Parte de casualidad pero también de providencia, la Fundación Deporte y Salud Jujuy complementó su tarea del 2020 con el respaldo a Mujeres Derribando Barreras (Mudeba), en un proyecto de contención en la discapacidad. El presidente de la entidad, Matías Gansslen, es kinesiólogo con un posgrado en medicina del deporte, fue director y coordinador de rehabilitación del hospital Español de Córdoba, además de haber trabajado en el sanatorio Allende, entre otros servicios mediterráneos, en áreas dirigenciales en traumatología y neurorehabilitación.
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Parte de casualidad pero también de providencia, la Fundación Deporte y Salud Jujuy complementó su tarea del 2020 con el respaldo a Mujeres Derribando Barreras (Mudeba), en un proyecto de contención en la discapacidad. El presidente de la entidad, Matías Gansslen, es kinesiólogo con un posgrado en medicina del deporte, fue director y coordinador de rehabilitación del hospital Español de Córdoba, además de haber trabajado en el sanatorio Allende, entre otros servicios mediterráneos, en áreas dirigenciales en traumatología y neurorehabilitación.
Según comentó a El Tribuno de Jujuy “en este momento la Fundación Deporte y Salud Jujuy está básicamente parada porque todavía no conseguimos los fondos necesarios para darle el impulso que tiene como objetivo generar que las personas que hacen deporte en Jujuy no tengan que ir a buscar el mejor centro de deporte en Buenos Aires o los mejores profesores o médicos; sino que puedan entrenarse, curarse o mejorar las técnicas aquí en Jujuy”. Justamente las áreas a las que se orienta son Educación -en todos los niveles-, Deporte y Salud. “Incluso apunta a ser formadora de profesionales, la idea más adelante es trabajar con la Unju para personas con y sin discapacidad. De ahí es de donde se articula con Mudeba”, resaltó Matías. El vínculo fundamental llegó porque el grupo necesitaba personería jurídica para poder aspirar al Premio Avon. “Nosotros le dimos una mano, no es el objeto principal de la fundación pero todo lo que sea para hacer cosas por la gente siempre y cuando esté en nuestras posibilidades va a ser”, expresó el titular de la institución.
Y el nexo no pudo ser más exitoso porque el proyecto “Mujeres que transforman la vida de otras” ganó y pudo comenzar a implementarse con capacitaciones vía Zoom desde el 14 de diciembre. Matías anticipó que “más adelante queremos intentar trabajar con la gente que tiene discapacidades visuales y auditivas dentro del deporte, así que no está tan lejos de lo que nosotros buscamos”.
Testimonió que “cuando era chico jugaba al rugby y nos faltaban un montón de cosas, técnicas, tácticas, profesores de Educación Física, que cuando fui a Córdoba noté una diferencia. Cuando estuve en el hospital Español se formó un equipo y nos iban a crear un centro de alto rendimiento, los capitales eran extranjeros, pero vimos truncada la posibilidad”. Ahora que reside en Jujuy persiste la idea de mejorar la calidad de los deportistas locales.
Anfitriones de Mudeba
El 30 de diciembre la Fundación fue la anfitriona de una reunión para cerrar el año por parte de Mudeba y las participantes de las charlas. Alicia Lucero, referente de Mudeba y madre del profesional, relató que “cada una se fue presentando, dijo qué tipo de discapacidad tenía y cómo era su familia. Todas dijeron que realmente este proyecto les había abierto las puertas a incluirse en las capacitaciones y poder mejorar su calidad de vida. Fue un momento muy lindo en el que se presentaron los directivos de la Fundación que son trabajadores de la salud, Matías y Ana Vigliocco, licenciada en Fonoaudiología”. En tiempos de pandemia fue la primera vez que pudieron juntarse.
Cajas navideñas
La actividad del 30 de diciembre pasado permitió la entrega también de 15 cajas navideñas que fueron puestas a disposición por la Dirección de Inclusión que depende del Ministerio de Desarrollo Humano de la Provincia. Según destacó Alicia Lucero, de Mudeba, se distribuyeron entre mujeres con discapacidad de capital y también del interior, considerando su situación económica. Puesto que hubo participantes llegadas de Pampa Blanca, San Pedro de Jujuy y Humahuaca.
El grupo fue muy variado dado que había mujeres sordas -para quienes contaron con una intérprete de lengua de señas-, ciegas y una persona con discapacidad motriz. En la reunión además de presentarse y conocerse tuvieron la oportunidad de compartir sus deseos para el 2021 y depositarlos en una caja como parte de las actividades de cierre de año del proyecto concretado a partir del premio nacional Avon que ganaron.