TILCARA (Corresponsal). Con la celebración de una misa en el barrio San Francisco, los tilcareños vivenciaron ayer la octava de la fiesta patronal en honor a San Francisco de Asís. Los cultos centrales se habían realizado el pasado lunes junto a las honras a Nuestra Señora del Rosario, patrona de la parroquia del pueblo.
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TILCARA (Corresponsal). Con la celebración de una misa en el barrio San Francisco, los tilcareños vivenciaron ayer la octava de la fiesta patronal en honor a San Francisco de Asís. Los cultos centrales se habían realizado el pasado lunes junto a las honras a Nuestra Señora del Rosario, patrona de la parroquia del pueblo.
Las autoridades eclesiásticas habían decidido prolongar las alabanzas al santo patrono en la jornada de ayer con el objetivo de reducir el aglomeramiento de los feligreses en la festividad central dedicada al protector. A pesar de las precauciones tomadas, el lunes los tilcareños masivamente se concentraron en la iglesia, como también las bandas de sikuris, para agradecer la protección divina de San Francisco y Nuestra Señora del Rosario.
Una vez más, la comunidad de la villa quebradeña manifestó su devoción a los santos, en quienes depositan su fe y confianza para que cada día sea, sea mejor al anterior, y particularmente en el contexto de la pandemia que aún mantiene en guardia a los vecinos.
En ese sector barrial donde viven numerosas familias, al párroco Miguel Squicciarini junto al vicario parroquial Daniel Martínez celebraron la eucaristía en el marco del cierre del Año mariano.
Después de un año en que no pudieron agradecer a sus patronos, como tampoco a la Virgen de Copacabana del Abra de Punta Corral, los fieles recibieron la bendición.
El lunes 4, aproximadamente veinte bandas de sikuris estuvieron al lado de los patronos que multiplicándolas por una cantidad media de músicos populares que las integran hacen aproximadamente unos setecientos instrumentistas, entre varones y mujeres, que intervinieron en la celebración patronal.
Desde su misión pastoral, el padre Miguel Squicciarini observó también que las condiciones sanitarias mejoran periódicamente y de a poco, los vecinos están retornando a la normalidad. "Seguramente, pero una normalidad que nos preguntamos cómo será porque el virus nos hizo tomar conciencia que muchas cosas que teníamos seguras, no era tan así. Uno agradece a Dios que estemos tranquilos y les pedimos que así continuemos. No es que sea pesimista, pero se habla de nuevas cepas, de una tercera ola, entonces más les pedimos que sigamos como estamos ahora", señaló.
Después del festejo en Tilcara, el jueves el párroco junto al vicario parroquial, al diácono Matías Romero y a un grupo de servidores de la parroquia, fue al santuario de Río Blanco para celebrar el día de la patrona de los jujeños. Pero al atardecer ya estuvo de regreso, para oficiar la misa de las 19.30 en honor a la patrona.
Hasta fin de mes, sus días serán de muchas expectativas. Sucede que el 31 vendrá a Jujuy el nuncio apostólico -representante del papa Francisco en Argentina- y junto al obispo de Jujuy, Daniel Fernández, cerrará el Año Mariano, también para los 400 años de la Virgen del Valle y los 100 años de la coronación de la Virgen de Río Blanco.
Estas celebraciones de la iglesia católica debieron haberse efectuado el año pasado, pero por la crisis sanitaria generada por el coronavirus, se suspendieron para este 2021. Hasta que llegue esa fecha, continuará con su misión pastoral en esta parte de la Quebrada, visitando a las comunidades y recibiendo a los fieles todas las tardes en que celebra la misa en la iglesia Nuestra Señora del Rosario.