Un gendarme fue arrastrado unos 40 metros por una persona que había cruzado desde Villazón a La Quiaca por un paso ilegal del barrio Santa Clara, entre las calles Jujuy y Soldado Mario Gutiérrez, alrededor de las 15.30 de ayer.
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Un gendarme fue arrastrado unos 40 metros por una persona que había cruzado desde Villazón a La Quiaca por un paso ilegal del barrio Santa Clara, entre las calles Jujuy y Soldado Mario Gutiérrez, alrededor de las 15.30 de ayer.
Según informaron desde la fuerza a El Tribuno de Jujuy, tres efectivos pertenecientes al Escuadrón 21 de Gendarmería Nacional, con asiento en la ciudad de La Quiaca, patrullaban ese sector barrial. En el marco del operativo “Trigger VI de Interpol” y “Eslabón II de Ameripol”, divisaron un automóvil color negro que había traspuesto el límite internacional, al darle la voz de alto.
El conductor emprendió la huida por las arterias antes mencionadas, y en ese momento uno de los uniformados logró dar alcance al vehículo y tomó el volante, mientras era arrastrado por la calle. Fue así que pudo reducir al contrabandista. Al momento de identificarlo se trataba de un ciudadano con domicilio en La Quiaca, luego se procedió a requisar el automóvil.
La requisa del vehículo
En la caja del Fiat Siena había bolsas arpilleras color azul de donde emanaba un fuerte aroma característico de las hojas de coca. La novedad fue informada a la Fiscalía Federal Nº 2, quien ordenó que el conductor y el auto sean trasladados hasta la unidad actuante. Allí, ante testigos hábiles abrieron las bolsas en cuyo interior había paquetes rectangulares de hojas de coca totalizando 135 kilos del milenario vegetal.
La coca, según aforo aduanero, está valuada en 500 mil pesos. Seguidamente, el hombre quedó detenido, le secuestraron el celular y otros elementos para la causa, como así también la coca y el rodado. En tanto el gendarme herido fue trasladado hasta el hospital “Jorge Uro”, el médico de guardia determinó que presentaba una lesión en el pie derecho. A pesar de la temeraria determinación, no revestía gravedad su condición.
La zona norte de La Quiaca es uno de los puntos estratégicos utilizados por los contrabandistas para operar, y por donde el imputado pretendió huir sin importarle la vida de los efectivos. Por ley, la fiscalía solicitó al juez la formalización de la investigación penal por el delito de encubrimiento de contrabando y requirió autorización para avanzar con el peritaje del teléfono celular secuestrado al acusado.