TILCARA (Corresponsal). Restaurantes colmados de comensales, calles muy transitadas por vehículos y peatones, la plaza llena de familias y en el acceso a la ciudad de Tilcara por momentos se producen estancamientos de automóviles y colectivos en los cuales llegan los turistas a la villa que en la Quebrada de Humahuaca es uno de los destinos favoritos. La masiva llegada de visitantes genera la reactivación económica de la comuna que prácticamente vive de la actividad turística, la cual se reactiva, por lo menos aquí, de manera rápida después de haber afrontado una grave crisis, que obligó a muchos prestadores de servicios, adecuarse a la situación y cambiar de rubros para poder subsistir.
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TILCARA (Corresponsal). Restaurantes colmados de comensales, calles muy transitadas por vehículos y peatones, la plaza llena de familias y en el acceso a la ciudad de Tilcara por momentos se producen estancamientos de automóviles y colectivos en los cuales llegan los turistas a la villa que en la Quebrada de Humahuaca es uno de los destinos favoritos. La masiva llegada de visitantes genera la reactivación económica de la comuna que prácticamente vive de la actividad turística, la cual se reactiva, por lo menos aquí, de manera rápida después de haber afrontado una grave crisis, que obligó a muchos prestadores de servicios, adecuarse a la situación y cambiar de rubros para poder subsistir.
Matías Pémberton, de la Asociación de Turismo de Quebrada y Puna, señaló ayer a nuestro diario que este fin de semana la ocupación llegará "al 90%" en Tilcara y Purmamarca. "La gastronomía está trabajando muy bien" y se espera la llegada de más visitantes. Consideró además que "todavía nadie llegó a recuperar el nivel de precios previo a la pandemia".
"Se fue ajustando de a poco en función a lo que se mantuvo abierta la actividad, seguramente todos estamos con precios atrasados. Hay niveles de servicios para todos los gustos y bolsillos, tanto en gastronomía como en hotelería, eso hace que haya una diversidad de ofertas de servicios que cubre la demanda de todos los visitantes", agregó.
Lo cierto es que el sector turístico de Tilcara coincide en que este fin de semana extra largo será altamente satisfactorio, y ya espera el fin de año y la temporada estival con más y mejores expectativas debido al alto porcentaje de reservas y las permanentes consultas que reciben desde varios puntos del país.
Administradores de establecimientos hoteleros, propietarios de centros gastronómicos, personal de la Oficina de Información Turística del municipio y hasta vendedores en la plaza central son muy optimistas para los próximos meses y especialmente para este fin de semana extra largo.
Cada prestador se organizó de la mejor manera para recibir a los turistas, que el jueves al mediodía comenzaron a llegar a la villa turística, después de haber recorrido por la ruta nacional 9 prácticamente la mitad de la región quebradeña por excelencia paisajística, para sorprenderse con lo pintoresco del pueblo tilcareño, que en los últimos tiempos se posicionó entre los destinos más visitados del norte argentino.
Por estos días, además de ofrecer su atractivo natural, la ciudad tiene otras propuestas que seducen a los visitantes, entre ellas la exquisita gastronomía, las peñas folclóricas nocturnas, actividades culturales en los museos, encuentro de amautas y la medicina ancestral, prueba de resistencia atravesando los cerros, degustaciones de vinos de altura y también, la tranquilidad que encuentra para estar placenteramente a gusto en estas jornadas de tiempo libre. Pocos son los establecimientos hoteleros que se ubican en el casco céntrico de la ciudad, el lugar les pertenece a los restaurantes y las peñas, formando un circuito gastronómico y nocturno que no debe dejarse de vivenciar.
En la periferia, se ubican hostales con diseños perfectos para disfrutar la estadía, y desde donde, en varios casos, se obtienen vistas hermosas del pueblo y de los cerros. Mucho más bellas son aquellas desde los establecimientos ubicados en las elevaciones al pie del río Grande o por la zona de Villa Florida.
Una jornada típica en Tilcara se inicia a la mañana con una visita al Mercado municipal, donde se encuentran verduras, ropa, especies y demás productos. A medida que pasan las horas, bueno es degustar ahí mismo una empanada o un tamal, mientras en las calles los tilcareños cumplen con su rutina.
