La llegada de los Reyes Magos siempre es motivo de gran algarabía para los niños, pero los pequeños que residen los lejanos parajes de la selva de altura, guardaban el sueño de poder verlos alguna vez. Y el día tan esperado llegó el sábado, merced a la iniciativa de los efectivos de la Seccional 13º de Valle Grande que, uniendo manos y voluntades, cumplieron el tan caro anhelo de la niñez jujeña.
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La llegada de los Reyes Magos siempre es motivo de gran algarabía para los niños, pero los pequeños que residen los lejanos parajes de la selva de altura, guardaban el sueño de poder verlos alguna vez. Y el día tan esperado llegó el sábado, merced a la iniciativa de los efectivos de la Seccional 13º de Valle Grande que, uniendo manos y voluntades, cumplieron el tan caro anhelo de la niñez jujeña.
Se despojaron de sus uniformes azules para vestirse de Reyes Magos, aquellos que, como dice la tradición de la fe, llegaron desde el lejano Oriente para rendir tributo al Niño Jesús. Y así, este grupo de policías que presta servicio en el corazón mismo de las Yungas jujeñas, allí donde las nubes acarician cada día el paisaje que se reviste de sol y de esmeraldas planicies montañosas, recorrió cada rincón de este paraíso, para llevar sus ofrendas a los niños que, en el silencio de los cerros, transitan cada uno de sus días.
En el mapa de esta feliz travesía, fueron señaladas las postas en las que los Reyes Magos de Valle Grande, ofrendaron los presentes para los niños en San Francisco, Pampichuela, el distrito cabecera, Valle Colorado, Santa Ana y los puestos con pircas que fueron encontrando a lo largo del camino. Una experiencia inédita que tocó el corazón de todos, chicos y grandes.
El jefe de la Seccional 13º de Valle Grande, oficial principal Gonzalo Sánchez Olivera, expresó su satisfacción por haber hecho realidad esta inédita experiencia, por cuanto, según el relato de la gente del lugar, nunca antes llegaron los Reyes Magos porque, según pensaban, era tan largo y escarpado el recorrido por todo el departamento. "Queríamos ser partícipes de esta festividad, quisimos estar cerca de los niños y afianzar los lazos con la comunidad. Esta iniciativa surgió a fin de año, cuando comenzamos a dialogar con los efectivos de la seccional. Todos compartimos la idea, hicimos un bolsillo, cada uno aportó dinero para comprar lo necesario para la visita que haríamos a los niños. También contamos con la colaboración de la Dirección de Bienestar Policial, la parroquia de Valle Grande, que puso a disposición la indumentaria para los queridos personajes, de las empresas de transporte 23 de Agosto y 24 de Septiembre, de las distintas comisiones municipales, de Lalo Cruz y su esposa Eva Guitian. Todo fue posible, gracias a la buena voluntad de todos", indicó.
El jefe sostuvo que la jornada se inició a las 9 en la localidad de San Francisco, tres efectivos luciendo el traje de los Reyes Magos, realizaron el recorrido de dos horas, haciendo entrega de las bolsitas con presentes para los niños, precedidos por el móvil que fue ornamentado especialmente para la ocasión. Más tarde, los Reyes llegaron hasta la localidad de Pampichuela, donde 35 niños se reunieron en la plaza para compartir el grato momento. "Luego nos fuimos al distrito cabecera Valle Grande, y como estaba lloviendo, unos 150 niños se reunieron en el tinglado municipal para disfrutar la llegada de los Reyes. A las 17, arribamos a Valle Colorado, donde compartieron la alegría con 30 niños, para partir con destino a Santa Ana, donde 130 niños vivieron una inolvidable experiencia junto a los Reyes", sostuvo el funcionario policial. Tras apuntar que esta experiencia fue muy satisfactoria porque refuerza los lazos entre la institución y la comunidad.