Un hombre que intentó asesinar a su exmujer, luego de hostigarla, acosarla y agredirla en la vía pública en distintos episodios, fue condenado hoy a 17 años de prisión efectiva por el Tribunal en lo Criminal Nº 3.
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Un hombre que intentó asesinar a su exmujer, luego de hostigarla, acosarla y agredirla en la vía pública en distintos episodios, fue condenado hoy a 17 años de prisión efectiva por el Tribunal en lo Criminal Nº 3.
Se trata de Raúl Pablo Pizarro quien había llegado a estas instancias judiciales, acusado de ser el autor de hechos de violencia de género contra su expareja, quien estaba embarazada.
Durante el juicio se debatió lo ocurrido en 2018, correspondiente a tres expedientes judiciales en los que Pizarro estaba acusado.
Sobre los hechos
De acuerdo con la acusación de la Fiscalía, el primer hecho ocurrió el 28 de junio del 2018, aproximadamente a las 23.10, en circunstancias en que la víctima, entonces embarazada, se habría encontrado con el acusado en la esquina de las avenidas Almirante Brown y Gobernador Tello, oportunidad en la que el hombre extrajo una tijera de su mochila, con la que produciría cortes debajo de la mejilla izquierda, en la oreja izquierda y en la parte superior de la cabeza de la mujer, interviniendo en esos momentos personas que circulaban por el lugar.
Por ello, Pizarro está imputado como supuesto autor de "lesiones leves calificadas por la calidad de la víctima y violencia de género".
El segundo hecho se produjo el 21 de septiembre del mismo año, alrededor de las 12.30, cuando la víctima, se encontraba caminando en la intersección de Avenida Mosconi y calle Las Corzuelas del barrio Chijra y de manera repentina apareció Pizarro, quién la agredió con golpes de puño y amenazas de muerte.
En el intento de defensa de la mujer embarazada, el imputado le habría propinado un "cabezazo" en el rostro y la derribó al suelo, sustrayéndole la mochila y le dio una patada en el abdomen, para luego huir del lugar. Pizarro ya estaba denunciado y había desobedecido la prohibición de acercamiento que fue ordenada por el Juzgado de Violencia de Género con anterioridad.
Debido a esto, Pizarro estaba imputado como autor de "lesiones leves doblemente agravadas por la condición de la víctima y violencia de género, amenazas, robo y desobediencia judicial".
El tercer hecho ocurrió el 2 de noviembre del mismo año, aproximadamente a las 6.45, en una vivienda ubicada en la intersección de las calles Yuto y El Piquete del Sector B-2 de Alto Comedero, cuando Pizarro irrumpió en la vivienda y le habría propinado a su víctima, aún embarazada, una feroz golpiza y le asestó tres puñaladas, produciéndole dos graves heridas, una en el abdomen y otra en la muñeca derecha.
Minutos más tarde y en ese estado, la denunciante se dirigió a su vivienda, ubicada en el mismo barrio, para pedir ayuda en la que el acusado habría ingresado sin autorización a continuar con el ataque.
La mujer salvó su vida gracias a la inmediata intervención de un vecino, que es policía y logró reducir al hombre que intentaba por todos los medios asesinarla.