Pasado el mediodía, elegir entre las muchas opciones un restaurante para saciar el paladar, y es por esos momentos cuando se reduce la actividad. Las calles se despejan y comienza a correr el viento típico que recorre gran parte de la Quebrada.
Cerca de las 17 se observa a las bolleras cerca de la plaza ofrecer sus ricos bollos, mientras que por calle Belgrano continúan llegando más visitantes en busca de experiencias inolvidables en esta parte de Jujuy.
En una de las esquinas de la plazoleta Antonino Peloc se encuentra el restaurante "El nuevo progreso", atendido por María Florencia Rodríguez, quien en agosto ganó la tercera edición del Prix de Baron B - Édition Cuisine. "Estamos trabajando muy bien desde antes, está lleno Tilcara y eso es bárbaro", comentó.
En la esquina donde está la vieja capilla y donde se velaron los restos del general Lavalle, hay una peña tradicional del pueblo que todas las noches se llena de gente. Ayelén Colazo comentó que tenían "muchas expectativas. Se está viendo mucha gente en la calle, así que estará muy bueno".
Artesanías y gastronomía
La plaza central es un lugar obligado de cada visitante. Allí, las vecinas venden artesanías haga frío o haga calor. Además, es un paseo grato para la familia. Se ofrecen ponchos a $2 mil; ruanas entre $ 2.000 y $ 2.500; aguayos de $ 900 a $ 1.600, y los típicos chulos hasta a $ 600.
Lucrecia Palacios sólo ofrece sus cerámicas y pasa el día en la plaza, por lo que observa el movimiento turístico: "Hay turismo, pero ve mucho los precios. Por ahora sólo compran piezas pequeñas, según ellos dicen que en el avión no las quieren llevar y que cuando vengan en vehículo llevarán cosas más grandes". El precio es también un tema que plantean. "Algunos se quejan, dicen que en Purmamarca está más barato, otros que en Humahuaca". Para Palacios "el precio está muy alto. En la temporada de invierno, estaban más baratas las ollas, ahora subieron, será porque hay mayor afluencia turística".
Caminando por las calles principales del pueblo, en la Belgrano, hay un restaurante que atiende Waldemar Calapeña, quien nos recibió gustosamente y comentó que tienen "un 90% de reservas. Venimos trabajando muy bien desde las vacaciones de invierno. En esta época del año antes era temporada baja, en cambio ahora sucede lo contrario", sostuvo. Consideró que el movimiento podría ser por "la época de la pandemia en que la gente no pudo viajar, ahora lo está haciendo y disfrutando del tiempo libre". Los comensales le solicitan elaboraciones típicas, como cazuela de cordero ($ 750), cebiche de quinua ($ 650), lomo de llama ($ 950) o también cordero a larga cocción ($ 1.100).
Un buen momento
El sector hotelero está atravesando un tiempo de excelencia y para los próximos meses se estima que continuará así. Silvina Menéndez, propietaria de un hotel, dijo a El Tribuno de Jujuy que “desde hace tres semanas atrás tenemos reservas, hemos alcanzado casi el 100% del hospedaje, hasta el 11 estará todo completo”. Para los próximos meses “tenemos algo de reservas, aproximadamente un 30%, pero seguramente superaremos ese porcentaje por las consultas que recibimos”. Desde julio hasta hoy “hubo una importante suba de visitantes, ya tenemos reservas para diciembre, cosa que antes no sucedía”. Para Menéndez el movimiento de estos últimos meses se debe a que la gente “busca lugares abiertos, y Tilcara cumple con esas expectativas. Tilcara ofrece otro turismo que nos favorece”. El Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación señaló que la villa quebradeña es una de las más elegidas en la segunda edición del Previaje, entre los destinos del NOA, junto a Cafayate. Desde la Provincia, se dijo que en dicho programa nacional, Jujuy ocupa el puesto número 15 en el ranking de destinos elegidos con 9.395 viajes contratados con un promedio de tres pasajeros por viaje, es decir casi 30 mil turistas. Mientras tanto, Tilcara y Purmamarca aparecen en el top 20 de los más elegidos.