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"Cuando la acción depredadora humana baja, la naturaleza se recupera"

Es asesor técnico del Instituto Nacional Indígena, integrante de la comunidad Quilmes del Valle Calchaquí de la provincia de Tucumán, y trabaja como ceramista.Indicó la importancia de recuperar el valor de los conocimientos ancestrales y compatibilizarlos con los conocimientos científicos para revalorizar los bienes naturales.
Lunes, 29 de junio de 2020 01:01

El 21 de junio dio inicio un nuevo año andino, ¿Cuál es la importancia de esta fecha para las comunidades originarias y agrarias?

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El 21 de junio dio inicio un nuevo año andino, ¿Cuál es la importancia de esta fecha para las comunidades originarias y agrarias?

Todo el mundo andino celebra el año nuevo andino, es un acontecimiento en esta época del año para el hemisferio sur ya que está relacionado con un hecho natural, se trata de cómo se comporta el sistema solar y nuestro planeta en consecuencia. El funcionamiento de la tierra tiene mucho que ver con el movimiento del sol. El año nuevo andino es una fecha de mucha importancia para las comunidades agrarias, ya que marca un inicio de ciclo anual. En esta época ya se levantaron las cosechas, la tierra está descansando pero al mismo tiempo comienzan a hacer los almácigos de la próxima cosecha. El inicio de este ciclo lo marca el sol cuando retorna en su carrera hacia el sur que dura 6 meses. Ese ciclo ha sido observado y analizado en profundidad por nuestros mayores ya que ellos entendieron que este hecho determina la vida de los pueblos sobre todo de aquellos que aún mantienen el contacto con la naturaleza. En las grandes ciudades se ha olvidado estas fechas pero no así en la comunidad rurales y comunidades originarias porque somos los que estamos el día a día con la tierra.

¿Es posible en el inicio de un nuevo año andino realizar predicciones sobre condiciones climáticas o rendimiento de la tierra?

Sí, nuestros adultos tienen el conocimiento para hacer ese tipo de lecturas. Nuestros adultos saben cómo leer la naturaleza, observan la posición de la luna, el color, la posición del sol y otras características que les permiten saber cómo será el año que inicia. Nuestros mayores creen que la misma naturaleza va anunciando si el año será ventoso o si habrá muchas sequías. Creo que tenemos que revalorizar esos conocimientos y a lo mejor podemos compatibilizar con el conocimiento llamado científico.

Se puede observar que en la actualidad hay un mayor interés por el conocimiento ancestral, ¿cree que es un indicio del interés de la sociedad por volver hacia lo natural?

Sí, se observa un mayor interés por conocer estos rituales y su significado. Pero no creo que sea un indicio de que estamos volviendo hacia la naturaleza. Para poder tener un retorno hacia lo natural, es necesario reflexionar que estamos yendo hacia un destino no conocido, tenemos que tomar conciencia de la dependencia que tenemos los seres humanos de la naturaleza, de la Pachamama o de la madre naturaleza como lo queramos llamar. El humano hasta ahora entiende que los elementos de la naturaleza son pasibles de explotación, no los entiende como bienes naturales. De hecho en los términos legales y en los discursos de los Estados y las grandes empresas el término que se usa es explotación, no es ni manejo, ni respeto. Para nada está en uso la palabra respeto o equilibrio. En cambio en nuestros pueblos hace muchos siglos atrás tomaron conciencia de ese problema y tenemos muy presente de lo que significaría destrozar a nuestra madre tierra y nuestros elementos o contaminarla.

Durante la cuarentena y ante la disminución de las actividades productivas la naturaleza se recuperó y muchos animales volvieron a los sitios de donde fueron desplazados.

¿Cree que estos hechos nos harán reflexionar sobre la relación que debemos tener con el ambiente?

En realidad la naturaleza si no estuviera el humano sería feliz, si no estuviéramos no pasaría nada, porque somos el elemento contaminante. Lo que está fuera de lugar es el humano. Cuando la acción depredadora de los humanos baja, los animales vuelven a estar más tranquilos y retornan a su habitat de dónde el humano los desplazó. Creo que la conciencia que está tomando la sociedad sobre estas situaciones debe ser acompañada por el Estado con leyes que propongan un nuevo modo de vida porque sino por este camino vamos hacia algo destructivo.

Por ejemplo, todos saben que el Amazonas es el pulmón más grande del mundo sin embargo se lo está destruyendo. Y es cierto que hay leyes, pero el problema es que no se las cumple.