Hace 24 años, cuando en 1996 mayo dejaba caer en el calendario del tiempo su décimo quinto día, niños y jóvenes con discapacidad motora o multidiscapacidades encontraban una puerta que se abría y que les permitiría caminar con esperanza en la vida, la Asociación para la Rehabilitación Motora (Aprem), apostando con el paso de los años a la inclusión educativa. Y bajo el cálido sol de mayo, que apareció luego de frías jornadas, la comunidad educativa celebró un nuevo aniversario.
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Hace 24 años, cuando en 1996 mayo dejaba caer en el calendario del tiempo su décimo quinto día, niños y jóvenes con discapacidad motora o multidiscapacidades encontraban una puerta que se abría y que les permitiría caminar con esperanza en la vida, la Asociación para la Rehabilitación Motora (Aprem), apostando con el paso de los años a la inclusión educativa. Y bajo el cálido sol de mayo, que apareció luego de frías jornadas, la comunidad educativa celebró un nuevo aniversario.
Muchos sentimientos encontrados hubo en la festiva jornada, por un lado, la angustia por la orden de desalojo que debe ejecutarse el primer día de junio de este año y que, de realizarse, dejaría a más de 60 niños y jóvenes en la calle, sin la posibilidad de poder rehabilitarse y por otro, las fuerzas, las ganas y fundamentalmente, el amor que mantiene viva la llama para luchar por lo que se ama. Así fue el cumpleaños de Aprem, en medio de esta pandemia, donde un virus asusta tanto como también asusta la falta de solidaridad, de compromiso y de humanidad.
De esta manera, y con un sentido acto, la familia de esta querida institución ingresó a este camino que la llevará hacia las Bodas de Plata, que seguramente celebrará el próximo año. Todos aguardaban el regalo de cumpleaños, el tan esperado anuncio de la entrega de un terreno para poder construir la casa propia, pero ninguna autoridad invitada se hizo presente, solo estaban aquellos que, movilizados por el corazón, decidieron unir manos y voluntades para ayudar a Aprem, en esta batalla.
El acto conmemorativo de estos 24 años de viva presencia en la comunidad comenzó en horas de la mañana y tuvo como escenario el patio de la institución, en el edificio que alquila desde hace 24 años al Consejo de Administración del Fondo Fiduciario del exIpps (Caffipps), ubicado en barrio 23 de Agosto. Acompañaron a la comunidad educativa la Asociación Nano, Asociación de Veteranos de Guerra de Malvinas, integrantes del centro vecinal, la coordinadora de discapacidad Florencia Moya, exintegrantes de comisiones directivas de Aprem, vecinos, entre otros.
Luego del ingreso de las Banderas de Ceremonia y las instancias protocolares, se tributó homenaje al recordado alumno José Toledo, quien falleció el año pasado, con la imposición de su nombre a una de las aulas, entre otros homenajes hubo momento para el canto, para la entrega de recordatorios y presentes y no faltó la torta y el feliz cumpleaños, con los deseos de que llegue una respuesta al pedido realizado.
La presidenta de Aprem, profesora de Educación Especial Lorena Marta Ladrú, en un sentido mensaje dirigido a los alumnos, les pidió que se sientan tranquilos, porque el plantel docente, los profesionales y las personas identificadas con el ideal y conocedoras de los nobles objetivos de la institución estarán de pie para defender la institución que los alberga, los rehabilita y propicia la inclusión educativa.
"Hoy estamos de cumpleaños, y si bien es cierto que sentimos mucha incertidumbre ante esta intimación que nos hicieron a través de cartas documentos, donde prácticamente nos anuncian el desalojo, porque no nos renuevan el alquiler, quisimos detenernos un momento y dedicar esta semana para sacar a los chicos de este clima tenso, que disfruten de una semana plena de actividades. El lunes iniciamos con la ornamentación de las salas, el martes realizamos la línea del tiempo, el miércoles la exposición de la línea del tiempo con los trabajos de artesanía básica en plaza Belgrano, el jueves fue el concurso de collage del logo de Aprem, el viernes concurso de talento y el corolario fue el acto central", dijo Lorena Ladrú.
En otro tramo, sostuvo que se cuenta con una matrícula de más de sesenta alumnos, un plantel de doce profesionales y docentes, y que se estaba a la espera de la inspección por parte del Instituto de Seguros de Jujuy para que los profesionales puedan comenzar a facturar, ya que hasta el momento no perciben sueldo.