En Jujuy tenemos dos grandes temas que siempre están presentes demandado a la clase política y dirigencial propuestas que nos permitan encaminarnos a disminuir las brechas. La pobreza y la falta de empleo son temas de recurrente preocupación en el Noroeste argentino, donde tuvimos en algunos momentos pequeños avances pero después también tuvimos grandes retrocesos, lo cual indica que estamos lejos de tomar el problema en serio.
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En Jujuy tenemos dos grandes temas que siempre están presentes demandado a la clase política y dirigencial propuestas que nos permitan encaminarnos a disminuir las brechas. La pobreza y la falta de empleo son temas de recurrente preocupación en el Noroeste argentino, donde tuvimos en algunos momentos pequeños avances pero después también tuvimos grandes retrocesos, lo cual indica que estamos lejos de tomar el problema en serio.
Buscar soluciones en este marco es una primera necesidad, por eso insistimos en la necesidad de la conformación de un Consejo Económico y Social en la provincia con la participación de trabajadores, empresarios del sector de pequeñas y medianas empresas, profesionales académicos y científicos y dirigentes políticos que entiendan la urgencia de buscar entre todos una solución ya que es una cuestión que excede a uno o dos partidos políticos y muestra la necesidad de trabajar en conjunto.
Un punto clave para avanzar en la búsqueda de soluciones es identificar las áreas en las cuales podemos generar más trabajo y apostar fuertemente a ellas.
Si analizamos la situación económica local, podemos ver que los principales factores económicos de la provincia siguen siendo los mismos desde hace décadas. En los últimos años han aparecido algunas pequeñas iniciativas que tratan de agregar algunas nuevas actividades, mientras por otro lado tenemos una crisis importante en el sector minero con la desaparición de algunas empresas emblemáticas de la provincia. Algunos de los nuevos proyectos no terminan de convencer y más allá de que hayan sido buenas ideas no hay certezas sobre cómo es la ecuación económica y dan muestras que en el futuro con seguridad habrá que revisar como se planteó la formulación del negocio en términos económicos porque no termina de cerrar cuál fue realmente el costo de la inversión en relación a las posibilidades de generar empleo real.
La realidad muestra que claramente seguimos necesitando un proyecto productivo integral que ordené en que en medida puede contribuir el turismo, en qué medida sigue contribuyendo la agricultura, la agroindustria, la ganadería y qué lugar ocupa la agricultura familiar en la generación de empleo.
Los jujeños tenemos la mala costumbre de creer que en Jujuy descubrimos la actividad que va a salvar la economía de la provincia y apostamos fuertemente a una actividad que creemos que la salvadora. Sin embargo experiencia tras experiencia descubrimos que no es así y que tenemos que seguir trabajando con las actividades tradicionales e ir sumando actividades nuevas pero desde un proyecto surgido del consenso que brinde herramientas de promoción de las actividades nuevas que realmente generen más trabajo.
Desde hace unos años hasta hoy se miró al litio con muchas expectativas. Pero hay que tener en cuenta que aún hay una situación nacional que resolver para que realmente sea un recursos estratégico. Tenemos que asegurarnos de que haya un modelo de explotación y de distribución de beneficios distinto al que tuvimos con otros recursos naturales que no dejaron grandes ganancias en Argentina sino en otro país. Tenemos que definir sí vamos a repetir el viejo modelo de extraer un recurso natural en la Argentina para después importar productos industrializados a partir de nuestro recurso natural.
Tenemos que definir también sí vamos a repetir la historia y vamos a creerle a las empresas automotrices que toda la cadena de valor del litio y el paso a la electromovilidad se va realizar en el país. En este sentido, Jujuy tuvo un gran retroceso en la políticas de explotación del litio como recursos estratégico cuando eliminó el Comité de Expertos que tenía como fin revisar los proyectos de exploración y explotación garantizando un nivel de calidad mínimo.
Hoy hay proyectos que no tienen la calidad necesaria, hay proyectos que se presentan que realmente merecen perfeccionarse y merecen corregirse mucho. Otra de las tareas centrales del Comité de Expertos del Litio era ver que cada proyecto generará la mayor cantidad de fuentes de trabajo posibles y que esos empleos que pudieran cubrirse con la oferta local. Eso lamentablemente se eliminó y hoy queda a libre albedrío de las empresas y si los trabajadores son o no de la provincia.
Por eso, en definitiva tenemos que seguir apostando a lograr un acuerdo general para proponer acciones, medidas y compromisos de todos los sectores para generar más trabajo, generar empleo de calidad. Y por supuesto nosotros siempre pensamos que en esas mesas tiene que estar el sector científico-académico haciendo su aporte. Humildemente desde la Universidad Nacional de Jujuy hemos propuesto la creación del Centro de oficios que va a recibir financiamiento de la Secretaría de Políticas Universitaria y va ha comenzar a funcionar durante este año y que va a tener su primera sede en el barrio de Alto Comedero y es un valioso aporte a la generación de empleos de calidad.