El Servicio Penitenciario de Jujuy hoy celebra un nuevo aniversario.
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El Servicio Penitenciario de Jujuy hoy celebra un nuevo aniversario.
Y es que cumple 87 años de vida y de una labor constante que necesita de temple, respeto y responsabilidad.
El inspector general y jefe del Servicio Penitenciario, Daniel José Chaile, brindó detalles de las expectativas desde la institución en esta fecha tan especial.
"Para celebrar este día, queremos remontarnos a la historia, a cómo surgió todo esto. El 14 de junio de 1933 nació el Servicio Penitenciario de Jujuy como establecimiento independiente.
Antes trabajaba con la policía en el viejo cabildo, donde funcionaba la excentral de Policía, donde funcionaba policía y cárcel" comenzó su relato.
En ese año de 1933, se lograron muchos avances en cuanto a la reglamentación interna y en cuanto a los sistemas que eran diferentes al tratar a las personas privadas de su libertad.
"En aquél momento se pensó en como abordar a las personas recientemente arrestadas y se ha decidido separar un terreno, donde está actualmente asentada la institución y construyeron la primer cárcel" continuó. Es así que se creó lo que hoy se conoce como "La Redonda", donde se encuentra el pabellón 3 y 2, que incluye los talleres de herrería y carpintería.
"Toda la parte donde está la Plaza de los Inmigrantes, era espacio del Servicio Penitenciario, todo era chacral, verduras y frutas, donde se cultivaban y trabajaban los internos" detalló.
Con los años, el Servicio Penitenciario fue creciendo, luego se hizo el pabellón 5 y el pabellón 1 con todo el frente de la unidad.
Por su parte, el inspector general Oscar Ricardo Farfán quién también es subjefe del Servicio Penitenciario destacó que a medida que fue avanzando el tiempo, el establecimiento se fue proyectando a futuro.
A partir de allí, el servicio se fue ampliando debido a más ingresos de internos.
"Nos vimos obligados de adaptarnos y se crearon nuevas unidades como la 2, 3, 4, 5, 7 y la de El Remate que se encuentra en Palpalá; donde los internos cumplen tareas agricultoras" contó.
En la actualidad, se está logrando la remodelación de las instalaciones. Un ejemplo de ello es la unidad 7, que cuenta con un sector de la comunidad terapéutica y que reúne a dieciocho internos que hacen tratamientos especiales.
Esta actividad -que nació el 20 de marzo de 2014- tiene por meta que aquél interno que sufre de adicciones o trastornos emocionales, tenga la oportunidad de hacer la terapia correspondiente para superar su situación dentro del mismo contexto de encierro.
Es un sistema abierto, ajerárquico y de comunión incluso entre el personal y el interno.
"Da gusto ir a visitarlos porque cada vez que vamos, los internos nos atienden muy bien, nos cuentan cuáles son sus expectativas, sus actividades y eso nos ayuda a nosotros a fortalecer lazos y sostener nuestra idea de seguir creciendo" destacó Chaile, quien aseguró que dentro de las planificaciones de esta gestión se encuentra crear una unidad terapéutica para el sector femenino y para mayores.
"No nos olvidemos que la droga ha castigado demasiado, no solamente en nuestra provincia sino en muchas partes del mundo. Y a través de ese consumo se realizan los delitos. Mucho apuntamos a la capacitación de nuestro personal, al compromiso y responsabilidad" comentó. "Nosotros participamos de las reuniones de ellos y es importante porque conocer a una persona que cometió un delito, que lo cuente, que reconozca su error y asumir el contexto en el que se encuentra, es parte de la recuperación" indicó por su parte Farfán.
Y es que la esencia de la misión del agente penitenciario es brindar seguridad pública a través contexto de encierro; con el fin de que la persona salga y no vuelva a cometer algún tipo de ilícito.
"Esa es nuestra idea como institución y fuerza de seguridad: lograr que la persona reconozca lo que hizo, acepte la culpabilidad que haya tenido en el grado que corresponda, cumpla la condena si es condenado y que se rehabilite; que pase etapa por etapa y llegue a la calle preparado" dijo Farfán. "Con el programa de regulación emocional, nos perfeccionamos y capacitamos para abordar los distintos casos que conviven entre sí" dijo.
Así, la estrategia de las autoridades es entrar, caminar, recorrer el espacio y entender la demanda del interno, del personal que está haciendo guardia y de quiénes están en los puestos. "Hacer nuestro trabajo de la mejor manera posible que destacaremos en el acto pequeño que realizaremos esta semana recordando esta incesante y esencial labor" finalizó.