El futbolista boliviano Gabriel Ríos, jugador de Aurora, sufrió la muerte de su madre por coronavirus, se contagió y describió la situación dramática que se vive en la ciudad de Cochabamba porque, advirtió, "en las clínicas no hay lugar para todos".
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El futbolista boliviano Gabriel Ríos, jugador de Aurora, sufrió la muerte de su madre por coronavirus, se contagió y describió la situación dramática que se vive en la ciudad de Cochabamba porque, advirtió, "en las clínicas no hay lugar para todos".
"Que todos se cuiden, el virus llegó con fuerza y me quitó lo que más quería. Estuve en contacto con mi madre y luego di positivo por Covid-19", dijo Ríos, de 32 años, en medios nacionales.
El futbolista también narró la dramática situación en Cochabamba: "En las clínicas no hay espacio para todos, pasé malos ratos buscando un lugar para mi mamá y después de conseguir, ella falleció. Ahora estoy en casa, siguiendo las indicaciones de los médicos, tengo los síntomas, me hice las pruebas y salió positivo".
"Espero que todo pase y después las pruebas sean negativas", apuntó el delantero de Aurora, que al momento de la suspensión por la pandemia marchaba en el último lugar del torneo de Primera.
Ríos es el segundo integrante del plantel de Aurora en contagiarse de coronavirus. Antes lo había hecho el entrenador, el exNewell’s Old Boys de Rosario Julio César Baldivieso.
Ayer, también se confirmó el contagio de los dos vicepresidentes de la Federación Boliviana de Fútbol, Robert Blanco y Marco Rodríguez; y se informó que el titular de la entidad, César Salinas, presenta síntomas compatibles con la enfermedad.
El país del altiplano está en plena crecida de casos positivos de Covid-
19, sin entrar en la desesperación social su actualidad es dura y el virus se sigue propagando con rapidez.