de bienes y servicios, especialmente médicos vitales”, dijo el monarca, citado por la agencia de noticias EFE.

Durante las deliberaciones, el presidente Alberto Fernández sugirió que los países del mundo “compartan la visión” de la Argentina de hacer primar la salud frente a la economía ante la pandemia del coronavirus y, en ese sentido, impulsó “diseñar y suscribir un gran pacto de solidaridad global” ya que “ha quedado visto que nadie se salva solo”. El mandatario afirmó que en estos momentos “no hay lugar para demagogia ni improvisaciones”, ya que el mundo “enfrenta el dilema de preservar la economía o la salud de nuestra gente” y ratificó que la Argentina “no duda en proteger integralmente la vida” de las personas. Entre las imágenes que pudieron verse de los participantes, aparece el primer ministro indio Narendra Modi, el japonés Shinzo Abe y el canadiense Justin Trudeau.