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¿Todo está como era entonces?

Lunes, 18 de enero de 2021 01:00

Cuando cayó la última hoja del almanaque 2020, todos suspiramos detrás de un deseo sencillo y necesario: ojalá que todo lo pasado nos haya servido como aprendizaje y comencemos a transitar caminos diferentes. Van dieciocho días del 2021 y los botones de muestra dicen lo contrario. Pareciera que seguimos anclados en los mismos temas, y abordándolos con los mismos criterios y actitudes que nos trajeron hasta donde estamos: giramos en círculos buscando mordernos la cola.

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Cuando cayó la última hoja del almanaque 2020, todos suspiramos detrás de un deseo sencillo y necesario: ojalá que todo lo pasado nos haya servido como aprendizaje y comencemos a transitar caminos diferentes. Van dieciocho días del 2021 y los botones de muestra dicen lo contrario. Pareciera que seguimos anclados en los mismos temas, y abordándolos con los mismos criterios y actitudes que nos trajeron hasta donde estamos: giramos en círculos buscando mordernos la cola.

El Gobierno nacional persiste en su idea de rechazar tener un plan, o una hoja de ruta para mostrarnos y mostrarle al mundo cuál es el rumbo y cuál el destino buscado. El año pasado transcurrió con ese estilo, y aquí estamos. La inflación de diciembre llegó al 4% y en Jujuy -por primera vez pareció arrimarse a la sensación que genera salir de compras- superó el 5,7%, la más alta del año. Cada fin de semana nos castigan con otro "naftazo" que en Jujuy, siempre es un poquito "más naftazo" que en el resto del país, y parece que eso se hará costumbre en los meses que vienen hasta equiparar el litro de combustible al valor del dólar (también mentiroso e inestable). La escalada de precios no tiene freno, y hasta los créditos UVA subirían el 51% en febrero, con lo que es imaginable el escándalo que se viene. Los ejemplos muestran que todo parece seguir igual que antes.

Se promulgó la Ley de la interrupción legal del embarazo, pero se la presentó como una "victoria verde", y un triunfo del feminismo, en vez de elevarlo a la altura de la consagración de un nuevo derecho, en una sociedad que busca madurar. Para completar, hasta se dijo con la grandilocuencia propia de los relatos vacíos, que con ello se terminaba nada menos que con el patriarcado en Argentina. La manía de las exageraciones resta valor a los logros importantes, atribuyéndoles características de triunfo electoral. Grotesco. Todo como era antes. Como siempre.

Otro de los temas fundamentales para la sociedad, también fue zarandeado en términos de campaña: las clases. El Presidente de la Nación resolvió correctamente impulsar con todas sus energías el comienzo de las clases presenciales a más tardar en marzo. Mientras tanto el candidato perfilado para el futuro y jefe de Gobierno de la Caba Horacio Rodríguez Larreta las quiere a fines de febrero. Hasta el expresidente Mauricio Macri volvió a gritar desde su exilio interno: "Abran las escuelas". Lo curioso es que -aparentemente- estando de acuerdo y pensando en niños y jóvenes, al mismo tiempo desataron una ola de ataques de todos contra todos, pretendiendo desvalorizarse unos a otros. Como antes. Como siempre.

En ese camino, el ministro Nicolás Trotta visitó Jujuy donde reafirmó la posición presidencial y debió reconocer que más allá de la "campaña nacional" de FdT vs. JxC, Gerardo Morales había sido el primero que hace más de un mes había puesto las fechas del 17 y el 22 de febrero para arrancar con las clases. Aún en medio de semejante intríngulis, lo bueno es que todos tratarán de levantar la hipoteca del año perdido en las aulas. Sólo habrá que esperar que se logre vacunar a los docentes para que inicien el año, cuidados y cuidando. Hoy parece difícil si se tiene en cuenta que de los 10 millones de vacunados prometidos para diciembre, apenas se superaron los doscientos mil una la primera dosis de la Sputnik V rusa hasta ahora.

