Fue el regreso esperado para Juan José Velasco a los Estados Unidos. El boxeador jujeño se impuso ante el boricua nacionalizado norteamericano Zachary Ochoa por puntos en fallo dividido en una de las peleas desarrollada en el “Mohegan Sun Arena” de Uncasville, Connecticut.
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Fue el regreso esperado para Juan José Velasco a los Estados Unidos. El boxeador jujeño se impuso ante el boricua nacionalizado norteamericano Zachary Ochoa por puntos en fallo dividido en una de las peleas desarrollada en el “Mohegan Sun Arena” de Uncasville, Connecticut.
El combate se realizó en la categoría superligero y las tarjetas de los jueces marcaron 97-93; 96-94 para el “Pitbull” y 94-96 a favor del neoyorquino que antes de la entretenida pelea aparecía como favorito, ya que poco a poco le van armando la carrera. Sin embargo el pugilista nacido en Palpalá tiene hambre de gloria, quiere seguir haciendo historia en el deporte de los puños y esperará ansioso poder tener una chance mundialista. Porque con esta importante victoria, Velasco regresa de esta manera a los primeros planos del campo internacional permitiéndole sumar puntos en el ranking mundial y acercarse a poder ser retador.
Volver a Estados Unidos, demostrar el nivel que tiene, y sobre todo la vigencia, no era una empresa fácil para el “Pitbull” Velasco, sus últimas presentaciones en el país norteamericano habían sido con dos catastróficas derrotas primero ante Regis Prograis y luego en manos de Mario Barrios, ambas por nocaut técnico, justamente las dos únicas derrotas que tiene el jujeño en su rico palmares de 25 peleas como profesional de las cuales ganó 1 veces antes del límite y con tan solo dos caídas. El jujeño actualmente es campeón sudamericano de la categoría superligero, pero también supo tener los cinturones Fedebol.
Por eso también para Velasco era importante ganar, necesitaba cambiar la imagen que había dejado en aquellas dos peleas pérdidas, fueron consecutivas, si aspiraba meterse otra vez en la consideración de los grandes promotores del mundo.
Sucede que en materia de economía dicen que “Dios está en todas partes, pero atiende en Buenos Aires”, en el mundo del boxeo es algo similar, porque lo mejor “se cocina” en Estados Unidos, allí dónde los flashes y las luces obnubilan a los que no están preparados y dejan pasar chances de gloria y sobre todo, importantes bolsas, que al fin y al cabo, es lo que al boxeador le interesa. El sábado Juan José Velasco les dijo a los estadounidenses que quiere revancha.