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Ejes de la alimentación con perspectiva ortomolecular

Miércoles, 15 de julio de 2020 01:01

Por ENRIQUE ARNAU doctor e ingeniero.

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Por ENRIQUE ARNAU doctor e ingeniero.

Linus Pauling (una mente brillante del siglo XX), propuso el término "medicina ortomolecular" en 1968 en la revista Science. La nutrición ortomolecular es un concepto revolucionario de la salud que se basa en la idea de que las enfermedades aparecen cuando el organismo presenta desequilibrios nutricelulares, y de que dichas enfermedades pueden ser tratadas y corregidas con una correcta nutrición celular. Consiste en proporcionarle a las células los nutrientes adecuados y en las dosis adecuadas para que éstas funcionen lo mejor posible.

En esta terapia siempre se trabaja con las mismos sustancias de las que está compuesto el organismo. Se trata de una terapia que acentúa el uso de las sustancias naturales tales como vitaminas, oligoelementos, enzimas, antioxidantes, aminoácidos, ácidos grasos esenciales, fibra dietética y ácidos grasos intestinales de cadena corta (Scfa), y los elementos químicos que están presente de manera natural en los alimentos de origen vegetal, llamadas sustancias fitoquímicas, también para la prevención y el tratamiento de enfermedades.

Los seres humanos envejecemos o nos enfermamos por diversas causas, entre ellas el sol, el tabaco, el estrés, la mala alimentación, las situaciones hormonales y/o genéticas que van produciendo un excesivo desgaste celular. Es decir, "nos intoxicamos" modificando la química en nuestro cuerpo, lo que provoca el deterioro celular (enfermedad o envejecimiento de las células. La medicina convencional trabaja en el ambiente (se construyen cloacas, se provee de agua potable, etc.) y con la enfermedad (los médicos indican antibióticos, antiinflamatorios, antihipertensivos, etc.). Es decir, la medicina convencional actúa "anti" o en contra de la enfermedad.

Por el contrario, la medicina ortomolecular actúa para estimular la potencialidad personal de cada individuo para vivir una vida al máximo de calidad. Es como un entrenamiento de alto rendimiento pero no del deporte sino de su vida. El método actúa en forma progresiva, respetuosa y natural en cuatro ámbitos del paciente: la actividad física (el movimiento como regulador de la química cerebral y corporal), la nutrición (a través de un reordenamiento en la alimentación: recordemos que según los griegos "la primera farmacia es la cocina"), técnicas para controlar el estrés y medicamentos ortomoleculares que son reconstituyentes, poderosos nutrientes celulares en base a péptidos, enzimas y oligoelementos capaces de recuperar las funciones y regenerar el organismo por completo.

La Organización Mundial de la Salud no sólo la reconoce como un sistema médico apto, válido y lógico para prevenir sino para curar enfermedades, para aumentar bienestar y calidad de vida en personas sanas o pacientes con: diabetes, sobrepeso, trastornos cardiovasculares, enfermedades autoinmunes, neurológicas, psicosomáticas, osteoarticulares, renales, trastornos estéticos, etc. Este tipo de medicina no tiene contraindicación alguna, ya que no contienen elementos sintéticos, hormonas, ni produce efectos colaterales en las dosis conocidas y utilizadas. Puede realizarse en adultos y niños. Es sin dudas, un sistema médico seguro y confiable.

La medicina ortomolecular tiene muchos beneficios, entre ellos: la depuración profunda del cuerpo, el aumento de la vitalidad en general, la flexibilidad y limpieza de arterias, aumento del sistema inmunológico (defensas), estimulación cerebral (atención, concentración y memoria), contribuye a la prevención de enfermedades y es coadyuvante en tratamientos de enfermedades ya establecidas. Para acompañar a esta medicina y lograr mejor calidad de vida, siempre se recomienda: realizar un chequeo clínico completo y anual (si es posible dirigido por un médico especialista en antiage), cuidar la alimentación adoptando las pautas de alimentación saludable indicadas en las notas que hemos publicado anteriormente.

La medicina antiage es sinónimo de calidad de vida, logrando la mejor versión de uno mismo. Nunca es demasiado tarde ni demasiado pronto para elegir tener una calidad de vida extraordinaria y alcanzar la mejor versión de uno. Se indica como conclusión que las propuestas basadas en la nutrición ortomolecular, se pueden seguir de forma sencilla, sin necesidad de fármacos y usando exclusivamente una alimentación saludable y los suplementos nutricionales naturales específicos basados en múltiples evidencias reconocidas.