¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

22°
29 de Marzo,  Jujuy, Argentina
PUBLICIDAD

"La mujer tiene que volver a ver qué es lo que ella quiere ser"

Laura Barrojo estableció un panorama general sobre la figura femenina en la sociedad actual desde la psicología.
Viernes, 19 de marzo de 2021 01:01

Con todos los adelantos en cuestión de derechos humanos y libertades individuales, la mujer logró posicionarse con beneficios en distintos ámbitos pero, al mismo tiempo, es víctima visible de presiones y violencia.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Con todos los adelantos en cuestión de derechos humanos y libertades individuales, la mujer logró posicionarse con beneficios en distintos ámbitos pero, al mismo tiempo, es víctima visible de presiones y violencia.

La paradoja está puesta bajo la lupa de la psicóloga Laura Barrojo (MP236) en el marco de una situación actual donde se repite una ecuación para reflexionar.

"Creo que hay que replantearse el rol femenino y tratar de establecerse, entre el "yo puedo" o "qué puedo", también basarme en los derechos y obligaciones que me compete a mí como persona frente al otro, llamale varón, esposo, padre, hijo, amigo, compañero de trabajo", expresó Barrojo al referirse a la temática.

Desde su formación, resaltó que se pueden ejemplificar diversas situaciones. "En los medios, si no sale desnuda o con ropita ajustada parece que no estaría bien. Y en realidad la mujer tiene que volver a tratar de ver qué es lo que ella quiere ser. No digo que ponerse ropa sensual esté mal, pero no sólo con la ropa sensual es que una mujer, es mujer. La ropa no hace a la persona. Aquí el protagonismo lo tiene que tener la persona en sí", explicó la profesional.

Es decir en lo diverso que es cada persona, porque no hay una persona igual a otra. Todos somos únicos.

"Yo me respeto por mis valores y pido mi respeto al otro y yo también lo respeto al otro, con sus valores.

DIFICULTAD | AUNQUE LA MUJER TIENE MÁS LIBERTADES, SIGUE PREDOMINANDO EN EL CUIDADO DEL HOGAR Y LOS HIJOS

Tenemos que merecer y hacer valer ese respeto que pretendemos del otro", detalló la profesional que estableció, como pretendemos que nos respeten, también nos tenemos que respetar.

"Es una sociedad capitalista muy exigente que dice respetar pero al mismo tiempo se observa que no se respeta, hay violencia institucional, abusos de poder, abuso sexual, abuso económico y trata, femicidios, aborto y situaciones actuales de no respeto a la vida. Yo no noto que se respete todo, porque nos matan por pensar, por sentir, por hacer cosas que al otro no le gusta", aclaró.

Lo cierto es que en la actualidad, tanto la feminidad como la masculinidad se complementan.

En el interjuego personal, entre derechos, obligaciones y necesidades e intereses, es donde se expone en valor el desplegar a lo más que se pueda la feminidad que representa a la mujer que sabrá y hará cumplir sus actividades como lo desee.

"Se muestra mucha ambivalencia en el sentido de que se dice algo y se hace otra cosa, se piensa algo y se dice otra cosa. Se dice respetar a la mujer pero se le exige en televisión, por ejemplo, que muestre sus partes, que tenga relaciones sin cuidado, que diga palabras groseras, que se ponga beber a la par del hombre y en realidad esas cosas, si no están en la naturaleza misma de la persona, van en contra de lo que uno quiere hacer; pero las presiones sociales hacen que la mujer tenga que mostrarse a la par o en igualdad del hombre, pero no somos iguales, nunca lo vamos a ser; lo que sí tenemos que tener, es un trato equitativo", reflexionó.

La mentalidad del "sí puedo"

"Si yo necesito algo, lo puedo hacer. Si yo quiero estudiar una carrera que en su mayoría la estudiaban los varones, la puedo hacer hoy en día. Hoy tengo esta libertad para poder elegir mi carrera y mi trabajo, yo puedo elegir lo que yo quiero ser y hacer. Siempre dentro de un margen de respeto", esa es la percepción positiva que Barrojo resaltó.

En ese sentido la mujer logró avanzar en muchos campos, pero al mismo tiempo, no quiere ser objeto de manipulación.

"Aunque en algunos países sigue habiendo las mujeres que dan el tiempo y parece que tienen que ser sex symbol. Esa postura en donde se privilegia el exhibicionismo, no ayuda. Ni es una forma de respeto, porque se observa como que vale en cuanto en cómo se viste no en cuanto a la sapiencia que tenga con respecto a algún tema. Hay muchas libertades pero muchas presiones y la mujer tiene que hacer un equilibrio entre estas dos cosas", reflexionó la psicóloga cuyo rol es muy amplio y comprometido en la salud del ser.

Una mirada desde la psicopedagogía

PSICOPEDAGOGÍA EN LA EDUCACIÓN / TIENE UN PAPEL FUNDAMENTAL EN LOS NIÑOS

“La presencia femenina en lo que es el ejercicio de la profesión, siempre tuvo un mayor índice; esto también se ha modificado. En el desarrollo siempre predominó la presencia femenina”, destacó la psicopedagoga Érica Roxana Filipelli. Actualmente, la disciplina está jugando un papel muy importante en lo que es la valorización y el respeto del rol de la mujer, a la diversidad, a la cuestión del género. Es una disciplina que tiene distintos ámbitos de trabajo, desde lo institucional es fundamental poder trabajar por todos los actores de la comunidad educativa para formar y dar pleno auge, al respeto por la persona en toda su integridad.

“Ya sea por todos los derechos que hacen a las personas, se han ido generando leyes específicas. Desde la psicopedagogía, lo que se tiende a hacer es a optimizar los aprendizajes, a respetar la diversidad y hacer que se respeten los protocolos de intervención y de las leyes que están en vigencia para el respeto pleno de los derechos y de las reglamentaciones que hacen a que la cultura institucional vaya siendo modificada y además la escuela más inclusiva y que pueda respetar la diversidad”, destacó Filipelli. Considerada como una disciplina que fue cobrando mayor importancia en las últimas décadas, porque al ser una confluencia de psicología y pedagogía, como aporte específico al área de educación.

“Surgió formalmente en el país en la década de 1950. En su origen, nace como tomando elementos de ambas con el objeto de atender demandas sociales surgidas desde el ámbito escolar. Desde hace cincuenta años para acá, se han ido gestando en los institutos de nivel terciario y luego pudo surgir en las instituciones universitarias”. “Ahora conviven, tanto en la formación tanto universitaria como terciaria, ha ido generando muchos avances. En nuestra provincia se fue construyendo como un gran aporte para la comunidad”, finalizó Filipelli.