Con la melodía de "El Promesante", los sikus volvieron a sonar en Tilcara respetando la cuarentena. Su impulsor, Aníbal Mamaní, dice que "nace con esta cuarentena que estamos viviendo, y esta fiesta que ya debiéramos estar viviendo como todos los años. Hablaba con amigos y todos recordábamos que estaríamos en el cerro, con las bandas de sikuris, en el Santuario de la Virgen del Abra".
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Con la melodía de "El Promesante", los sikus volvieron a sonar en Tilcara respetando la cuarentena. Su impulsor, Aníbal Mamaní, dice que "nace con esta cuarentena que estamos viviendo, y esta fiesta que ya debiéramos estar viviendo como todos los años. Hablaba con amigos y todos recordábamos que estaríamos en el cerro, con las bandas de sikuris, en el Santuario de la Virgen del Abra".
Nos cuenta que "puede parecer gracioso, pero estoy en un grupo de Whatsapp de músicos que hacemos fútbol los viernes. Estamos todos en casa, comprometidos, tratando de ser responsables del contrato social, y por ahí empezó la idea: hagamos algo, hagamos música. Todos tocan sikus, les tiré la idea a varios y en dos días tratamos de armarlo lo mejor posible".
Nos explica que "todo respetando la cuarentena obligatoria, quedándose en casa pero con esas ganas de tocar todos juntos. Es que somos una comunidad, necesitamos motivarnos, sentir la presencia aunque sea desde la casa, y esas ganas de salir de esto. Hay algo que nos arraiga a nosotros, y es la fe, y esta fe que estamos viviendo cerca de la Semana Santa, así que esta mañana de domingo, a las 11, quisimos expresarla".
Dice que "acá en el barrio de San Francisco había diez, doce, quince tocando en sus casitas, escuchabas al vecino, te saludaba desde la ventana, de la terraza, otro desde el techo que te hacía señales con el siku, más abajo otros tres. El sonido se escuchaba también en los barrios de Las Viviendas, La Falda, Usina, y sonaban los bombos, los redobles en Villa Las Rosas, Radio Estación. Familias enteras a veces, los hijos, los padres, los abuelos, todos".
Resume que "fue algo que nos motiva para seguir luchando en esta situación, tratando de vivir nuestra fe y nuestras expresiones culturales. Elegimos "El Promesante" porque habla de esto de peregrinar, de llegar al Santuario que está a 4.000 metros sobre el nivel del mar, y se escuchaba también quienes la cantaban. Por las radios del pueblo pudieron reproducir una pequeña pista que hicimos, cada uno ponía cada cosa: la voz de Micaela Chauque, el sikus, el redoble, la matraca".
Subraya que "es importante que reflexionamos entre todos que esta actividad se tenía que hacer desde las casas, sin agruparse. Algunos ya empezaron a proponer que el Domingo de Ramos se vuelva a hacer, o el día de la bajada de la Virgen, si es que sigue la cuarentena".