El desgarrador llanto de dos criaturas alertaron a los vecinos de una vivienda en la localidad de Huacalera y cuando ingresaron se dieron con el cuerpo de Camila Peñalva (26) sobre la cama tendido boca abajo, aplastando las piernas de su hija de 5 años y a unos cuantos centímetros un bebé que no paraba de llorar de apenas 9 meses.
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El desgarrador llanto de dos criaturas alertaron a los vecinos de una vivienda en la localidad de Huacalera y cuando ingresaron se dieron con el cuerpo de Camila Peñalva (26) sobre la cama tendido boca abajo, aplastando las piernas de su hija de 5 años y a unos cuantos centímetros un bebé que no paraba de llorar de apenas 9 meses.
La investigación preliminar había establecido que la fría madrugada del 5 de marzo del año pasado, Peñalva se había broncoaspirado, luego de haber bebido alcohol y haberse quedado profundamente dormida.
Esta escueta hipótesis dejó más dudas que certezas a la madre de la víctima, Matilde Peñalva, quien no entendía cómo se pudo haber muerto su hija por broncoaspiración y fue hallada boca abajo.
Poco más de nueve meses después de la muerte de la joven madre, la Justicia determinó que había sido envenenada, ordenaron el cambio de carátula y por el hecho se solicitó la detención de Roberto Quipildor (43), padre de la hija mayor de la víctima, quien pese a estar separado, ejercía violencia de género sobre Camila Peñalva.
Además de ser apuntado como la última persona que la vio con vida según el relato de los testigos, vecinos de la joven madre.
Pero para que esto ocurriera, Matilde Peñalva, madre de Camila, tuvo que recurrir al médico de parte Javier Guzman que analizó los elementos probatorios, descartó la broncoaspiración y los resultados fueron muy distintos a los del médico del Ministerio Público de la Acusación, lo que dio lugar al giro en la causa y que se investigue como femicidio y Quipildor sea imputado por "homicidio triplemente agravado por el vínculo, la utilización de veneno y por violencia de género".
Pasaron casi 15 meses del crimen de Peñalva y se determinó que bebió o la obligaron a beber un plaguicida. Pero además de la investigación se fueron desprendiendo datos que no dejan de conmocionar a la comunidad de Huacalera que en los últimos tiempos, fue testigo de filicidios, femicidios y otros aberrantes hechos.
"Yo recién me voy enterando de todas las cosas que este personaje le hacía a mi hija y a mis nietos. Pero voy entendiendo todo lo que pasaba. Mi hija había decidido terminar la relación con Quipildor, justamente porque era muy violento con ella y mi nietito que no era hijo de él y le tenía mucho miedo. Los vecinos me contaron que en más de una oportunidad Quipildor atropelló con su moto a mi hija que lo llevaba al bebé en el coche y mi nieta, que es hija de él, me contó que Quipildor entraba cuando él quería a la casa de mi hija y empezaban a discutir y a pelear", le dijo a nuestro diario Matilde Peñalva.
"Quipildor odiaba al bebé, le pegaba y desde que mi hija fue mamá por segunda vez, era muy violento con ella, según me contaron las amigas de mi hija en estos últimos tiempos".
La investigación se encuentra en plena etapa investigativa, con el hombre de 43 años detenido, quien se abstuvo a prestar declaración defensiva ante el fiscal, pero los elementos probatorios adjuntados al expediente judicial comprometen al hombre acusado del hecho.
El próximo 31 de mayo, Matilde Peñalva se unirá a la marcha convocado por "las madres del dolor" para reclamar justicia y que de una vez se sepa cuál fue el móvil que terminó con la vida de su hija y dejó a dos criaturas totalmente desamparadas.
"No hay día que mi nieta no pregunte por su mamá, tiene los ojos muy tristes y eso me parte el corazón. Este hombre nos destrozó el corazón", dijo Peñalva.