Mañana, con la edición habitual de El Tribuno de Jujuy, se publicará una separata especial de homenaje al General de Jujuy, don Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano.
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Mañana, con la edición habitual de El Tribuno de Jujuy, se publicará una separata especial de homenaje al General de Jujuy, don Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano.
Al finalizar el Mes Belgraniano, en el que el ilustre prócer nació, el día 3 en 1770, y pasó a la inmortalidad el 20, en 1820, nuestro diario se complace en ofrecer a sus lectores un trabajo especial realizado por la Universidad Nacional de Jujuy, que mostrará no sólo la faz reconocida de Belgrano como abogado y como militar, sino los otros aspectos de su vida que sin ser muy reconocidos, completan la personalidad de un político y sociólogo de visión maravillosa, la profundidad científica de su pensamiento y además, el carácter revolucionario, notablemente avanzado para su tiempo.
El trabajo de investigación y selección de textos estuvo a cargo del licenciado Benito Carlos Aramayo, economista y catedrático, profesor emérito de la Unju.
Completarán esta publicación de colección un panorama acerca del proyecto emancipador de la educación inspirado en Belgrano, a cargo del rector de la Unju, licenciado Rodolfo Tecchi, y una propuesta de Ediunju, la editorial de nuestra Universidad, a cargo del coordinador de la misma, el licenciado Daniel González.
También incluye esta separata una nota exclusiva del ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, acerca de la visión de Belgrano economista y el reflejo de sus pensamientos en el diario Correo de Comercio, del que fue cofundador.
Destacada mujer jujeña
Es bueno y útil para la memoria colectiva recordar a la querida Señora, profesora y directora del Colegio Nacional Nº 2, Palma Rosa Carrillo de Pereyra, en su onomástico. Destacada mujer jujeña de la política y de la educación. La recuerdo querida Palma... la llevo en mi existencia, por sus enseñanzas, su temple, expertes y sabiduría, pero más aún y todavía por su “maternaje secreto”, a hurtadillas, no eran necesarias confesiones... La veo, la sigo viendo cuando la recuerdo con su traje sastre, verde militar, verde que nos amedrentaba por aquellos años de la dictadura de estado. ¡Qué paradoja, Palma querida! Justamente el terrorismo de estado le había arrebatado a uno de sus hijos... Utilizaba gafas oscuras, seguramente para ocultar o disimular su tristeza y su dolor; pocos sabíamos por entonces esa realidad. Así y a pesar de todo, descubría y comprendía en sus docentes las circunstancias personales por las que atravesábamos.
Como gran terapeuta, brindaba a cada cual “alternativas posibles superadoras” cuando los vientos (léase pesares) eran desfavorables y para poder, entonces, regresar a la cotidianidad y poder realizar nuestras actividades docentes. Un día primaveral, sin previo aviso, me ordenó una acción diplomática. ¿A mí?, que ni una pizca de diplomacia tuve, tengo o tendré...; era una actividad incluida en el Proyecto 13, vigente institucional en aquel tiempo. Siendo yo una joven de 30 años no comprendía, ni sospechaba su intención, de modo que usted cumplió su objetivo. Yo lo procesé años más tarde y comprendí su gran aprendizaje; con los años, ocupé el lugar suyo y repliqué su enseñanza. Gracias, Palma Rosa, por tanto y por todo en mi nombre y seguramente en el de muchas y muchos colegas. Recuerdos y gratitud.