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Un claro ejemplo de que los sueños se pueden hacer realidad

Lunes, 19 de abril de 2021 01:03

Existe mucha bibliografía vinculada a los sueños, sobre todo de autores que se especializan en inteligencia emocional, quienes aseguran que se hacen realidad si nos enfocamos y ponemos todo nuestro esfuerzo para alcanzarlos. Agregan que se materializarán si tenemos el coraje de perseguirlos porque no hay imposibles. Todo empieza en nuestra mente y corazón.

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Existe mucha bibliografía vinculada a los sueños, sobre todo de autores que se especializan en inteligencia emocional, quienes aseguran que se hacen realidad si nos enfocamos y ponemos todo nuestro esfuerzo para alcanzarlos. Agregan que se materializarán si tenemos el coraje de perseguirlos porque no hay imposibles. Todo empieza en nuestra mente y corazón.

Tanto los grandes logros de la humanidad como los individuales, por pequeños que sean, comenzaron siendo sueños, ideas, proyectos, que alguien tuvo la valentía de enfrentar.

El Tribuno de Jujuy es un claro ejemplo de un sueño que se materializa. Si bien, hubo un mentor, se sumaron luego otros soñadores, entre ellos los periodistas que abrazaron con pasión el desafío que se asemejó mucho a una suerte de cruzada.

El mentor, Roberto Romero, buscó a los mejores y lo hizo personalmente. Me consta porque mantengo vívido el recuerdo de una tarde de verano de 1979 cuando se entrevistó en una humilde vivienda del entonces barrio Arit, de Palpalá, con dos grandes periodistas que iban a hacerse cargo de la Corresponsalía del diario en la ciudad siderúrgica. Brunilda Figueroa Revol y Pedro Ballatore fueron llamados, como otros tantos, para participar del proyecto que iba a iniciarse el 19 de abril de 1980. Y en ese instante, el sueño adquirió dimensión colectiva.

ADMINISTRACIÓN JACQUELINE MENDEZ MEALLA JUNTO A SU EQUIPO DE TRABAJO

Fueron tiempos difíciles porque el otro diario que circulaba en la provincia dominaba la agenda periodística y comercial, además de gozar de la fidelidad de cientos de lectores que lo elegían sin vacilaciones. Entonces hubo que posicionar al nuevo matutino que ofrecía un producto moderno, con las mejores plumas dispuestas a informar con solvencia y riguridad.

La innovación, que fue permanente, se tradujo en un sinnúmero de rediseños que no se quedaron sólo con lo gráfico, sino también involucraron la redacción de las noticias y el material fotográfico. Fue además un momento de gran lucimiento de los fotógrafos, muchos de los cuales pasaron de la fotografía analógica a la digital. Entre ellos Germán, Hugo y Juan Fernández, quienes abrazaron con pasión ese sueño primigenio.

El edificio propio fue otro propósito que estuvo siempre presente entre los pioneros y los que se sumaron después. Fue el 2014 el año en que se cumplió esta aspiración de la mano del director ejecutivo Rubén Rivarola, quien en aquella oportunidad sintetizó la historia de nuestro diario. ‘Nació como una esperanza y un sueño, lleno de objetivos y de compromisos