El Gobierno de Bulgaria decidió ayer que los eventos deportivos de cualquier disciplina vuelvan a desarrollarse a puertas cerradas, como consecuencia de un rebrote de casos de coronavirus en todo el país.
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El Gobierno de Bulgaria decidió ayer que los eventos deportivos de cualquier disciplina vuelvan a desarrollarse a puertas cerradas, como consecuencia de un rebrote de casos de coronavirus en todo el país.
"Todos los eventos deportivos al aire libre y los organizados en espacios reducidos se llevarán a cabo sin público", anunció el ministro de Salud búlgaro, Kiril Ananiev.
"Los nuevos casos de Covid-19 aumentaron en los últimos 10 días y superaron el umbral crítico de los 200 en 24 horas, y en los próximos días es posible una tendencia en alza", advirtió. Con las restricciones impuestas desde la aparición de los primeros casos de Covid-19 en marzo, Bulgaria, donde viven 7 millones de personas, es uno de los países europeos menos afectados por la pandemia, pues sólo se registraron 259 muertes. Decenas de casos fueron detectados entre jugadores y miembros de los cuerpos técnicos de cuatro equipos de la Ligue 1 de fútbol y entre hinchas que el domingo 5 de julio festejaron el triunfo de Lokomotiv Plovdiv ante CSKA Sofía en la final de la Copa de Bulgaria.
El 2 de julio, tras un error de laboratorio admitido por los propios médicos del centro, se conoció el resultado positivo de Martin Kavdanski, defensor del Tsarko Selo, que ese mismo día contagió a 19 personas (tres compañeros y 16 adversarios) durante un partido contra Cherno More Varna.
Por protocolo los jugadores debían someterse a controles de coronavirus antes del partido y todos resultaron negativos, pero el laboratorio búlgaro admitió el error en el test de Kavdanski.