Pero el ministro Trotta, colateralmente a su misión de reconocimiento oficial, desarrolló tareas políticas. Corroboró y aplaudió el desarrollo sostenido de la Unju y recogió la prudencia del rector Rodolfo Tecchi (cada vez mejor posicionado dentro del poderoso consejo de rectores de universidades nacionales) con relación a las clases presenciales; también escuchó las quejas de los gremios docentes locales enfrentados a la sordera del Ministerio provincial. Luego coincidió con el presidente del Partido Justicialista, Rubén Armando Rivarola, en que este año será clave para mostrar la capacidad de unidad del peronismo, frente a la posibilidad cierta de ganar las elecciones provinciales. Pero también calibró la permanente vocación rupturista de algunos peronistas, siempre más dispuestos a potenciar la disgregación que a amalgamar acuerdos. Finalmente, y cumpliendo el ritual de las visitas nacionales, el ministro visitó a la jefa tupaquera Milagro Amalia Ángela Sala Leytón de Noro, en vísperas de la jornada nacional por su liberación. De la casona del barrio Cuyaya, Trotta se llevó otro fuerte reproche para el Presidente por la demora en liberar a los presos y procesados del kirchnerismo. Todo como era entonces, desde que la dirigente social cayó presa hace cinco años.

Ese fue quizá el tema central. La llamada marcha nacional por la liberación de la señora Sala se limitó a una fuerte movilización frente al edificio sede de la Suprema Corte de Justicia en Buenos Aires. Bajo el lema (acuñado desde La Cámpora) "Que la Corte la corte", miles de militantes se manifestaron representando al Movimiento Evita (que tiene altos funcionarios en el Gobierno), Militancia Popular, Frente Aníbal Verón, Patria Justa y Frente Milagro Sala, que fue el que organizó la movilización. A pesar de innumerables adhesiones, no estuvieron presentes funcionarios nacionales. La nota saliente fue cumplir con el eslogan del ataque "La Corte basurero de la democracia" que terminó con toneladas de basura arrojadas en las escalinatas de la SCJ. En Jujuy la multitudinaria marcha incluyó a la Tupac, CTA, MTL, ATE, MTE, Unidos y Organizados y la Red de Organizaciones Sociales. Fue una marcha numerosa, quizá no como eran las de antes, pero igualmente mostraron una capacidad de movilización que quizás ningún partido político del oficialismo o la oposición puedan convocar hoy en Jujuy. Y eso es para pensarlo. También los sistemas de seguridad deberán repensar sus controles internos, ya que el dispositivo de prevención y seguridad "Operativo Aniversario", con detalles de personal, mapas, puestos de control, estuvo en poder de los organizadores de la marcha antes que la propia Policía lo conociera a fondo, y lo entregaron a los medios. Pero la ruidosa marcha culminó pacíficamente y marcó tres objetivos: victimizar a MS y atacar a Gerardo Morales, como "creador de un laboratorio del lawfare del liberalismo en Jujuy" y al propio presidente Fernández, para que su gobierno "comience a ver cómo hace acuerdo para liberarnos" Milagro dixit. El lema del GM es obvio: "Retroceder nunca, rendirse jamás". El juez Pullen Llermanos casi sobre el día de la marcha apuntaló ese lema al procesar a Sala, a su abogado Alberto Bellido y al empleado judicial Marcos Romero por sustracción y destrucción de un expediente del resonante caso de la "Balacera de Azopardo". Para AAF es más complicado, pues ya dijo que indulto o amnistía, no figuran en sus planes, porque además, "son una rémora monárquica que pervive en la Constitución Nacional". El indulto supone el perdón de la pena, mientras que la amnistía supone el perdón del delito. Y ambas decisiones, de llegarse a ellas, corresponden hoy al Congreso Nacional. Algo que según las circunstancias y el momento histórico, puede no ser tan lejano.

Mientras tanto, Jujuy perdió definitivamente a la Minera Aguilar detrás de un acuerdo de dobles indemnizaciones, que parece ser lo mejor y lo único posible. Aunque se buscan interesados en seguir la explotación, algo que la Provincia jamás asumirá, aunque la Izquierda local insista en expropiar y estatizar. Y el Covid, como se sabía, está de vuelta potenciado e impiadoso. La dirigencia gremial luchará por paritarias y la dirigencia política se sumerge en las próximas elecciones. Parece que este año, todo está como era entonces...