Un hombre con residencia en la calle Álvarez Prado al 600 y conocido por el apelativo de "Pepe", que habría estado detenido días atrás por agredir y amenazar a una mujer y tendría una orden de restricción, al quedar en libertad se presentó en la puerta de la casa de la víctima y nuevamente la amenazó de muerte, según se denunció.
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Un hombre con residencia en la calle Álvarez Prado al 600 y conocido por el apelativo de "Pepe", que habría estado detenido días atrás por agredir y amenazar a una mujer y tendría una orden de restricción, al quedar en libertad se presentó en la puerta de la casa de la víctima y nuevamente la amenazó de muerte, según se denunció.
La presentación la realizaron unos diez vecinos que apoyan a una mujer de 40 años, que aproximadamente el 25 de julio fue atacada por esta persona luego de haber amenazado a una vecina de 70 años que vive en el mismo edificio.
De acuerdo al relato de la denunciante ese día la vecina del piso superior de manera desesperada solicitaba auxilio desde el medio de la calle, en virtud de que el mencionado Pepe quería sacarle el monedero, ya que la mujer regresaba de haber realizado unas compras en un comercio del lugar.
La víctima afirmó que está atravesando una difícil situación como consecuencia de ser comerciante y no poder abrir su negocio, por lo que junto a su esposo sufre de un estrés importante a lo que se le sumó la presencia de este individuo que es conocido como un malviviente en toda la zona, incluido los efectivos policiales de la Seccional 4º, quienes en forma continua están recibiendo denuncias en contra de esta persona.
De acuerdo a la versión de la mujer, todo se suscitó como consecuencia de que el día mencionado su esposo salió en auxilio de la vecina, y a partir de allí viven en zozobra, ya que de manera permanente sufren amenazas y agresiones.
La mujer, en compañía de los vecinos que momentáneamente no se atreven a dar sus nombres, indicó que se presentarán ante el fiscal especializado en Violencia Familiar y de Género ya que la situación es insostenible.
Destacó la actuación de la policía, en especial de los uniformados de la seccional del barrio, quienes indicaron que esta persona quedó en libertad por decisión del juez de Control Jorge Zurueta, a quien las mujeres le preguntan: "si nos pasa algo, ¿quién vendrá a defendernos?".
Todos los presentes manifestaron vivir con miedo sin saber en qué momento se hará presente en el lugar. Aseguraron que pareciera ser que son las víctimas quienes tienen una restricción perimetral, porque mientras permanecen en sus viviendas el hombre se pasea por el barrio amenazando e insultando.