Un hombre, sobre el cual pesaba varias denuncias por violencia de género y que por esa razón tenía una restricción perimetral, ingresó al domicilio de su expareja y la agredió físicamente.
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Un hombre, sobre el cual pesaba varias denuncias por violencia de género y que por esa razón tenía una restricción perimetral, ingresó al domicilio de su expareja y la agredió físicamente.
Pese a la presencia del hijo mayor de la víctima, el hombre logró llegar hasta la mujer a quien golpeó con los puños y a patadas, mientras los familiares solicitaban la presencia policial a través de un llamado al teléfono de emergencias 911.
El hecho se registró en la tarde del pasado sábado alrededor de las 19 en un domicilio del barrio San Pedrito, cuando imprevistamente se presentó el individuo de 47 años quien violó la disposición judicial dispuesta para brindarle protección a la mujer.
Sobre los hechos
Fuentes policiales informaron que la víctima quedó tendida en el piso como consecuencia de los golpes recibidos que demandaron la presencia de una ambulancia del Same a los efectos de que sea asistida por las lesiones físicas y el shock nervioso en que se encontraba como consecuencia de la difícil situación vivida en su propio domicilio.
Personal del Comando de Seguridad se dirigió al lugar donde constató que el agresor se había dado a la fuga y que para ingresar había hecho uso de una llave que mantuvo en su poder.
Con la descripción aportada por el hijo de la víctima, la Policía realizó un operativo cerrojo con personal policial de la zona siendo observado cuando caminaba por la calle Alberro y al ver que se acercaban a él, emprendió la huida siendo posteriormente detenido.
Una vez trasladado a la subcomisaría San Francisco de Álava, fue puesto a disposición de la Justicia y se recepcionó la denuncia.