Tres jóvenes fueron detenidos en las últimas horas en la ciudad de Palpalá quienes estaban involucrados en varios hechos delictivos cometidos en la ciudad siderúrgica aprovechando que varias propiedades y negocios no están habitados o permanecen cerrado sin la presencia de sus dueños durante varios días.
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Tres jóvenes fueron detenidos en las últimas horas en la ciudad de Palpalá quienes estaban involucrados en varios hechos delictivos cometidos en la ciudad siderúrgica aprovechando que varias propiedades y negocios no están habitados o permanecen cerrado sin la presencia de sus dueños durante varios días.
Los malvivientes, con domicilio en esa ciudad, fueron atrapados luego de que en la madrugada del pasado domingo robaran en el kiosco de la Escuela Especial "Juan Pablo II" ubicada en el barrio Canal de Beagle y utilizarán los servicios de un remís para trasladar los artículos que lograron sacar del establecimiento.
Como el ilícito se cometió alrededor de las 3 de la mañana al trabajador le resultó muy sospechosa la hora para realizar una mudanza razón por la cual se presentó en la sede policial denunciando que había sido abordado por unos hombres que cargaban entre otras cosas, un horno eléctrico, licuadora, anafe, un ventilador y otros artículos que despertaron la sospecha del hombre.
Con los datos aportados se dirigieron a una vivienda donde lograron la detención del mayor de los integrantes de la banda y quien podría ser el jefe de la misma.
Recuperan artículos robados
El hombre de 23 años con domicilio en el barrio San José fue trasladado a la Seccional 23º donde confesó que los ilícitos los había concretado con la participación de dos cómplices de 18 años que residen uno en Martijena y el otro en Carolina.
Continuando con las tareas de investigación se determinó que los inculpados eran los autores del robo a una confitería hace aproximadamente un mes atrás desde donde se apropiaron de numerosos elementos destinados a la elaboración de comida, especialmente sándwiches y minutas.
Los vecinos de una vivienda ubicada en el barrio Antártida Argentina denunciaron a su propietario y de esa manera se logró recuperar una parte importante de los artículos robados no sólo en el negocio de gastronomía sino en un taller.
Otras cosas secuestradas fueron encontradas en diferentes domicilios y las mismas fueron entregadas voluntariamente por las personas que afirmaron desconocer su procedencia.
Las investigaciones son dirigidas por el ayudante de fiscal Daniel Adolfo Paredes quien dispuso en las últimas horas nuevas medidas procesales tendientes a dar con otros integrantes.