-¿Qué análisis hace del anuncio de reestructuración de la deuda anunciado por el Gobierno nacional?
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-¿Qué análisis hace del anuncio de reestructuración de la deuda anunciado por el Gobierno nacional?
-Es bueno y resalto que el acuerdo no haya dejado holdouts, o sea que no hayan quedado afuera de este acuerdo ningún acreedor. Hay que recordar lo que pasó con el acuerdo del año 2005, que después teníamos al juez Thomas Griesa embargándonos la Fragata "Libertad". Es bueno que después de los defaults del 2005 y 2010 se hayan generado estas cláusulas de acción selectiva, que de alguna manera protege al deudor para que un pequeño grupo de acreedores no pueda bloquear el avance del acuerdo. Ahora se logró una adhesión muy alta y es muy bueno para el país, desde el lado de las cláusulas y holdouts, ahora, en materia de inversión hay que tener cuidado.
Del lado del inversor nos tenemos que parar todos, porque sos vos, soy yo, son nuestras compañías de seguro y los fondos de la Anses, somos nosotros desde otro lugar. Pero esto está dinamitando lo que es nuestro sistema financiero y la solvencia del sistema de jubilación y el sistema asegurador.
Es un riesgo del que no se habla porque hay un tema más importante como la pandemia, pero esto, hacia el futuro significa que ¿quién va a confiar en comprar deuda argentina?, ¿quién va a querer prestarle plata al Estado si cada cinco años Argentina entra nuevamente en default?. Hoy nuevamente propone una quita para patear la pelota hacia adelante, lo que está haciendo es darle una quita del valor actual.
Los países y las personas que incumplen los compromisos hacen que nadie tenga confianza y entonces vas a ver al ahorrista argentino o empresario comprando y fugando dólares. Los que sacan plata del sistema financiero, que era prestable, que era parte del ahorro de la economía argentina para prestar a empresas, ahora están afuera y no pueden financiar el sistema productivo nacional.
-¿Hay laguna forma de frenar la fuga de divisas?
-Sí, hay una forma y es generar confianza. Pasa en todos lados, cuando alguien destruye tu confianza es muy difícil recuperarla, acá pasa lo mismo.
La confianza no se recupera con una ley. Impedir la fuga de capitales, de prepo, como anunció el Banco Central, que cerró un convenio con el Ministerio de Seguridad para buscar a los "coleros virtuales" o a la gente que tiene dólar "blue", como si fueran narcotraficantes, es complejo.
Se elimina mostrando confianza y trasparencia.
-Es difícil en este contexto de crisis generar confianza y la pandemia agravó un poco la situación, ¿Qué análisis hace sobre eso?
-Yo lo haría contrafáctico. Un país como Uruguay, que no tuvo una cuarentena estricta y tampoco una catástrofe sanitaria, sí genera confianza. Brasil, donde está creciendo el desempleo y que está complicado en materia de salud, genera confianza. Entonces la confianza no tiene que ver con la pandemia, hay que hacer lo que se dice, tiene que ver con decir una cosa y no hacer otra.
-¿Qué impacto tiene en el bolsillo de los argentinos la firma del acuerdo de restructuración de la deuda?
-Ninguno, esto no cambia en nada la cotidianidad. Sí iba a cambiar si no se cerraba el acuerdo, porque si no se arreglaba con los acreedores, el país iba a entrar en un espiral descendente muy complicado e íbamos a tener que ir al fondo del tacho a buscar a los argentinos.
Te explico por qué pasa eso. Imagínate una empresa que tiene deuda emitida en la bolsa y tiene préstamos internacionales para poder fondear nuevos desarrollos. Imaginate que se le vence una deuda dentro de seis meses, pero como el país está defaulteado, a la empresa no le permiten refinanciar la deuda, entonces tiene que salir a canjear dólares y si no tiene se complica porque va a tener que vender algún activo, despedir gente, o frenar proyectos que sigue "fondeando".
El contagio de un país en default hacia las empresas que tienen deuda es enorme. En Argentina la deuda privada es de 16 mil millones de dólares y como el país no tiene dólares, las empresas no pueden pagar y tampoco refinanciar. Esta situación lleva muchas veces a las empresas a la quiebra, entonces ya no pueden pagar a sus proveedores y a su vez sus proveedores no pueden seguir pagando más cosas, entonces esto se convierte en un "Coronavirus financiero". Es muy difícil vivir en esta economía, son equilibrios muy finos y Argentina esta desequilibrada y totalmente rota
-¿Cómo se sale de esta situación?
-Con un montón de cosas que van en la dirección opuesta de la que estamos llevando. La salida no es subir impuestos, es bajarlos.
Si una empresa contrata 50 personas más para trabajar y por esos empleados no paga carga sociales, la empresa va a analizar contratar gente para generar un producto nuevo y a su vez exportarlo, pero si me subís la carga social es imposible, tiene que haber menos carga social por contratar gente, ese es el camino del mundo, el mundo está bajando impuestos.
-¿No es lo que pasó en el gobierno de Mauricio Macri? Sin embargo no tuvo buenos resultados...
-Porque son equilibrios y los equilibrios también dependen de lo externo. Si al gobierno de Macri lo aggiornabas con tasa de interés 0 y con la soja subiendo su precio, hoy lo que fue una elección de medio termino se hubiese transformado en una elección definitiva, pero bueno, no lo supieron ver.