La investigación por el crimen de José María Villafañe puede cerrar el círculo en los próximos días y dar por fin con un hombre que habría participado en el hecho que conmocionó a toda la provincia.
De momento la única imputada es su novia Magalí “Mapi” Quiroga Saenz (23), quien se abstuvo de prestar declaración, pero se encargó de destruir todo elemento probatorio que creyó indispensable para la causa, lo que hace suponer a los investigadores que estaría defendiendo a alguien y ese es el principal hilo que siguen los pesquisas.
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La investigación por el crimen de José María Villafañe puede cerrar el círculo en los próximos días y dar por fin con un hombre que habría participado en el hecho que conmocionó a toda la provincia.
De momento la única imputada es su novia Magalí “Mapi” Quiroga Saenz (23), quien se abstuvo de prestar declaración, pero se encargó de destruir todo elemento probatorio que creyó indispensable para la causa, lo que hace suponer a los investigadores que estaría defendiendo a alguien y ese es el principal hilo que siguen los pesquisas.
Recientemente el Ministerio Público de la Acusación emitió un resumen de las actuaciones que la Unidad Fiscal a cargo de Diego Cussel está llevando a cabo desde el pasado 3 de mayo y se desprendieron muchos datos de importante interés para la causa.
Hasta el momento se recepcionaron seis declaraciones testimoniales que llevaron a tener la plena certeza que otra persona estuvo con la pareja esa madrugada, y una séptima persona que optó por no atestiguar será traído por la fuerza pública.
Por otra parte se supo que los resultados del departamento de Criminalística ya fueron aportados al expediente judicial.
Los números de teléfonos
La madre de la imputada Quiroga Sáenz le habría dicho al fiscal que la joven quemó su teléfono celular, pero Dirección de Asistencia Judicial en Delitos Complejos y Crímenes Organizados (Dajudeco) logró establecer el historial de llamados que la imputada realizó la madrugada, la mañana y el mediodía de la jornada en que Villafañe fue asesinado de un disparo en la cabeza.
Fuentes confiables le dijeron a nuestro diario que de la investigación, tres números de teléfonos estarían “marcados”, dos corresponderían a familiares directos y el tercer número es con el que desde el celular de la imputada se realizaron más de 11 llamadas que duraron varios minutos, en el horario que la joven se encontraba prófuga, luego de haber abandonado a su novio en la guardia del hospital Snopek del barrio Alto Comedero.
Otro dato no menor es el resultado de la pericia del GPS del vehículo marca Ford Ecosport a nombre de la imputada, que utilizó para huir del lugar, se activó en la celda telefónica donde se encontraba precisamente este número de teléfono, que los investigadores siguen sin tregua, para dar con esta persona.
A raíz de esto, desde el 16 de junio pasado la División de Homicidios de la Brigada de Investigaciones está detrás de un hombre que tendría un estrecho vínculo con “Mapi” Quiroga Saenz, que también sería conocido de la víctima fatal y que contaría con un frondoso prontuario de antecedentes penales, según las fuentes consultadas por nuestro diario.