El Proyecto queñoa tiene como fin poder recuperar el árbol nativo. Fue concebido a mediados de este año cuando se supo que estaban en peligro de extinción en la zona de Rumi Cruz. Actualmente se encuentra en marcha una campaña que tiene como fin recaudar fondos para el reacondicionamiento de invernaderos para la germinación de plantines de queñoa. "Largamos un llamado a la solidaridad para que puedan aportar con dinero en efectivo, desde los $100 pesos en adelante", dijo Griet Erica Cuyckens, bióloga del Conicet.
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El Proyecto queñoa tiene como fin poder recuperar el árbol nativo. Fue concebido a mediados de este año cuando se supo que estaban en peligro de extinción en la zona de Rumi Cruz. Actualmente se encuentra en marcha una campaña que tiene como fin recaudar fondos para el reacondicionamiento de invernaderos para la germinación de plantines de queñoa. "Largamos un llamado a la solidaridad para que puedan aportar con dinero en efectivo, desde los $100 pesos en adelante", dijo Griet Erica Cuyckens, bióloga del Conicet.
Los donativos exactamente son de $100, $500, de $1.500, hasta $10.000 y quienes lo hagan recibirán como contraparte obsequios. Una vez reunido el dinero se procederá a comprar chapas traslúcidas que permitirán el reacondicionamiento de invernaderos en la zona y así poder comenzar a germinar las semillas de queñoa. Cabe mencionar que este proceso ya dio inicio en un invernadero de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Jujuy (Unju), donde ya inclusive se cuenta con los primeros 20 plantines de queñoa.
"Es muy difícil poder producir plantines de queñoa, de 100 semillas se obtiene la germinación de una sola, entonces necesitamos juntar muchas semillas", detalló Griet Cuyckens. Agregó que el 7 de enero habrá un operativo en Muñarita (al noreste de Abra Pampa) para el juntado de semillas de queñoa en el que también se precisa de voluntarios.
El proyecto apunta, que tras la producción de plantines de queñoa, comience el operativo de plantación en la zona de Muñarita y Rumi Cruz, a 35 kilómetros al este de Abra Pampa, por diferentes sectores de la Puna donde sigue habiendo queñoa y en otros lugares donde está desapareciendo y hasta en aquellos donde ya no quedan. No se descarta realizar los trámites para que sean declarados oficialmente como sitios protegidos.
Para realizar los donativos ingresar a https://bit.ly/3GkeALj y también visitar la página de Facebook "Proyecto Queuña".
Únicos en el mundo
Las queñoas son los árboles que crecen a mayor altitud en el mundo. En la Puna son los únicos que pueden resistir al viento, la radiación solar, los extremos cambios de temperatura (mucho frio de noche y mucho calor de día), a más de 3.000 metros de altitud. Por lo tanto, son de fundamental importancia para la regulación del ciclo hídrico y evitar la erosión. A su vez, forman islas de gran biodiversidad en un paisaje árido y semiárido.
Son, además, importantes para los pobladores locales, ya que usan sus ramas caídas para leña, o postes para alambrado y en la construcción, al ser el único elemento arbóreo leñoso disponible. Los bosquecillos de queñoa también son usados para pastura del ganado menor y ofrecen sombra en un ambiente con alta radiación solar. Forman parte de la belleza paisajística y del patrimo‑ nio natural de los puneños. Las diferentes especies de queñoa están amenazadas a lo largo de toda su distribución, por lo que se necesitan urgentes acciones de restauración.