Luego de que El Tribuno Jujuy diera a conocer una resolución por parte de la Cámara de Apelaciones, que otorgaba el cese de prisión preventiva para el policía acusado de asesinar al joven carmense Jairo Salcedo, en las últimas horas supo que el único imputado estando en libertad, podría entorpecer la investigación, por el cargo que ocupaba.
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Luego de que El Tribuno Jujuy diera a conocer una resolución por parte de la Cámara de Apelaciones, que otorgaba el cese de prisión preventiva para el policía acusado de asesinar al joven carmense Jairo Salcedo, en las últimas horas supo que el único imputado estando en libertad, podría entorpecer la investigación, por el cargo que ocupaba.
Nuestro diario tuvo acceso al trámite judicial que conmovió atoda la comunidad jujeña y dio cuenta que en mayo del 2020 los abogados defensores del imputado Esteban Rubelt, Alberto Bellido y Marcelo Calvó, presentaron un cese de detención y el entonces juez de Control Isidoro Cruz se opone, al igual que el fiscal del Ministerio Público de la Acusación, Diego Cussel. La defensa apeló la resolución y el expediente pasó a la Cámara de Apelaciones.
Lo que la sociedad debe saber, es que paralelo a este incidente dilatorio, en octubre del 2019, la Fiscalía solicitó el requerimiento de elevación de la causa a juicio y el Juzgado de Control dio lugar, considerando que había culminado la investigación penal preparatoria. A esta resolución también se opuso la defensa del policía Esteban Rubelt.
Recién en el mes de octubre del 2020, (un año después) la Cámara resuelve no hacer lugar al recurso de la defensa y ordena la devolución del expediente al Juzgado de Control para que sea elevado a juicio, pero esto nunca se dio cumplimiento y por alguna cuestión, el expediente nunca fue devuelto a su juez de Garantías natural.
Ahora bien, el pasado 25 de enero, el mismo juez Emilio Cattán que no dio lugar a los pedidos de la defensa, integrando un Tribunal en Cámara de Apelaciones, resuelve la apelación de prisión preventiva y hace lugar al cese de la misma.
Es decir que si se hubiera dado
cumplimiento a lo resuelto por el juez Cattán en octubre del año pasado, la causa estaría lista para fijar fecha de juicio oral y público, con el policía detenido.
Con todo este tecnisismo jurídico, parece ser que se ha dejado de lado que un efectivo policial que podría ser condenado a la pena de prisión perpetua, y por lo que se observó en el expediente hay suficientes elementos probatorios para que los investigadores crean en esto, llegue en libertad al debate oral, o decida fugarse o en el menor de los casos entorpecer la investigación.
Hay que recordar que el Rubelt se desempeñaba como efectivo policial en la ciudad de El Carmen y fue uno de los agentes designados para investigar el crimen de Jairo Salcedo y en un giro inesperado de la causa, los pesquisas lo detuvieron al encontrar cierto vínculo que el hombre mantuvo con la víctima.
Jairo fue asesinado de un disparo en abril del 2017, además su cuerpo fue arrollado al menos dos veces por su vehículo y tenía un golpe en la cabeza con un elemento contundente y para el fiscal, el único sospechoso del crimen es el policía Carlos Esteban Rubelt.