-¿En qué situación se encuentra la industria jujeña en la pandemia?
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-¿En qué situación se encuentra la industria jujeña en la pandemia?
-El sector industrial en la provincia está trabajando en general, pero con todos los inconvenientes que implica la pandemia. Con una actividad no full time, sino reducida, pero que con los cambios que se van produciendo permanentemente se va viendo o se van realizando ajustes. Está claro que hay algunas actividades industriales que se han reducido por gente de la que no se puede disponer porque está en cuarentena, independientemente de si estén contagiadas o no. Y por la manera que se está expandiendo la infección, hace que aquellos que aún no han adquirido la enfermedad son contactos de personas que necesariamente tienen que estar en cuarentena, y se vaya reduciendo los planteles. Pero son cosas muy dinámicas, se va viendo en el día a día y cada industria depende de dónde se desarrolla, afecta de manera distinta.
Esta situación de fase uno además implica una caída en lo que es el mercado interno. Si bien el grueso de la producción industrial tiene otros mercados, enfrenta otros problemas básicamente logísticos por los inconvenientes que significa transitar o ingresar a la provincia, pero además transitar otras provincias, porque en general en un país que es federal, cada provincia tiene procedimientos independientes para su ingreso, eso ocasiona serios trastornos. En el caso particular de Jujuy, al estar en un extremo, es más difícil. Hay empresas que están teniendo problemas para conseguir transportes, porque tienen que ir sorteando temas de una manera que no se puede prever, porque cada vez que entran a una provincia van cambiando las condiciones.
En algunas les exigen que tengan el test PCR pero que tengan una validez determinada, y no es tan fácil acceder a los test PCR. En fin, hay una serie de factores que están impactando y se van sorteando en la medida que van apareciendo, pero hay una infinidad de inconvenientes que estamos enfrentando. Y donde estamos es más difícil en el tema logístico, no sólo hay que atender a las especificaciones que se plantean en la provincia, sino que además, como tienen que ir cruzando otros estados encuentran en cada una inconvenientes distintos. También hay otra serie de factores como el tema de poder transitar o conseguir elementos que son necesarios, como repuestos urgentes o servicios técnicos por el que tienen que venir profesionales de otros lados, que complican la normal operación.
-¿En qué porcentaje están afrontando todo esto?
-Es muy difícil establecer el porcentaje de operación, porque las principales empresas de la provincia están vinculadas a producciones esenciales, como agroindustrial o proveedores de las producciones esenciales, y hay otras que no pueden trabajar. Por ejemplo, las industrias relacionadas a la metalurgia depende en qué fase se esté, si pueden trabajar o no. La siderurgia de la provincia tiene problemas serios y prácticamente no ha estado operativo a lo largo de esta cuarentena, salvo algunos períodos muy cortitos. Hay otras que, como los ingenios, en la medida de lo posible con producción a full y otros con problemas, por lo que están teniendo que reducir la producción. Así que es muy difícil medirlo en conjunto, pero yo diría que estamos en un régimen de producción que anda en el orden del 60 o 70% en capacidad, sobre todo considerando que algunos están trabajando a capacidad full y hay otras que están en cero.
-¿De qué otra manera los afecta volver a la fase uno?
-En general a las empresas industriales que tienen habilitación por ser de productos esenciales, en los cambios de fase no las afectan tanto, pero sí estamos ante el inconveniente que afronta la provincia en general. Es decir, una situación donde la razón de volver a la fase uno es por la velocidad con que se está expandiendo el virus, y de esta manera empieza a afectar a uno de los recursos que es fundamental para cualquier actividad, que es el recurso humano. Entonces, independientemente de que haya contagios o no, hay muchos que van saliendo de la disponibilidad laboral por contactos estrechos, otros por haber sido contagiados, de manera que hay aspectos que se van dinamizando, es muy reciente porque en la provincia se ha disparado hace relativamente poco, entonces cada una va entrando en estados especiales y buscando como ir resolviendo. Hay algunas actividades que es imposible reducir la cantidad de personas que tienen trabajando.
Bueno, hemos visto ahora que hay una presentación contra una empresa en el sector minero, y una de las razones es que no ha podido reducir su plantel al 50%, pero hay actividades que es imposible que se puedan desarrollar con menos de un 50% del plantel operativo. Entonces todo se va adecuando. También es cierto que hay algunas flexibilizaciones y no nos afecta, pero en la medida que se va reduciendo el plantel se va haciendo más difícil mantener el sistema operativo. Hay algunas empresas que están obligadas a producir el 100% según lo dicen los decretos, que tienen que ver con la producción de alimentos, y a veces se les hace imposible atender ese régimen de producción porque o tienen problemas de abastecimiento o de personal.
En fin, las empresas se van debatiendo, van aprendiendo, no se puede prever. Hay cosas que de un momento para otro ocurren y hay que ir ajustando y adaptando las condiciones a lo óptimo para los recursos que se tienen. Hay aspectos que son muy delicados en esta situación, y son muy dinámicos. Afortunadamente ese dinamismo no es para favorecer las actividades sino normalmente ese dinamismo viene poniéndole distintas restricciones.
-¿Y qué perspectivas de recuperación tienen?
-Bueno, es imposible hacer cualquier tipo de previsión. Las cosas se van adaptando en su momento, uno puede establecer una situación hipotética de que la situación ya se calmó, con lo cual se supone que en este ritmo uno ya sabe y se adaptó un poquitito a este movimiento. Puede ser que siga creciendo la situación y que las restricciones sean mayores. En fin, no se puede hablar de perspectivas. Me parece que eso es lo más grave y lo que más afecta a cualquier industria en particular, y procesos productivos.
Es la imposibilidad de ver qué es lo que va a pasar o qué es lo que viene. No estamos hablando de semanas o meses, estamos hablando a veces de horas, entonces esa imprevisibilidad hace muy complicado y se tenga que hacer un esfuerzo enorme para mantener la operación. Por otro lado, cuando uno está en actividad también tiene obligaciones que siguen siendo las mismas, y hay algún tipo de asistencia a nivel nacional que a algunas les llega y a otras no, pero las obligaciones siguen siendo las mismas desde el punto de vista impositivo, obligaciones con el plantel esté trabajando o no. Uno tiene que sostener los salarios, y el plantel tenga ingresos y se pueda mantener.