Hondo pesar provocó el fallecimiento del empresario jujeño Albino Pederiva, a los 75 años de edad. Su muerte ocurrió ayer a la mañana en la ciudad de Palpalá, y fue inhumado en horas de la tarde en el cementerio El Salvador de la capital jujeña.
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Hondo pesar provocó el fallecimiento del empresario jujeño Albino Pederiva, a los 75 años de edad. Su muerte ocurrió ayer a la mañana en la ciudad de Palpalá, y fue inhumado en horas de la tarde en el cementerio El Salvador de la capital jujeña.
"Quincho" Pederiva, como se lo conocía cariñosamente, fue un reconocido empresario del transporte de carga, por cuya organización venía trabajando desde hace más de tres décadas. El sector sentía tanta identificación con el presidente de la empresa "El Piave", que este ocupó durante 16 años la titularidad de la Cámara Jujeña de Transporte de Carga (Cajutac).
Además de ocuparse al transporte de cargas, Pederiva se destacó por reactivar el Hotel Termas de Reyes, donde realizó una importante inversión. Según algunas publicaciones, lo hizo como una suerte de homenaje al pasado familiar: su padre había sido chofer del entonces casino-hotel, donde alguna vez se alojó Eva Perón. Quizás por eso, durante los primeros años, Pederiva se divertía esperando en el aeropuerto a los huéspedes haciéndose pasar por conductor del colectivo que los iba a trasladar al hotel-spa.
Siempre apostando por el crecimiento de Jujuy y generando puestos laborales, el empresario también incursionó en los negocios inmobiliarios y de las estaciones de servicio de gas natural comprimido en esta capital y en Palpalá.
Quienes lo conocieron de cerca, coincidieron que además de destacarse por su empuje e iniciativa empresarial, también lo hacía por su bondad y hombría de bien, razones por las cuales era muy apreciado